Décadas antes de que la película de Lego se convirtiese en un éxito de taquilla global, un estudio en la Hungría comunista utilizaba ladrillos LEGO para hacer dibujos animados de alta calidad.
En 1986, Vianco Studio, con sede en Budapest, lanzó una serie de siete cortos con personajes construidos con ladrillos que ofrecían una visión humorística del hockey, patinaje artístico, fútbol y otros deportes. Según la revista MAKE, este fue «el estreno más antiguo conocido de una animación cuadro por cuadros de LEGO».
En ese tiempo, las animaciones fueron retransmitidas por los canales de televisión nacionales en toda Europa. También fueron distribuidos en cintas VHS, que algunos fans han digitalizado, lo que permite que los dibujos animados tengan un seguidores estables en YouTube.
Todos los personajes de estas animaciones están hechos con ladrillos «clásicos» de Lego y no presentan ninguna estatuita. Muestran el potencial creativo de Lego en su versión más básica y ayudan a explicar por qué la marca ha sido una parte inseparable de la infancia de millones de personas en todo el mundo.
Vianco Studio siguió funcionando después de que los cortos se estrenaron y, según IMDB, participó en la producción de la película de 1988 Félix el gato.
LEGO después de la «Cortina de Hierro»
En años recientes, LEGO había sido un receptor de subvenciones del Gobierno húngaro previstas para inversionistas extranjeros directos. En 2006, la mano de obra barata del país y su ubicación geográfica estratégica persuadieron a la empresa danesa para alquilar una fábrica en la ciudad oriental de Nyíregyháza. La producción comenzó en 2008.
En 2014, los húngaros construyeron la torre LEGO más alta del mundo en Budapest, con una altura de 34,76 metros (114 pies), un récord superado al año siguiente por un grupo de constructores italianos, cuyo esfuerzo alcanzó 35,05 metros.
El mismo año en que Hungría rompió el récord de la torre, LEGO abrió una nueva fábrica en Nyíregyháza, que fue inaugurada por el primer ministro Viktor Orban. En 2015, LEGO anunció que duplicaría el tamaño de esa planta, con el fin de satisfacer la alta demanda de sus productos. La expansión tiene el apoyo de una donación de 4.400 millones de forintos húngaros (17,75 millones de dólares) del Gobierno húngaro.
En febrero, el alcalde de Nyíregyháza, Ferenc Kovács, estimuló el apetito de los amantes locales de LEGO cuando anunció que un centro Legoland Discovery estaría listo en la ciudad para el año 2020. Pero la promesa populista pronto recibió respuestas escépticas, entre ellas la del gestor de franquicias de LEGO, Merlin Entertainments, que afirmó que no tiene planes para establecer un centro de ese tipo allí.
Si hubiera algo de verdad en la afirmación del alcalde –admitió después que, como mucho, es una propuesta preparada para que Merlin la evalúe– sería el primer centro Legoland Discovery en Europa Central y Oriental.