
«Los 13 de Heathrow» fueron a juicio por ocupar la pista norte de Heathrow el pasado julio. Foto: Plane Stupid.
Este artículo está basado en una nota escrita por Melanie Mattauch para 350.org, organización que se dedica a construir un movimiento mundial por el clima, y se republica en Global Voices como parte de un acuerdo para compartir contenidos.
El 24 de febrero, se esperaba que los 13 individuos que bloquearon una pista para protestar contra la ampliación del Aeropuerto Heathrow de Londres fuesen enviados a prisión pero, en cambio, terminaron siendo sentenciados a seis semanas de libertad condicional. Estos individuos habían hecho las maletas y activado sus mensajes automáticos de «fuera de oficina» anticipándose a convertirse en los primeros activistas en el Reino Unido que recibieran una sentencia de prisión.
En el caso de los llamados Heathrow 13 (los 13 de Heathrow), esto es lo que sucedió: en julio del año pasado, una comisión asignada por el gobierno del Reino Unido recomendó la ampliación de Heathrow. Dos semanas más tarde, 13 personas de la red de acción directa Plane Stupid bloquearon pacíficamente una de las pistas de Heathrow en protesta contra la expansión de la industria de la aviación debido a que contribuye a la contaminación atmosférica y al cambio climático. El bloqueo duró seis horas y causó la demora o cancelación de docenas de vuelos.
El grupo incluía a un físico atmosférico de 68 años y a Danielle Paffard, coordinadora de la campaña de desinversión de 350.org en el Reino Unido. En el juzgado, argumentaron que sienten una responsabilidad moral de actuar como ciudadanos comunes allí donde los procesos democráticos, legislativos y políticos no logran ocuparse de la amenaza que la industria de la aviación representa para el clima y la salud de la gente.
La integrante de Heathrow 13 de treinta y dos años, Melanie Strickland, que trabaja para una organización benéfica para la salud en Londres, dijo:
When the political system is so fundamentally flawed that it is unresponsive to an issue of colossal international importance, such as climate change, then every citizen has a responsibility to act. There is a basic human, moral and social duty to take action to prevent this disaster and to wake people up.
Cuando el sistema político presenta fallas tan fundamentales que no reacciona frente a un asunto de una importancia internacional colosal, como es el cambio climático, todos los ciudadanos tienen la responsabilidad de actuar. Hay un deber básico humano, moral y social de tomar cartas en el asunto para prevenir este desastre y hacer que la gente abra los ojos.
Actualmente, la aviación es la causante del 2 al 5% de las emisiones mundiales, pero la rápida expansión de la industria podría ver ese porcentaje saltar al 22% para el año 2050, según un estudio reciente del Parlamento Europeo. La aviación es una de las fuentes de emisiones de mayor crecimiento y, sin embargo, permanece ampliamente exenta de requisitos de reducción de emisiones además de gozar de reducción de impuestos, lo que mantiene los costos de viaje aéreo artificialmente bajos.
Un párrafo sobre las emisiones causadas por la aviación y el transporte marítimo, que figuraba en un borrador del acuerdo logrado en la cumbre del clima de las Naciones Unidas (ONU) realizada en París en diciembre de 2015, fue eliminado del texto final. Sumado a esto, las nuevas normas establecidas por la Organización de Aviación Civil Internacional de la ONU son demasiado débiles como para lograr un impacto significativo. Además de alimentar el cambio climático, las emisiones de una tercera pista en Heathrow podría causar 150 muertes prematuras por año para el 2030, de acuerdo con un cálculo del MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts).
A pesar de que la jueza reconoció que los 13 de Heathrow eran «personas apasionadas y con principios» y que el aeropuerto viola las regulaciones de la Unión Europea sobre emisiones, los declaró culpables del delito de «intromisión ilegítima agravada» y les advirtió que esperaran sentencias de prisión inmediatas cuando retornaran al juzgado.
La intromisión ilegítima agravada es un delito introducido durante el gobierno de Margaret Thatcher (1979-1990) con el objetivo de frenar las protestas. En 2013, un experto independiente de la ONU recomendó que el Reino Unido revisara su legislación sobre el orden público, en particular con «gran preocupación sobre el uso de la figura de intromisión ilegítima contra personas que están realizando protestas legítimas». Un especialista en derecho penal dijo que la posibilidad de una pena de privación de libertad era «extremadamente sorpresiva». Diez de los 13 de Heathrow no tienen condenas anteriores.

«Los 13 de Heathrow» en la puerta del juzgado de paz de Willesden. Foto: Plane Stupid.
Mientras tanto, en Francia…
Hay otra lucha antiaviación en Europa que está tomando impulso. En Francia, la batalla en contra de los planes para construir el aeropuerto más grande de Europa en Notre-Dame-des-Landes (NDDL), a unos 25 kilómetros de Nantes, se puso candente como consecuencia del acuerdo de París. Una petición que argumenta que el aeropuerto no es compatible con el acuerdo de París sobre el clima y que insta al gobierno francés a intervenir reunió más de 11,000 firmas en sólo 24 horas.
La batalla contra el aeropuerto en Notre-Dame-des-Landes se ha convertido en lo que podría llamarse la lucha más emblemática del movimiento francés por el clima y la justicia social. Muchos consideran que el proyecto del aeropuerto representa un sistema de expansión innecesaria que sirve a los intereses económicos de una minoría a costa de las comunidades locales, la subsistencia de los campesinos, el medio ambiente y el clima.
Cientos de personas han estado ocupando el lugar por años. Recientemente, 11 familias de campesinos anunciaron que se opondrán a una orden de desalojo y que están preparados a correr el riesgo de encarcelamiento. Veinte mil personas cortaron la carretera de circunvalación de Nantes en enero para protestar contra el proyecto. Había otra movilización masiva programada para el 27 de febrero.