Un colectivo artístico público del Líbano llamado Dispatch Beirut se ha hecho un nombre al usar Legos como forma de «reconstruir» partes de la capital libanesa.
Estos «pequeños bloques de esperanza», como los llama el colectivo, son pensados para ser temporales. En sus propias palabras, Dispatch Beirut desea «marcar Beirut con arte efímero y creativo como forma de declaración urbana ante los actuales espacios destruidos y abandonados».
Dispatch Beirut fue fundado por Lea Tasso y Pamela Haydamous e inspirado por el trabajo del artista alemán Van Jormann que usaba piezas contruídas con plástico para reparar y rellenar los huecos de muros rotos.
La mayor motivación detrás de esta iniciativa fue la sensación de que la reconstrucción de la ciudad a cargo del gobierno tras los 15 años de guerra civil en 1990 priorizaba el beneficio en lugar de la herencia. Los eruditos Marwan Ghandour y Mona Fawaz escribieron en el 2010 que la proclamada «curación» en lugar de ser la motivación de la reconstrucción de Beirut, estaba «menos relacionada con la fase de ‘pre-destrucción’ que con el actual acto de destrucción». En otras palabras, «que la erosión espacial iniciada por la destrucción de la guerra se ha consolidado durante la reconstrucción posterior al conflicto».
Esta situación requería de una respuesta artística, y Dispatch Beirut quiso hacer su parte. Hablando con Global Voices, Haydamos explicó:
Beirut has become a shadow of its former self and we wanted to change that. We wanted to bring Beirut’s bullet holes, broken stairways and streets back to life in a fun way. We wanted to give people a chance to reminisce about their childhood and their past by giving them back that sense of hope that they lost growing up during war. We gave them blocks of legos and asked them to build their own world with us.
Beirut se ha convertido en una sombra de lo que fue, y queríamos cambiar eso. Queríamos traerle vida otra vez a los agujeros de bala, las escaleras rotas, y las calles de Beirut. Queríamos darle a la gente una ocasión de rememorar su infancia y su pasado, dándoles de nuevo el sentimiento de esperanza que perdieron al crecer con la guerra. Les dimos bloques de Lego y les pedimos que construyesen su propio mundo con nosotros.
El equipo pronto tuvo claro que su trabajo se enfrentaría al mismo tratamiento impuesto en la ciudad.
We knew that our street art couldn’t forever remain untouched. We were faced with a lot of forced destruction. The government didn’t help either. When we created our Independence Day installation on a shattered wall, we received a signed permit to keep our installation for an entire month. After only 12 hours, we received a phone call saying that our installation was causing a lot of parties to object and therefore, had to be taken down. It was very depressing to hear that. It’s almost as if people were used to disappointment.
Sabíamos que nuestro arte callejero no podía estar intacto para siempre. Nos enfrentamos a un montón de destrucción forzada. El gobierno tampoco ayudó. Cuando creamos nuestra instalación del Día de la Independencia en una pared destrozada, recibimos un permiso firmado para mantener nuestra instalación durante un mes entero. Tras solo 12 horas, recibimos una llamada de teléfono diciendo que nuestra instalación estaba causando un montón de quejas y, por lo tanto, tenía que ser retirada. Fue muy deprimente escuchar eso. Es casi como si la gente estuviese acostumbrada a la decepción.
Crear estas instalaciones únicas conlleva un montón de tiempo y esfuerzo. El equipo consiguió que Lego Beirut patrocinase su trabajo, reemplazando su método de hasta entonces de pedir donaciones a amigos y contactos. Pero eso tampoco duró. Haydamous le dijo a Global Voices:
We started off using our own bricks and received donations from friends, friends of friends and so fourth. By the time we got to our 4th installation, Lego Beirut offered to sponsor us fully. After two years, the sponsorship stopped because we were having problems protecting our installations. Now we’re back to receiving donations. We’re hoping to find new forms of urban interventions that will stay for a longer time.
Empezamos usando nuestros propios bloques y recibíamos donaciones de amigos, amigos de amigos, y así. Para cuando llegamos a nuestra instalación número 4, Lego Beirut se ofreció a patrocinarnos totalmente. Después de dos años, el patrocinio terminó porque estábamos teniendo problemas para proteger nuestras instalaciones. Ahora volvemos a recibir donaciones. Esperamos encontrar nuevas formas de intervención urbana que duren más tiempo.
A pesar de enfrentar problemas con sus instalaciones, el equipo siguió recibiendo atención por su trabajo. En el 2013, Dispatch Beirut colaboró con el festival «Geitawi on my mind» y el equipo de the «Dihzahyners» para crear un proyecto llamado «A Little Wonderland» en el que restauraron una vieja casa en una de las áreas más ocupadas de Geitawi, en Beirut, con colorida pintura y Legos.
He aquí una foto del antes y el después:
Mientras que algunos ven este tipo de esfuerzos como un intento de borrar el pasado, Dispatch Beirut insiste en que ese no es el punto de su trabajo:
Our goal is not erase our memories of war but to give hope to not give up on a country that has suffered so much.
Nuestro objetivo no es borrar nuestros recuerdos de la guerra sino darle esperanza de no rendirse a un país que ha sufrido tanto.