
Entrada del Palacio de Justicia de Trinidad y Tobago en Puerto España, partidarios de derechos LGBT superan en número a quienes protestan por la resolución que despenaliza la ley de sodomía de Trinidad y Tobago con fundamentos religiosos. Foto tomada por Maria Nunes el 12 de abril de 2018, usada con autorización.
A un lado de sala de audiencias POS 09 estaba sentado un pequeño grupo de pastores vestidos de traje y con la expresión rígida. Al otro lado estaban los partidarios de los derechos de minoríes sexuales y de género. Al menos uno tenía una camiseta que enumeraba detalles de la «agenda homosexual» en Trinidad y Tobago: «1. Comprar Crix [conocida galleta local] 2. Pasar tiempo con la familia 3. Luchar por la igualdad».
El 12 de abril de 2018, el juez Devindra Rampersad llevó a la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales y transgénero (LGBT) de la nación insular muy cerca de cumplir el punto tres cuando dio a conocer su decisión en el caso de Jason Jones contra el fiscal general de Trinidad y Tobago, que resolvió que las secciones 13 y 16 del capítulo 11:28 de la ley de delitos sexuales, que penaliza el sexo anal entre dos adultos son «inconstitucionales».
En su elocuente resumen de la resolución, el juez Rampersad explicó:
At this point, the Court feels compelled to state in conclusion that it is unfortunate when society in any way values a person or gives a person their identity based on their race, colour, gender, age or sexual orientation.
That is not their identity.
That is not their soul.
That is not the sum total of their value to society or their value to themselves.
En este punto, el juzgado se siente obligada a afirmar en conclusión que es desafortunado cuando una sociedad valora de cualquier manera a una persona o le concede identidad según si raza, color, género, edad u orientación sexual.
Esa no es su identidad.
Esa no es su alma.
Esa no es la suma total de su valor a la sociedad ni su valor para ellos mismos.
Comparó la ley con las que permitieron la existencia del apartheid y el Holocausto, y agregó:
This conclusion is not an assessment of denial of the religious beliefs of anyone. This court is not qualified to do so. However, this conclusion is a recognition that the beliefs of some, by definition, [are] not the belief of ALL, and in the Republic of Trinidad and Tobago, ALL are protected, and are entitled to be protected, under the Constitution.
Esta conclusión no es una evaluación de negación de las creencias religiosas de nadie. Este juzgado no está calificada para eso. Sin embargo, esta conclusión es un reconocimiento de que las creencias de algunos, por definición, no [son] las creencias de TODOS, y en la república de Trinidad y Tobago, TODOS están protegidos y tienen derecho a estar protegidos, según la Constitución.
Poco después de la resolucion, el Gobierno anunció que apelaría. Como se esperaba, la respuesta pública a esta resolución ha dividido a la sociedad en dos, lo que refleja las divisiones físicas que existieron en el juzgado.
En una actualización de estado en Facebook, Rhoda Bharath evidenció la contradicción:

Actualización de estado en Facebook de Rhoda Bharath: «Trinitenses: Queremos reforma constitucional.
Trinitenses también: !Pero no una reforma que dé derechos a gays, mujeres o niños! Lógica del burro».
También en Facebook, la usuaria Jill Lian Goddard expresó su perspectiva:
It's particularly sad when an activist cannot understand that ALL oppression has to end for the one in which you are particularly interested to stop. When a white gay male doesn't address racism. When a black straight male promotes homophobia. When an adult female slaps children or exerts authority over them.
You don't have to be the champion of other causes but you can't be so unaware that you don't see the importance of intersectionality.
Es particularmente triste cuando un activista no puede entender que TODA la opresión debe terminar por la [opresión] que estás interesado particularmente que pare. Cuando un gay blanco no enfrenta el racismo. Cuando un heterosexual negro promueve la homofobia. