- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

Empresas japonesas brindan evaluaciones de estrés a empleados que trabajen en exceso ¿pero es suficiente?

Categorías: Asia Oriental, Japón, Economía y negocios, Medios ciudadanos, Trabajo
Workers wait for the train home. [1]

Trabajador japonés aguarda la llegada del tren tras un largo día de trabajo. Imagen del usuario de Flickr tokyoform [1].

Debido al incremento en los problemas de salud mental relacionados a la ocupación, el gobierno japonés ha modificado la ley para instar a las compañías a que proporcionen «evaluaciones de estrés» anuales a sus colaboradores [2]. Este control de salud mental no obligatorio se suma a las revisiones médicas anuales, que a las compañías se les exige proporcionar.

Esta evaluación estará conformada por un cuestionario de 57 preguntas de respuestas múltiple. Incluye mediciones como «Tengo una carga de trabajo extremadamente grande por realizar» y «estoy exhausto». Quiénes realicen dicha evaluación tienen cuatro opciones de respuesta que varían desde «bastante» hasta «nada en absoluto». A los colaboradores se les insta realizarla, aunque no es imperativa.

El propósito de la evaluación

Según informó Yahoo News Japan [3], estas evaluaciones de estrés se introdujeron como una solución al reciente aumento en los problemas de salud mental, con el fin de prevenir trastornos mentales como la depresión.

 うつ病の患者数も00年以降、大幅に増加している。[厚生労働省]は労働安全衛生法の一部を改正して企業にストレスチェックを義務付けた。50人以上の事業所では15年12月から毎年1回、医師や保健師による検査の実施が必要になった。ストレスが高い場合は医師の面接を受けて助言してもらうなど、メンタルヘルス不調を未然に防止する仕組みだ。

La cifra de casos de depresión ha estado aumentando bruscamente desde el año 2000. El Ministerio de Salud, Trabajo y Asistencia Social modificó la ley de Salud y Seguridad Industrial con el fin de obligar a las empresas que tienen más de 50 empleados a brindar evaluaciones de estrés anuales, que sean llevados a cabo por doctores o enfermeras especializados en medicina del trabajo, a partir de diciembre de 2015. Al permitir que los empleados bajo mucho estrés hablen con un doctor, la iniciativa pretende advertir problemas de salud mental de manera temprana.

A salaryman crosses the street [4]

Un oficinista cruza la calle. Imagen del usuario de Flickr tokyoform [4].

Las empresas no están preparadas

A pesar de que el mes de noviembre fue el plazo límite para suministrar las primeras revisiones anuales, muchas compañías se demoraron. TBS News informó [5]:

 最初の期限は今月末までで、厚労省はパソコン用の無料ソフトを提供していますが、従業員1000人未満の企業で実施した割合は3割前後にとどまっているという民間の調査結果も出ています。

A medida que se acerca el fin de mes como plazo límite, el Ministerio de Salud ha proporcionado a las compañías software gratuito para ayudarles a implementar las evaluaciones de estrés. Sin embargo, según una encuesta realizada por una entidad privada, solo alrededor del 30 por ciento de compañías que tienen menos de mil empleados han presentado las mismas hasta el momento.

¿Serán estas evaluaciones eficaces?

Puesto que no son obligatorias, los colaboradores pueden estar renuentes a someterse a las mismas. Y mientras que los doctores pueden brindar recomendaciones a los empleadores basándose en los resultados (que son confidenciales), en definitiva, es responsabilidad de las compañías crear mejores entornos de trabajo.

Algunos usuarios de Twitter incluso se quejaron, un tanto paradójicamente, de que la evaluación en sí es estresante.

No tengo espacio para escribir, «me siento estresado como consecuencia de esta evaluación de estrés».

¿Trabajar para vivir o vivir para trabajar?

El equilibrio trabajo-vida es un concepto un tanto desconocido en Japón, donde la lealtad hacia la empresa donde uno trabaja es con frecuencia una prioridad. Aunque los datos de la OCDE [7] indiquen que, en promedio, los japoneses trabajan horas similares a las de sus contrapartes en otras naciones desarrolladas, Estados Unidos e Israel acumularon más horas laborales que Japón en 2014, esas estadísticas pueden ser engañosas [8] por numerosas razones.

