Presidente de Venezuela Nicolás Maduro durante un acto de campaña. Foto: Joka Madruga bajo licencia Creative Commons.

Hurgar en la vida ajena, buscar amigos de la infancia, mantenerse en contacto con seres lejos, encontrar el amor de su vida o simplemente exhibirse cual vitrina virtual, son algunas de las utilidades que los usuarios de Facebook dentro y fuera de Venezuela han encontrado para esta popular red social.

La plataforma de Mark Zuckerberg contagió a los venezolanos a partir de 2007 con un crecimiento muy rápido. Se calcula que el 40% de los 30 millones de personas que viven en este país suramericano tiene una cuenta.

Pero a partir del 9 de febrero se sumó a las estadísticas alguien que no es un usuario cualquiera. Se trata del mismísimo presidente de la República, Nicolás Maduro.

Los invito a tod@s a activarse en mi cuenta de Facebook que a partir de hoy llevaré para comunicarme a diario… https://t.co/oLjq0bh5GT

— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) February 9, 2016

La llegada de Maduro a Facebook, casi una década de estallar la “fiebre” en su país, ocurre en un momento muy particular de la vida venezolana. Una crisis económica sin precedentes aqueja al país con múltiples problemas para sus habitantes, como altísima inflación y escasez de productos básicos.

Venezuela es el país con la inflación más alta del mundo y con niveles de escasez de un país en guerra. https://t.co/fOiIeeqJyh

— Miguel Velarde (@MiguelVelarde) February 5, 2016

Muchos han utilizado las primeras horas de esta nueva ventana para hacer petitorios, pero no ha faltado el reflejo de la profunda polarización política. Con algo más de 170 mil seguidores, en “su muro” se leen cosas así:

Captura de pantalla del muro de Facebook de la cuenta del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

“Yo no seré hipócrita ni hala bola, usted sabe que el país esta mal, por culpa de su ineptitud y la de su gabinete. Sabe que el país está en la quiebra porque se robaron todo el capital que tenían para invertirlo en Venezuela. Sea consiente y haga algo bueno en su vida como renunciar y pegarse un tiro, ya que ni usted ni ninguno de los suyos sirven para nada. ¡Pudrase [sic], Nicolas Maduro!”, le dice quien se identifica como Geo Loyal.

Entre tanto Arelis Angarita le comenta:

Se le saluda mi presidente en verdad no quisiera estar en sus zapatos ,le ha tocado una guerra muy fuerte siempre sere leal , a pesar de las dificultades y saldre a defender el legado de mi amado gigante Chavez”

“Presidente, los seguros sociales estan plagados de escualidos empezando por rotondaro saquelo [sic], muchas guarimbas institucionales por favor ,directores escualidos jefa de ´personal escualidad y pare de contar DIOS le bndiga unidad lucha batalla y victoria venceremos”, le apunta José Ontiveros.

Nada edulcorado es Ruben D. Sanchez quien lanza:

Entre aquí por curiosidad pero no puedo mantenerme un minuto mas en esta pagina al ver tantos comentarios de gente tan ignorantes que aun creen que este señor es lo mejor que le ha pasado a nuestro pobre país”.

Lo cierto es que el chavismo se ha mantenido una postura variante a través de estos 17 años ante el mundo virtual. En un principio se llegó a satanizar la red de microblogging Twitter, acusándola de ser un “medio de penetración imperialista para mentirle a los venezolanos”.

Pero esa visión cambió en abril de 2010 cuando el entonces presidente Hugo Chávez creó su cuenta @chavezcandanga que convirtió en todo un suceso y por dos años fue una importante fuente de información para el mundo entero sobre anuncios y puntos de vista del mandatario.

Hace rato conversé con nuestra Compañera Presidenta Dilma… Y con los CompañerosPresidentes Putin, Luckashenko, Evo y Rafael Correa!!!

— Hugo Chávez Frías (@chavezcandanga) October 8, 2012

Sin embargo, han sido varios los tuiteros que ha terminado presos por expresar sus opiniones e incluso el servicio llegó a estar bloqueado en 2014, durante las protestas ciudadanas de febrero de ese año.

Su heredero e hijo político, Nicolás Maduro, ha seguido en esta línea y abrió el perfil @NicolasMaduro una vez convertido en Jefe de Estado de los venezolanos. Hoy cuenta con 2 millones 700 mil seguidores.

La aproximación entonces al mundo 2.0 se ha visto más como una posibilidad de “contraofensiva” ideológica y forma parte de la política comunicacional del Estado. El chavismo dejó de ignorar y estigmatizar este frente y se integró a él.