Innovadora cineasta quiere que se defienda visión de los nativos en medios estadounidenses

Joanelle Romero. Fuente: Joanelle Romero

Esta historia de Christabel Nsiah-Buadi para GlobalPost forma parte de una serie titulada “The Media Disruptors”, que trata sobre las mujeres que desafían al orden establecido. Se publicó originariamente en PRI. org el 8 de marzo de 2018 y se reproduce aquí como parte del acuerdo de intercambio de contenidos entre Global Voices y PRI.

Cuando Joanelle Romero entro en el estudio de «La chica llamada Hatter Fox«, hizo historia.

Fue la primera nativa estadounidense en interpretar un papel principal en una película contemporánea, que se emitió en televisión en 1977. Además, se trataba de la primera historia de una nativa producida en Estados Unidos.

Romero nació en Hollywood, hija de la actriz Rita Rogers, que protagonizó películas con Elvis Presley. A los 12 años, Dennis Hopper se convirtió en el tutor legal de Romero. No obstante, su historia es mucho más que una lista interminable de nombres de películas de la industria del cine.

Como fundadora del Red Nation Celebration Institute, Romero se encarga de transmitir la visión de los pueblos nativos por medio de las películas, la televisión y la música

Christabel Nsiah-Buadi: Empecemos con tu papel en «La chica llamada Hatter Fox». Dada la época, la década de 1970, ¿cómo fue la experiencia en cuanto a la producción y el guion?

Joanelle Romero: I wasn't raised on the reservation. I was raised in Hollywood and so I didn't experience a lot of direct racism. When I did this film, it was very challenging because I directly experienced racism. I remember in my hotel room, I called my mom, and I said, «They don't like me because I'm Indian.»

I was 17, 18 years old, and it was really an intense moment for me, because in my immediate home there was no racism.

Joanelle Romero: Yo no crecí en la reserva, me crié en Hollywood; así que no sufrí el racismo de manera directa. En cambio, cuando hice la película, sí que fue todo un reto, porque entonces experimenté el racismo de primera mano. Recuerdo estar en la habitación de mi hotel y llamar a mi madre para decirle: “No les gusto porque soy india”.

Tenía 17 o 18 años y fue un periodo realmente complicado porque en mi propia comunidad no existía el racismo.

¿Cómo lo sobrellevaste?

It's been a lifelong journey to process it, and come to terms with it, especially within the film industry. I was the highest-paid Native actress on episodic television for years. Fourteen years ago, [US broadcast networks] NBC, CBS, ABC and Fox have completely written us out of the narrative for Native women. Every once in a while, there'll be a Native actor, man on episodic shows, but yeah, they've completely written our Native women out of the narrative, and it's been 14 years. I spoke with a network a while ago and they said, «Well, we had one actress.» I was embarrassed for them. It was like, how can you even say that?

We have a long way to go with this narrative. There was a film, that just won all the awards at our [recent Red Nation Film Festival], called «Wind River.» That film had Oscar buzz on it, and it's about our missing and murdered women. That I think has opened up this whole conversation to lend itself to Native women in film. Where are we?

Me ha llevado toda una vida poder afrontarlo, y superarlo, especialmente dentro de la industria del cine. Fui la actriz nativa estadounidense mejor pagada en las series episódicas durante años. Desde hace 14 años, las cadenas estadounidenses NBC, CBS, ABC y Fox han silenciado, por completo, la visión de las nativas. De vez en cuando, aparece un actor nativo estadounidense en alguna serie de episodios, pero, lo cierto es que las nativas estadounidenses ya no tienen voz, y ya han pasado 14 años. Hace poco, hablé con un canal de televisión y me dijeron: “Bueno, tuvimos una actriz”. Sentí vergüenza ajena. Me preguntaba cómo podían decir eso.

Todavía nos queda mucho por luchar. Había una película que acababa de ganar todos los premios en nuestro [reciente Red Nation Film Festival], llamada «Wind River». Esa película olía a Óscar y trataba sobre nuestras mujeres desaparecidas y asesinadas, que, en mi opinión, ha servido para propiciar un debate para dar mayor visibilidad a las nativas estadounidenses en las películas. ¿Dónde estamos?

¿Por qué crees que no se tiene en cuenta la visión de las nativas estadounidenses?

