
Nepalesa pensando en la Plaza Durbar, Bhaktapur, Nepal. Imagen: Flickr por Elmar Bajora. CC BY-NC-ND 2.0.
En setiembre del 2015, Nepal, todavía recuperándose de terremotos devastadores a principios del año, adoptó una controversial nueva constitución, aceptando disposiciones discriminatorias contra los dos grupos más vulnerables del país: las mujeres y las etnias Madhesis y Tharus que viven en la zona sur del país, conocida como «El Terai«.
La demarcación desfavorable de la tierra para estas poblaciones del sur y la introducción de nuevas discriminaciones contra las mujeres con el pretexto de la seguridad nacional; hacen que la nueva constitución de Nepal sea, un año después, divisiva.
La renombrada escritora Manjushree Thapa quemó la constitución en protesta, diciendo:
I’m through with being abused by my own country. I can’t accept the constitution’s privileging of the male bloodline over the female, of semen over ova. I can’t accept the empowering of the male body and the negation of the female body, the erasure of women’s agency as full human beings.
Estoy harta de ser abusado por mi propio país. No puedo aceptar que la constitución privilegie el linaje masculino sobre el femenino, del espermatozoide sobre el óvulo. No puedo aceptar el fortalecimiento del cuerpo masculino y la negación del cuerpo femenino, la eliminación de la participación de las mujeres como seres humanos completos.
Un año después, Thapa no se ha rendido:
It's 2016 & Nepal is refusing to grant women the same citizenship rights as men. There's no mystery as to why the country is suffering.
— Manjushree Thapa (@manjushreethapa) December 3, 2016
Es 2016 y Nepal se rehusa a conceder a las mujeres el mismo derecho cívico que tienen los hombres. No es ningún misterio el por qué el país está sufriendo.
The «world's best constitution» discriminates against 51% of our fellow citizens: #Women. #Nepalhttps://t.co/aXZ05LIV4p via @subinmulmi
— Dorje Gurung (@Dorje_sDooing) December 13, 2016
La «mejor constitución del mundo» discrimina al 51 por ciento de nuestras conciudadanas.
.@manjushreethapa 93% of countries give women equal rights to transmit citizenship. Nepal is in 7%. @bhandaripadamhttps://t.co/TR1tumcwNX
— Robert Penner (@robpenner) December 13, 2016
El 93 por ciento de los países otorga a las mujeres iguales derechos para transmitir la ciudadanía. Nepal está en 7 por ciento.
Discriminación en imágenes
El artista y educador Supriya Manandhar creó una serie de infografías que explican la ley con respecto a la ciudadanía.
Puedes encontrar mas infografías aquí.
Las nuevas estipulaciones no siguen los antiguos principios de la no discriminación e igualdad aceptados por Nepal como signatario de la Convención Sobre La Eliminación De Todas Las Formas De Discriminación Contra La Mujer (CEDAW).
La constitución ha complicado la forma en qué Nepal concede la ciudadanía y Amnistía Internacional ha exhortado a que el gobierno anule las nuevas normas que discriminan a las madres solteras. La ciudadanía debe garantizarse con la consideración de ambos padres, sostiene Amnistía Internacional para evitar niños sin patria.
La nueva constitución ha dañado a los niños de madres solteras y madres que no residen permanentemente en Nepal (incluyendo mujeres traficadas, mujeres migrantes y otras). Esto ha afectado también a las madres cuyos esposos son extranjeros.
Mientras esta distinción entre hombres y mujeres puede parecer arbitraria, esto es parte de un largo relato histórico.
El elemento «indio»
Un escritor de uno de los principales periódicos de Nepal, República explica:
Equal citizenship right for women was a key agenda of all major political parties during Constituent Assembly elections. But when it came to granting such rights they offered the excuse of “open border with India” and “possible risks on nationality” to continue with discriminatory provisions against women. The proposed amendment, which has sparked protests in parts of the country, has also talked about citizenship. The amendment proposal has relaxed the provision to provide citizenships to non-Nepali women married to Nepali men. But no such provision has been proposed for non-Nepali husbands of Nepali women and their children.
El derecho a la igualdad de ciudadanía para las mujeres fue una agenda clave de todos los partidos políticos importantes durante las elecciones a la Asamblea Constituyente. Pero cuando se trata de conceder tales derechos, ofrecen la excusa de «frontera abierta con la India» y «posibles riesgos sobre la nacionalidad» para continuar con disposiciones discriminatorias contra las mujeres. La enmienda propuesta, que ha desencadenado protestas en varias partes del país, ha hablado también de la ciudadanía. La enmienda propuesta ha atenuado la disposición para proporcionar la ciudadanía a mujeres extranjeras casadas con nepaleses. Pero no se ha propuesto tal disposición para los esposos extranjeros de nepalesas y sus hijos.
