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Para los usuarios de Telegram, registrarse en Irán conlleva otorgar poderes de espionaje al gobierno

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La demanda a los propietarios de canales Telegram de registro en una página web gubernamental acentúa la capacidad de las agencias estatales de monitorizar la actividad online del usuario.  Imagen extraida de ICHRI con autorización [1].

El artículo original puede consultarse en iranhumanrights.org [1] y se publica aquí en colaboración con la Campaña Internacional por los Derechos Humanos en Irán.

En el último intento por parte de las agencias de inteligencia y seguridad [2] por censurar y controlar [3] el Internet en Irán, los administradores de populares canales iraníes en la app de mensajería Telegram [4] estan siendo obligados a registrarse en el Ministerio de Cultura y Orientación Islámica [5] o de lo contrario serán procesados.

Telegram es una aplicación de mensajería instantánea que permite a los usuarios crear canales de contenidos y grupos.

“Estos canales populares pueden ser identificados con una serie de algoritmos y [sus administradores] pueden ser identificados y procesados, por lo que no necesitamos cooperación por parte de Telegram” dijo [6] Mehrdad Sijani, cabeza de la división del ciberespacio de la Asociación de Vendedores de Ordenadores de Teherán, el 5 de enero del 2017. El gobierno iraní anunció en julio del 2015 que ellos no iban a censurar Telegram a pesar de la existencia de contenido inmoral en la plataforma, pero que en cambio trabajarían con Telegram para regularlo [7]. Esta fue la acusación que el fundador de la compañía y CEO negó vehementemente [8]. Desde ese momento, el gobierno iraní ha intentado en numerosas ocasiones convencer a la compañía con base en Berlín para trasladar sus servidores a suelo iraní para que las agencias estatales puedan acceder directamente a las bases de datos, pero Telegram rechaza cualquier forma de cooperación.

El sistema de registro online fue creado para ayudar a las agencias estatales, incluída la Policía Virtual [9] (FATA), en la monitorización de las actividades de los propietarios de canales de Telegram así como de sus seguidores, por medio de la creación de un detallado mapa de usuarios y sus afiliaciones, de ese modo llegan más lejos aumentando su habilidad [3] para la censura de información y persecución de individuos por su actividad online.

A principios de diciembre del 2016, el responsable de las políticas sobre Internet del gobierno, el Consejo Supremo del Ciberespacio [10], anunció que los canales Telegram de propiedad iraní con más de 5,000 seguidores [11] deben obtener una licencia antes del 25 de febrero del 2017. A partir del 5 de enero, administradores de 700 canales [12] habían pedido sus permisos, según el miembro del consejo Reza Taghipour.

Con 20 millones de usuarios, Telegram es la aplicación de mensajería más popular de Irán y acoge 170,000 canales iraníes. Más de 11,000 de esos canales cuentan al menos con 5,000 miembros, de acuerdo [13] con el experto en ciberespacio Alireza Talebpour.

Para solicitar los permisos, los propietarios de los distintos canales deben aportar el nombre del canal, nombre legal completo, dirección y número nacional de identificación en la página web www.samandehi.ir [14]. Los solicitantes también deberán añadir el «bot» automático “iransamandehibot” como co-administrador “temporal”, aparentemente hasta que el Ministerio verifique el canal.

Entre otras funciones, los bots pueden habilitar [15] un amplio espectro de capacidades de vigilancia gracias a la búsqueda rápida y eficiente en las bases de datos de usuarios específicos y la monitorización de su actividad online de forma automatizada.

En agosto del 2016, hackers iraníes consiguieron los números de teléfono de más de 15 millones de usuarios de Telegram en Irán por medio del hackeo de más de una docena de cuentas en la app. lo que Reuters ha descrito [16] como “la más grande violación conocida del sistema encriptado de comunicación”. Telegram confirmó la brecha en la seguridad, pero asegura [17] que solo información públicamente disponible fue sustraida y no hubo acceso directo a las cuentas, además rectificaron el problema: “Una verificación de datos masiva como esa no será posible desde la introducción de ciertas limitaciones en nuestras API (programa de interfaz de la aplicación) este año”.