[1]La foto que inició un acalorado debate en Brasil. Captura de pantalla de la página de Facebook de Lucas Landau.
Es víspera de Año Nuevo en uno de los destinos turísticos más famosos del mundo. Mientras 2.4 millones de personas [2] se reúnen en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, para ver los fuegos artificiales, el lente del fotógrafo independiente Lucas Landau voltea hacia un muchacho negro. Está mojado y sin camisa, parado en el mar y el agua le llega a las rodillas. Sus manos están cruzadas en la cintura, parece que estuviera tiritando, pero se queda ahí, fascinado por lo que ve en el cielo. Detrás de él, fuera del foco de la cámara, una multitud vestida de blanco se toma selfies y celebra.
Landau publicó la foto en Facebook, Instagram, Twitter, y pronto se difundió por WhatsApp con una falsa historia de que el niño no tenía hogar y que lo habían abandonado, y las personas empezaron a leerla. Algunos vieron pobreza y tristeza, un niño negro que personificaba la desigualdad de la sociedad brasileña.
Pero pronto esas suposiciones encontraron rechazo.
Stephanie Ribeiro, abierta activista negra en Brasil con 46,000 seguidores en Facebook, habló sobre [3] esa perspectiva:
Para mim não tem diferença quem vê um menino negro e já associa com ele a um «menor», com a polícia que vê negros e já aborda para revistar e/ou agredir. Homens negros sempre contam essas histórias, suas vidas são marcadas pelos olhos racistas que procuram o esteriótipo reafirmando diariamente pelas mídias, e não a inúmeras verdades sobre eles. Fortalecemos isso ao incentivar olhares cheios de esteriótipos racistas sobre nossas múltiplas formas de existir/ser mesmo diante de crianças… o PERIGO DA HISTÓRIA ÚNICA também está no nosso olhar.
Para mí, no hay diferencia entre quien ve un niño negro y lo asocia con un “juvenil”, y la policía que ve negros y los aborda para revisarlos o agredirlos. Los hombres negros siempre cuentan esas historias, sus vidas están marcadas por ojos racistas que buscan el estereotipo que los medios reafirman cada día y no las innumerables verdades sobre ellos. Fortalecemos eso cuando incentivamos miradas llenas de estereotipos racistas, incluso frente a los niños… el PELIGRO DE LA HISTORIA ÚNICA también está en nuestra mirada.
En una entrevista de la versión brasileña del diario español El País, el escritor negro Anderson França dijo [4]:
O problema não é a foto, é a interpretação dela, do seu contexto. As pessoas que olham aquela foto estão pré-condicionadas a entender que a imagem de uma pessoa negra é associada a pobreza e abandono, quando na verdade é só uma criança negra na praia. Essa precondição é racismo estrutural, que vem da má educação do povo brasileiro sobre ele mesmo.
El problema no es la foto, es su interpretación, de su contexto. Quienes miran la foto están presdispuestos a entender que la imagen de una persona negra se asocia con pobreza y abandono, aunque en realidad es solamente un niño negro en la playa. Esta predisposición es racismo estructural, que se origina en la deficiente educación de los brasileños sobre ellos mismos.
Sin embargo, la verdadera historia sigue sin conocerse –ni siquiera el fotógrafo sabe quién es el muchacho. Después de que la imagen se volviera viral, Landau agregó una leyenda [5] que explica el contexto en que se tomó la foto:
eu estava a trabalho fotografando as pessoas assistindo aos fogos em copacabana. ele estava lá, como outras pessoas, encantado. perguntei a idade (9) e o nome, mas não ouvi por causa do barulho. como ele estava dentro mar (que estava gelado), acabou ficando distante das pessoas. não sei se estava sozinho ou com família. essa fotografia abre margem para várias interpretações; todas legítimas, ao meu ver. existe uma verdade, mas nem eu sei qual é. me avisem se descobrirem quem é o menino, por favor.
Estaba trabajando, fotografiando personas que veían los fuegos artificiales en Copacabana. Ahí estaba, como otras personas, maravillado. Le pregunté su edad (9) y su nombre, pero no oí por el barullo. Como estaba en el agua (que estaba fría), terminó alejado de las demás personas. No sé si estaba solo o con su familia. Esta fotografía abre margen a varias interpretaciones; todas legítimas, a modo de ver. Existe una verdad, pero no sé cuál es. Avísenme si descubren quién es el niño, por favor.
¿Otra historia de un salvador blanco?
