Prisioners palestinos con «determinación» cumplieron 40 días de huelga de hambre contra condiciones carcelarias de Israel

Entre abril y mayo, más de 1,500 prisionerios políticos palestinos en cárceles israelíes acataron una huelga de hambre masiva que duró 40 días, en que se abstuvieron de comer y beber en una persistente lucha contra tratos abusivos.

Surgieron enfrentamientos en la Ribera Occidental con manifestaciones palestinas de apoyo a los huelguistas de hambre. El 12 de mayo, las fuerzas israelíes mataron a un palestino de 23 años en la aldea cisjordana de Nabi Saleh con disparos en el pecho. Decenas de otros palestinos quedaron heridos en Nablus, Qalqiliya y Hebrón.

La huelga indefinida empezó el 17 de abril, con motivo de la conmemoración anual del Día del Prisionero Palestinos, y concluyó el 27 de mayo. Los participantes pedían inmediato fin a la negligencia médica, confinamiento solitario y detención administrativa, práctica bastante común de las autoridades israelés donde un prisionero queda detenido por periodos de hasta seis meses –renovados indefinidamente– sin juicio ni acusaciones.

Son aproximadamente 500 los palestines en Israel con detención administrativa sobre la base de evidencia secreta. El uso generalizado de Israel de la detención administrativa viola el derecho internacional y ha recibido frecuentes críticas de Naciones Unidas, la Unión Europea y organizaciones de derechos humanos.

Día 30
Solamente agua y sal, solamente deseos de libertad, solamente justicia y paz.

Los prisioneros también hicieron huelga por mejores condiciones como visitas familiares más largas y más frecuentes, oportunidades de educación secundaria y superior, y más acceso a servicios y atención médica, entre muchas otras.

Israel se rehusó a atender las demandas de los prisioneros. En repuesta, Marwan Barghouti, líder de la huelga de hambre, anunció que radicalizaría su medida y dejaría de beber agua: «No hay marcha atrás. Continuaremos hasta el final», dijo.

Barghouti también hizo un llamado a los palestinos a emprender desobediencia civil para apoyar la huelga de hambre y conmemorar el 69° aniversario del Día de la Nakba, cuando los palestinos conmemoran el desplazamiento que acompañó la creación del estado moderno de Israel.

Las autoridades israelíes trataron de detener la huelga de hambre con una serie de medidas como someter a los prisioneros a repentinas y frecuentes incursiones en sus celdas con gas y perros policías, privar a los prisioneros de acceso a áreas comunes, confiscar su ropa y pertenencias personales, separar a los participantes de los líderes del movimiento y confinarlos en celdas solitarias y sucias.

En un intento de romper la huelga de dignidad, las autoridades israelíes transfirieron a varios prisioneros y detenidos palestinos a confinamiento solitario.

Al comienzo de la huelga de hambre, el Servicio de Prisiones de Israel transfirió a Barghouti y otros dos prisioneros, Karim Younis y Mahmoud Abu Srour, a confinamiento solitario. También dieron a conocer material sin fecha que supuestamente mostraba a Barghouti comiendo secretamente en su celda. La familia y seguidores de Bargouthi dijeron que las autoridades israelíes mentían y que el video tenía más de diez años.

Otra táctica, según informaron abogados de los prisioneros, fue exponer a los huelguistas a comida o negarles atención médica de emergencia hasta que pusieran fin a su huelga.

30 días sin comida… ¡y el mundo sigue con los ojos vendados..!

Karim Younis, el prisionero palestino que más tiempo ha estado bajo custodia de Israel, escribió una carta abierta donde aseguraba a los palestinos que los prisioneros en huelga continuarían con su movimiento a pesar de las medidas represivas Israel. También dijo que los prisioneros estaban para negociaciones con los Servicio de Prisiones de Israel:

Our noble people,

From the cells of steadfastness, freedom and dignity in the isolation section of Ramla Prison, we salute you and appeal to you individually.

We assure you of our steadfastness and determination to achieve victory no matter how long the battle lasts.

We assure the masses of our people that the news of their solidarity and support reach us despite the isolation and siege, and we firmly believe in the inevitability of victory no matter how fierce the battle gets.

While the prison authorities have used all forms of repressive measures in order to break our will and subjugate us, these measures only increased our determination to continue with the hunger strike.

A nuestro noble pueblo:
Desde las celdas de la constancia, libertad y dignidad en la sección de aislamiento de la prisión de Ramla, los saludamos y les hablamos individualmente.
Les aseguramos nuestra constancia y determinación para lograr la victoria, sin importar cuánto dure la batalla.
Les aseguramos a las masas de nuestro pueblo que la noticias de su solidaridad y apoyo nos llega a pesar del aislamiento y asedio, y creemos firmemente en la inevitabilidad de la victoria, sin importar que la batalla se ponga feroz.
Aunque las autoridades de la prisión han usado todas las formas de medidas represivas para quebrar nuestra voluntad y someternos, estas medidas solamente aumentaron nuestra determinación de seguir con la huelga de hambre.

El texto completo de la carta está en el sitio web del grupo de defensa llamado Asociación de Apoyo al Prisionero y Derechos Humanos ADDAMEER.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.