En primer lugar, gran parte de la fuerza laboral de Japón está conformada por trabajadores a tiempo parcial [9]. La liberación del mercado laboral de Japón ha hecho que incremente la cifra de mujeres, jóvenes y retirados que aceptan este tipo de trabajo. Esos empleados a tiempo parcial, quienes no se espera dediquen las horas que se les exigen a los típicos «oficinistas» a tiempo completo, bajan el promedio.

Los empleados a tiempo completo, por otra parte, frecuentemente trabajan jornadas largas y extenuantes. Un informe oficial de agosto indicó que casi una de cuatro compañías tienen algunos empleados que trabajan más de 80 horas extraordinarias por mes [10].

Otro factor importante es la cantidad de horas adicionales laboradas que no son registradas (ni remuneradas). Pese a que la ley impuso restricciones sobre la cantidad de horas que los colaboradores tienen permitido trabajar a la semana, las compañías tienen una forma para evadirla, obligar a sus empleados realizar su trabajo fuera del horario establecido. Los colaboradores jóvenes particularmente son coaccionados a realizar horas extraordinarias no remuneradas [11] para conservar sus puestos, y el excesivo volumen de trabajo no deja opción más que dedicar horas adicionales, incluso si no son remuneradas.

Morning commuters packed into a crowded train. [12]

Personas que viajan diariamente a su lugar de trabajo abarrotan un tren. Imagen del usuario de Flickr tokyoform. [12]

«Karoshi»: muerte por exceso de trabajo

Morir por exceso de trabajo es tan común en Japón que inclusive existe una palabra para ello: Karoshi (過労死). El término hace referencia a morir por problemas de salud como infartos y apoplejías, que son consecuencia de largos períodos de estrés extremo o a suicidios de empleados extremadamente fatigados.

En 2015, 93 suicidios e intentos de suicidio fueron reconocidos oficialmente como muertes por exceso de trabajo [13] y por lo tanto, permiten reclamar una indemnización, y 96 muertes por infartos, apoplejías y otras enfermedades fueron vinculadas a exceso de trabajo.

«He perdido toda sensación, excepto el deseo de dormir»

Un caso notable es el de Matsuri Takahashi, una joven graduada de la Universidad de Tokyo de 24 años, que se quitó la vida [14] en Navidad del año pasado tras ser obligada a trabajar largas y extenuantes jornadas en Dentsu, un as de la publicidad. El caso resonó como el de otro joven empleado de Dentsu, un hombre, también de 24 años, cuya muerte fue dictaminada como el resultado de horrendas condiciones laborales por el Tribunal Supremo de Japón.

Takahashi documentó su creciente fatiga y el abuso verbal que sufría a manos de su jefe por medio de Twitter:

-They decided again I’ll have to work Saturdays and Sundays. I seriously just want to end it all.

-I have lost all feeling except the desire to sleep.

-My boss told me I have no femininity. Even if he was just trying to get a laugh, I can’t stand this anymore.

Decidieron nuevamente que tendré que trabajar los fines de semana. En serio solo quiero terminar con todo.

-He perdido toda sensación, excepto el deseo de dormir.

-Mi jefe me dijo que no tengo femineidad. Aunque él solo trataba de conseguir una sonrisa, ya no puedo soportar esto.

An exhausted businessman sleeping in the train. [15]

Un oficinista exhausto durmiendo en el tren. Imagen del usuario de Flickr tokyoform [15].

Algunos se preguntarán por qué estas personas que trabajan demasiado simplemente no renuncian. Después de que dictaminaron el suicidio de Takahashi como un caso oficial de karoshi, una historieta que ofrece introspección del pensamiento de esos colaboradores agotados y depresivos, hecha por una ilustradora que se hace llamar Kona Shiomachi, se volvió viral en Twitter:

Por qué no pude «solo renunciar» [parte 1 de 2]

Mis experiencias pasadas y lo que pensaba en ese momento. Siéntanse libres de compartir.