It's the doctrine of domination and dehumanization. It's generational, passed down from when our lands were taken from us. The whole mission at that time was, if you wipe out the women and children, they don't have a nation. When you hear that over and over again, and it's proven over and over and over again, it just becomes a norm. Then we get written out of the narrative.

I'm an Academy [of Motion Picture Arts and Sciences] member. I'm the only Native director, producer who made the preliminary documentary shortlist for Oscars (for the film “American Holocaust: When It’s All Over I'll Still be Indian«). Why am I not directing episodic television or anything? Why haven't I even been offered to shadow someone on episodic television if they're so concerned about anyone's ability to direct? There are really no nurturing programs.

Es por la doctrina de la dominación y la deshumanización. Es un fenómeno que ha pasado de generación en generación desde que nos arrebataron las tierras. Su único objetivo en aquel tiempo era exterminar a mujeres y niños, para que no tuvieran patria. Cuando oyes esas historias una y otra vez, y sus hechos se han demostrado una y otra vez, eso se convierte en la norma. Y, después deciden suprimir nuestra visión.

Soy miembro de la Academia [de las Artes y las Ciencias Cinematográficas]. Soy la única directora y productora nativa estadounidense que fue preseleccionada en la categoría de mejor documental en los Óscars (por la película «American Holocaust: When It’s All Over I'll Still be Indian«). ¿Por qué no estoy dirigiendo alguna serie de episodios o algo así? ¿Por qué ni siquiera me han dado la oportunidad de ser aprendiz si tan preocupados están de que no podamos dirigir? No existen programas de apoyo para nosotros.

¿Cuándo te convertiste en activista defensora de la representación de los pueblos nativos en los medios?

I don't call myself an activist, and we're not a cause, and we're not associated with any movement. We're professionals, directors, writers, actors, crew. We're professionals. With that said, I did this film for [US media mogul] Ted Turner. It was called «The Miracle in the Wilderness.» It was a Christmas movie about how they brought Jesus to Indians; it was a weird thing. I was so tired of being in a buckskin and saying, «Me want more stew meat.»

I was just praying on this one day and looked up at this tree and saw this beautiful hawk with her family. I said, «I'm just going to go into directing, and start doing my own thing, because I'm not going to wait, I'm tired of waiting.» Twenty-three years ago, I started our non-profit organization, which is Red Nation Celebration Institute. We're the longest standing Native arts and cultural organization in Los Angeles.

Under that banner we have Red Nation Film Festival and in that body of Red Nation Film Festival we've always included Native women in film and television. Then we created Native Women In Film Festival. Then we have Red Nation Television Network which launched in 2006. We launched our online streaming network before Netflix, before Hulu. We were way ahead of our time. We have 10 million viewers in 37 countries. In 2018 we are launching a newsroom of all Native content. We're also uploading 300 new titles on our network.

Yo no me considero activista, no defendemos ninguna causa, ni pertenecemos a ningún movimiento. Somos profesionales, directores, guionistas, actores, formamos partes de equipos. Somos profesionales. Hice una película para Ted Turner (magnate de los medios estadounidenses) llamada «Brisa salvaje». Era una película navideña que trataba de cómo llevaron a Jesús a los indios. Era algo extraño. Estaba muy cansada de ir vestida de piel de ante y de decir: “Yo querer más estofado”

Un día, estaba rezando, aparté la vista de un árbol y vi un precioso halcón en el cielo, acompañado de su familia. Y me dije: “Me voy a dedicar a dirigir películas, empezaré a hacerlo por mi cuenta, porque no voy a esperar más. Estoy cansada de esperar”. Hace 23 años, fundé una organización sin ánimo de lucro, Red Nation Celebration Institute. Somos la organización más longeva del arte y la cultura nativas de Los Ángeles, que está todavía vigente.

Bajo esa premisa, creamos el Red Nation Film Festival, donde siempre han tenido cabida mujeres nativas de las películas y la televisión. Después de eso, fundamos el Native Women Film Festival y luego, la cadena de televisión Red Nation, que estrenamos en 2006. Estrenamos nuestro servicios de difusión en línea, antes que Netflix y Hulu. Fuimos unos adelantados a nuestra época. Contamos con 10 millones de televidentes en 37 países. En 2018, vamos a estrenar unos informativos dedicado exclusivamente a los nativos. También vamos a poner a disposición 300 títulos nuevos a nuestra plataforma.