Manjushree Thapa también explica el legado que conduce a esto:
Nationalism beats, as a final refuge, in the hearts of Nepal’s Hindu patriarchs. Incredible as it sounds, they are ruled by a deep-seated xenophobia, a fear that Indian men will marry Nepali women, and the children—born of Indian seed!—will populate Nepal. Nepal will then no longer be Nepali; it will be Indian. “We agree with you,” Nepali feminists have been told. “But you have to consider our national identity.” If women are to be loyal to Nepal, we must accept unequal citizenship rights.
El nacionalismo late, como último refugiado, en los corazones de los patriarcas hindúes de Nepal. Por increíble que parezca, están gobernados por una xenofobia profundamente arraigada, un miedo de que los indios se casen con nepalesas y los niños, nacidos de semillas indias, poblarán Nepal. Nepal ya no será nepalés; será indio. «Estamos de acuerdo con ustedes», se le ha dicho a las mujeres nepalesas. «Pero tienen que considerar nuestra identidad nacional». Si las mujeres son leales a Nepal, debemos aceptar la desigualdad de derechos de ciudadanía.
La principal defensora de las mujeres de Nepal y actual jueza de la Corte Suprema, Sapana Pradhan Malla denuncia esta justificación:
Geopolitics, national security and the open border with India can no longer be used as justification for the continuation of systematic state discrimination against Nepali women. […] This is a bogey raised by those who wish to perpetuate patriarchy in Nepal!
La geopolítica, la seguridad nacional y la frontera abierta con la India ya no puede utilizarse como justificación para la continua discriminación sistemática del Estado contra las nepalesas. […] ¡Esto es un espectro planteado por aquellos que desean perpetuar el patriarcado en Nepal!
Reconocimiento de un progreso limitado
Sin embargo, la nueva constitución ha dado algunos aspectos positivos para las mujeres:
- Se ha penalizado la violencia contra la mujer;
- Existen disposiciones especiales para las mujeres desfavorecidas en lo social y cultural;
- Las mujeres tienen igual derecho en asuntos de familia, como en herencia de propiedad y;
- Los partidos políticos tienen que garantizar que al menos el 33 por ciento de sus miembros en el Parlamento Central, la Cámara Alta y en los parlamentos estatales sea mujeres. Actualmente tres mujeres ocupan altos cargos de liderazgo: la presidenta, la presidenta del parlamento y la jefa suprema de justicia.
Para muchos, sin embargo, esto es mero formalismo:
Tokenism to the max-Nepal has women as president, chief justice and head of parliament but has a conservative and sexist constitution.
— Erisha Suwal (@erishasuwal) July 11, 2016
El formalismo al máximo en Nepal tiene mujeres como presidenta, jefa de justicia y presidenta del parlamento, pero tiene una constitución conservadora y sexista.
El patriarcado: ¿una parte indiscutible de Nepal?
Como sureña, musulmana y mujer, Mohna Ansari, es triplemente marginada. Es también la primera persona en Nepal en convertirse en abogada. Dice que es consciente de que aún queda mucho por hacer:
[…] having women heading the top state posts does not mean the end of patriarchal values and structural discrimination against women. There still lies a long battle ahead to bring real change in the lives of the ordinary women in Nepal.
[…] tener mujeres que dirigen los altos cargos del Estado no significa el fin de los principios del patriarcado y la discriminación estructural contra las mujeres. Todavía hay una larga batalla por delante para lograr un cambio real en las vidas de las mujeres comunes de Nepal.
Ansari dice que se necesita «una observación y paciencia sagaz» para ser escuchada en una sociedad patriarcal. Solo luego «sabremos cómo intervenir y cambiar el sistema a [nuestro] favor.
Mientras tanto, la gente en Nepal continúa pidiendo cambios que deroguen la discriminación de la constitución contra las mujeres, las etnias Tharus y Madhesis. Algunos individuos han recurrido incluso a la poesía:
Second-Class Citizens | #Poetry | Dedicated to Women and Madhesi People of #Nepal. #StructuralDiscrimination#CitizenshipThroughMotherspic.twitter.com/BOWYWbLXc5
— Ajaybar S. Pradhan (@ajayspradhan) December 13, 2016
Ciudadanos de segunda clase. Dedicado a las mujeres y a la etnia Madhesi de Nepal.
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