La vez que casi me asesiné involuntariamente
En ese entonces, trabajaba 90-100 horas extraordinarias por semana (menos que las de muchos de mis colegas). Todos los días, me apresuraba para abordar el último tren.
«¡Uf! lo logré».
En ningún punto quise dejar de vivir.
Pero en ese momento, estando de pie en la plataforma vacía, un único pensamiento cruzó mi mente.
«Si diera un paso más, ¡no tendría que ir a trabajar mañana!»

«Cuando la persona trabaja más de 100 horas extra, no tendrá tiempo para convivir con su familia, amigos o pareja… Comienza a pensar, […] ‘no sé por qué estoy viviendo esta vida.'»

Shiomachi explicó que cuando las personas están tan fatigadas por exceso de trabajo no son capaces de tomar decisiones racionales [18], entre estas, la opción de cambiar de ocupación. «Es casi imposible que los empleados tomen un descanso o se retiren de la compañía. Cuando uno se siente exhausto más allá del límite, la mente evita pensar en eso», explicó.

Esta situación puede transportar hacia un espiral oscuro de pensamientos negativos, según Shiomachi: «Cuando la persona trabaja más de 100 horas extras, no tendrá tiempo para convivir con su familia, amigos o pareja, o incluso disfrutar de su pasatiempo. Entonces, comienza a pensar, ‘no sé para qué estoy trabajando’, y esto conlleva al pensamiento ‘no sé por qué estoy viviendo esta vida'».

Commuters waiting for the train. [19]

Trabajadores esperando la llegada del tren. Imagen del usuario de Flickr tokyoform. [19]

«Compañías negras»

La pequeña compañía publicitaria donde Shiomachi trabajaba como diseñadora, y Dentsu, con sus prácticas administrativas notoriamente severas y largas horas extras, son lo que algunos describirían como una «compañía negra» o burakku kigyou (ブラック企業). El término se utiliza generalmente para referirse a las compañías con sistemas laborales altamente explotadores.

Muchas de estas empresas contratan una afluencia de jóvenes, regularmente recién graduados de la universidad, y los obligan a trabajar bajo pésimas condiciones. Horas extraordinarias exageradas, abuso verbal y acoso sexual son prácticas comunes en estas compañías.

El término «compañía negra» se originó en la industria IT en la década del año 2000 [20], y en 2012, un grupo de periodistas, activistas y profesores universitarios formaron un comité especial para crear el «Black Corporations Award» [Premio Empresas Negras], donde el público pudiese votar por «las empresas más perversas del año». Ahora es un premio anual. Las compañías negras abarcan varias industrias; entre los galardonados de 2015 [21] se incluyen a una tienda de conveniencia, una compañía de mudanza y una empresa de gestión de «educación intensiva».

Aparentemente, este premio ha logrado el objetivo de concienciar sobre las prácticas comerciales deshonestas; este problema ha recibido más y más atención en los últimos años.

Incluso existe una cuenta de «Bot de compañía negra» en Twitter que genera frases ingeniosas de este tipo de compañías:

Sé que es imposible, pero le estamos pagando, así que hágalo posible.

Es su culpa haber colapsado. No se estaba cuidando adecuadamente.

Qué es más importante para usted: ¿criar a sus hijos o este trabajo?

Pese a que esas declaraciones parezcan irracionales al punto de la locura, reflejan la perspectiva de la Gerencia en algunas compañías.

A frazzled salaryman doubled over on the floor of a train platform. [25]

Un trabajador extremadamente fatigado doblado en el piso. Imagen del usuario de Flickr Reuben Stanton [25].

Es fantástico que el gobierno intente sancionar a las compañías negras, reducir la incidencia de depresión relacionada al trabajo y el karoshi con normas orientadas a reducir las horas extra e introduciendo evaluaciones de estrés. Sin embargo, esto solo funcionará si las compañías están dispuestas a cambiar. Se espera que una mayor toma de conciencia conllevará un verdadero progreso. Las vidas de los jóvenes talentosos como Matsuri Takahashi podrían estar en peligro.

La causa principal del suicidio es la depresión no tratada. Este trastorno es tratable y el suicidio se puede evitar. Puede obtener ayuda de líneas de apoyo confidenciales para los suicidas y aquellos con crisis emocionales. Visite el sitio Befrienders.org [26] para encontrar una línea telefónica de asistencia para prevenir el suicidio en su país.