¿Quién produce todo este contenido?

We have a staff of five people that help with everything from branding to graphics to uploading, editing, all of that stuff. As far as content, it's all of our filmmakers. We also have a board of directors. There's a lot of A-list celebrities on our board, as well as chiefs of different tribes across the country, as well as Native actors, and actresses. They really help us, guide us with our mission, and to stay on point with our mission and not get derailed.

Our thing is «Natives in charge of their narrative.» That's going to be our narrative for quite some time, moving forward, until something changes in this industry.

When our kids, our youth don't see themselves in media, that's a big issue to me. We have the Native youth suicide issue in our communities that is very prevalent. I feel personally that is because they don't see themselves, there's nothing for them to relate to. It's like, what's the point?

It's also the murdered and missing women. I'm a survivor of sexual assault and molestation. It's really important that, as a Native woman, mother, grandma that I speak up.

Contamos con un equipo de cinco personas que nos ayudan con la creación de la marca, las ilustraciones, la transferencia de los contenidos, la edición, todos eso. También disponemos de un consejo de administración. Hay muchos famosos de primera categoría en el consejo, al igual que jefes de diferentes tribus de todo el país; además de actores y actrices nativos. Nos ayudan muchísimo, nos guían en nuestra misión, y pueden seguir trabajando, a pesar de que las circunstancias no acompañen.

Lo que defendemos es que los “nativos sean los encargados de contar sus historias”. Esa va a ser nuestra posición durante un tiempo, la de seguir luchando hasta que algo cambie en la industria.

Me parece bastante mal que nuestros hijos, nuestra juventud, no se vean representados en los medios. En nuestra comunidad, tenemos un grave problema de suicidio entre jóvenes nativos. Personalmente, creo que esto se debe a que no se ven representados, no tienen ese sentimiento de pertenencia a algo. Así que piensan, ¿qué sentido tiene vivir así?

¿Cuál crees que ha sido uno de tus mayores éxitos o logros?

Well, first of all, the birth of my two children. And my grandbaby, now that I'm a grandma.

As an artist, it's being a member of The Academy. That has been my biggest dream since I was three years old, when I started doing plays with my mom and my grandpa. I used to hold the brush and recite my Oscar speech over and over all the time.

To be able, as an artist, to do a lot of «firsts,» like with” The Girl Called Hatter Fox.” Because it was a Navajo girl who'd been abused and she was off the reservation, I went in [to the audition] with no makeup, my hair uncombed, barefooted, no jewelry, torn jeans. When I went in to the director and producers, they said, «Your name?» I said, «I'm Hatter Fox.» Right then and there, they said, «You have the part.»

In regards to our community, I'm very proud that we started our non-profit 23 years ago. We just keep growing and growing and moving forward with our narrative, and not taking no for an answer. That word does not exist in my vocabulary.

Bueno, para empezar, el nacimiento de mis dos hijos. Y mi nieto, ahora soy abuela.

En cuanto a mí, como artista, ha sido llegar a ser miembro de la Academia. Ese ha sido mi mayor sueño desde que tenía tres años, cuando empecé a actuar en obras de teatro con mi madre y mi abuelo. Tomaba una escoba para recitar mi discurso de aceptación del Óscar, una y otra vez.

Como artista, haber sido varias veces la primera artista en protagonizar producciones de este tipo, como en el caso de «La chica llamada Hatter Fox». Como era una chica de la tribu de los navajos que había sufrido el maltrato y estaba fuera de la reserva, entré [a las audiciones] sin maquillaje, sin peinar, descalza, sin joyas y con jeans rotos. Cuando entré el director y los productores, preguntaron: “¿Nombre?”. Yo les respondí: “Me llamo Hatter Fox”. Y en ese momento, me dijeron: “El papel es tuyo”.

En lo que concierne a nuestra comunidad, estoy muy orgullosa de que fundásemos nuestra organización sin ánimo de lucro hace 23 años. No paramos de crecer y de defender nuestros intereses y no aceptamos un “no” por respuesta. Esa palabra no existe en mi vocabulario.

Christabel Nsiah-Buadi es fundadora y editora de The Media Disruptors  y productora de los medios públicos. También escribe sobre los medios, la cultura y la política.
Síguela en Twitter: @msama.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.