Una captura de pantalla [8] de alguien en la sección de comentarios de la publicación de Landau que intentaba comprar una copia de la foto –a lo que Landau respondió con su información de contacto– empezó a circular. En respuesta, la gente empezó a mirar el trabajo de Landau.
Landau, que es blanco, ha fotografiado comunidades negras en Sudáfrica [9] y acontecimientos violentos [10] que ocurren en las favelas de Río de Janeiro, donde los habitantes son mayoritariamente personas de color.
Como resultado de esta dinámica, una expresión apareció en el debate: «complejo de salvador blanco». Según Wikipedia [11], “se refiere a una persona blanca que actúa para ayudar a personas no blancas, con ayuda en algunos contextos que se perciben como interesados”.
Con respecto al fotógrafo y la respuesta general a la foto, el bloguero negro Marcelo Rocha, recordó a un personaje [12] de la serie de televisión estadounidense “Everybody Hates Chris”, que es popular en Brasil:
A personagem Srta. Morello (Jacqueline Mazzarela) retrata uma pessoa branca que reconhece seus privilégios, mas de forma tão soberba que realmente se acha superior em tudo e acredita que todos os negros dependem de sua ajuda e assistência. Vê se em vários episódios a professora do protagonista da série Chris Rock (Tyler James Williams) com suas “melhores intenções” tentando ajudar o personagem em sua história trágica que criou em sua mente. O fotógrafo humanitário de alma negra ainda é lucro pro mercado. (…) Só criaram ele pois existe um povo sedento por ser a Srta. Morello.
El personaje de la señorita Morello (Jacqueline Mazzarela) caracteriza a una persona blanca que reconoce sus privilegios, pero de manera tan soberbia que realmente se cree superior en todo y cree que todos los negros dependen de su ayuda y asistencia. Vemos en varios episodios a la maestra del protagonista de la serie, Chris Rock (Tyler James Williams), con sus “mejores intenciones” que trata de ayudar al personaje a lidiar con una historia trágica que solamente existe en su mente. El fotógrafo humanitario de alma negra obtiene ganancia en el mercado. […] Solamente existe porque hay un pueblo sendientop de ser la señorita Morello.
Una reflexión del propio país
Por su parte, otros sostuvieron que las personas no pueden evitar ver la imagen a través del lente de la desigualdad y la tristeza, dado el contexto brasileño.
Copacabana, un barrio acomodado de Río de Janeiro, está rodeado de favelas y comunidades de bajos ingresos, donde la mayoría de habitantes son negros o de piel oscura. En la publicación original de Landau, un comentarista [13] recordó que las líneas de bus que llegan de los barrios periféricos no circularon esa noche, supuestamente para evitar que los jóvenes negros fueran a ver el espectáculo de fuegos artificiales.
En Brasil, el último país del continente americano de abolir formalmente la esclavitud, en 1889 [14], apenas el 17 % [15] de los más ricos del país, que alcanzan el 1 % de la población total, son negros. Esto a pesar de que los negros conforman el 54 % de toda la población. Al índice actual, la brecha salarial [16] que actualmente existe entre negros y blancos se igualará recién en 2089.
También hay un asunto de representación. Un estudio [16] de la Universidad de Brasilia reveló que entre los libros publicados en Brasil entre 1965 y 2014, solamente el 10 % fueron escritos por autores negros. También mostró que cerca del 80 % de los personajes principales en los libros de ficción eran blancos. En las películas, apenas el 4 % de las producciones emplean guionistas negros y solamente el 31 % incluye a actores negros en el reparto –que casi siempre representan personajes asociados con pobreza y delincuencia.
Innegablemente, Brasil es un país donde el racismo es un problema, aunque nunca ha tenido una ley oficial de segregación. Como también señaló el fotógrafo brasileño Fernando Costa Netto en una cita en el El Pais [4]:
Mesmo que a foto aponte outra coisa quando encontrarem o menino, o Brasil está muito bem espelhado pela foto em Copacabana”, avalia Netto. “Nós estamos aqui discutindo a força e o papel da fotografia, preconceito, o réveillon no Rio, a estética, a emoção, o documento, questionando… A fotografia está cumprindo o papel.
Aunque la foto apunte otra cosa cuando vemos al niño, Brasil está muy bien reflejado en la fotografía de Copacabana», dice Netto. «Estamos discutiendo la fuerza y el rol de la fotografía, prejuicio, Nochevieja en Río de Janeiro, estética, emoción, documento, cuestionando. La fotografía está cumpliendo su rol.