
El cara a cara de la policía y los agricultores un día antes de la dispersión de la manifestación. Fuente: Kilab Multimedia / Facebook.
Dos muertos y varios heridos fue el saldo después de que la policía dispersara a una barricada armada por agricultores que exigían arroz y asistencia alimentaria en Cotabato, una provincia situada en el sur de Filipinas.
El año pasado, los expertos advirtieron que muchas partes de Filipinas sufrirían sequía severa causada por el fenómeno climático El Niño. Instaron al gobierno a preparar y adoptar medidas de atenuación para prestar asistencia a los agricultores y otros sectores vulnerables de la población.
Mientras las tierras comenzaban a secarse debido a El Niño, muchos agricultores se vieron incapaces de producir suficientes cosechas para vender, y el índice de hambruna aumentó en las zonas rurales.
Cotabato es una de las provincias que aún se están recuperando del impacto negativo de El Niño. El Gobierno Provincial declaró el estado de calamidad en enero de 2016, lo que le permitió acceder a fondos y otras formas de asistencia por parte del gobierno nacional.
Dos meses más tarde, los agricultores de la provincia se quejaron de que todavía no habían recibido el racionamiento de arroz y otros subsidios de alimentos por parte del gobierno local. El 28 de marzo, más de 5000 agricultores decidieron actuar manifestándose en la carretera principal. Se comprometieron a permanecer en el lugar y mantener una barricada hasta que el gobierno cediera 15000 sacos de arroz. También exigieron el desembolso inmediato de los fondos para desastres para ayudarles a sobrevivir y aliviar su sufrimiento.
Tras fracasar en su intento por convencer a los agricultores de que terminaran su protesta, el gobierno local ordenó a la policía el 1 de abril desmantelar la barricada, dispersar la manifestación y arrestar a los líderes del grupo. Se produjo una violencia que llevó a la muerte de dos agricultores. Según las primeras estimaciones, el número de heridos aumentó a 116, mientras que 87 siguen desaparecidos. Más tarde se descubrió que algunos a quienes se había dado por desaparecidos fueron en realidad detenidos por la policía.
La etiqueta #BigasHindiBala (arroz, no balas) fue tendencia en Twitter mientras los internautas comentaban activamente el tema. Se criticó a la policía por utilizar armas de fuego durante la dispersa, ya que es una violación de la ley. Muchos cuestionaron por qué el gobierno tuvo que recurrir a la violencia cuando los agricultores hambrientos solamente pedían comida.
Las autoridades locales y la policía alegaron que los manifestantes estaban ocupando la carretera de manera ilegal y causando molestias públicas. La policía añadió que solo actuaron en defensa propia en contra de los manifestantes rebeldes. El gobernador insistió en que hay arroz disponible, pero que se deben seguir ciertos procedimientos si los agricultores querían obtenerlo del gobierno municipal.
Cuando el gobierno rechazó la demanda de los agricultores, se lanzó una campaña de donación que inspiró a muchas personas, grupos e instituciones a ofrecer asistencia a los agricultores manifestantes.
Desde la violenta dispersión el día 1 de abril, el presidente del país todavía no se ha pronunciado sobre el tema, pero sus subordinados han anunciado que se abrirá una investigación imparcial sobre el incidente. Sin embargo, también se preguntaron públicamente si los agitadores de izquierda pudieron haber manipulado a los agricultores para unirse a la protesta.
Sin embargo, la pregunta de muchos sigue sin respuesta: ¿es correcto disparar a agricultores hambrientos que solo pedían comida del gobierno?

La policía abrió fuego a los protestantes, lo que acabó con la vida de dos agricultores. Se desplegaron también camiones de bomberos para desmantelar la manifestación. Fuente: Kilab Multimedia / Facebook.

Tras la dispersión de la protesta, los agricultores buscaron refugio en las instalaciones de la Iglesia Metodista Unida. Fuente: Kilab Multimedia / Facebook.

La donación de arroz empezó a llegar para los agricultores que habían sido dispersados en Cotabato. Fuente: Kilab Multimedia / Facebook.

Trabajadores en Manila protestan frente a la sede de la policía nacional para condenar el desmantelamiento violento de las manifestaciones en Kidapawan. Fuente: Kilusang Mayo Uno (May First Movement) / Facebook.