Desde marzo, miles de agricultores que pasan hambre en la meridional isla de Mindanao en Filipinas han estado realizando diversas formas de manifestaciones en el centro de las ciudades para exigir el reparto inmediato de arroz destinado a las víctimas de la sequía.
A causa del fenómeno climático de El Niño [2], que se ha traducido en una grave escasez de agua y en una sequía de las tierras irrigadas del área rural del país, los agricultores no han podido sembrar por muchos meses. A comienzos de este año muchas provincias de Mindanao se declararon [3] en estado de calamidad, lo que significa que las autoridades locales están autorizadas a usar fondos especiales a fin de proporcionar ayuda alimenticia a los residentes afectados.
Pero en marzo muchos agricultores se quejaron de que el arroz entregado por el gobierno aún no se había distribuido en sus aldeas. Más de 4.000 agricultores se reunieron [4] frente a un depósito gubernamental de arroz en la ciudad de Kidapaguán exigiendo la entrega de arroz y fondos para catástrofes. Pero en lugar de entregar arroz a los agricultores la policía dispersó violentamente la barricada de protesta callejera el 1 de abril 2016.
A causa del incidente la etiqueta #BigasHindiBala (Arroz no balas) marcó tendencia entre los usuarios de Internet luego de que ellos cuestionaron la decisión de la policía de atacar a los agricultores que simplemente pedían alimentos. Muchos comentaron también que es trágico ver a los productores de alimentos del país con hambre mientras los políticos son lentos para hacer frente a la catástrofe producida por el desastre de El Niño.
Se lanzó una campaña de donación de arroz que fue activamente apoyada por varios grupos caritativos, ciudadanos y celebridades.
Pocos días después del sangriento despliegue policial en Kidapaguán, los agricultores de las provincias cercanas de Mindanao organizaron su propia protesta para exigir el arroz del gobierno.
En el Norte de Mindanao, el líder campesino Ireneo Udarbe explica el impacto [7] de El Niño en las comunidades rurales:
Our livelihood is dependent on the land which is now too parched to grow anything. Farmers are innovative. We can look for alternative crops to plant, find some growths that are edible. But right now there is simply nothing – just hectares of dust that even weed won’t grow on.
Nuestra subsistencia depende de la tierra que ahora está muy seca para que crezca algo. Los agricultores son innovadores. Podemos buscar cultivos alternativos, encontrar algunos …. que son comestibles. Pero en este momento simplemente no hay nada – solo hectáreas de polvo donde ni las malas hierbas crecen.
Cerca de 5.000 agricultores se reunieron en la ciudades de Valencia y Malaybalay para presionar al gobierno a distribuir arroz a las víctimas de la sequía.
La manifestación tuvo éxito después que el gobernador de la provincia prometió distribuir un saco de arroz a cada familia de agricultores afectados por El Niño. También se comprometió a distribuir un saco de semillas y dos sacos de fertilizante por hectárea a los agricultores en la preparación para la temporada de siembra.
En la provincia de Cotabato del Sur cerca de 3.000 agricultores bloquearon una carretera nacional en la capital regional para pedir la distribución de arroz. Después de cinco días el gobierno local acordó entregar 25 kilos de arroz como subsidio mensual para todos los agricultores afectados por la sequía de la región hasta la próxima temporada de cosecha.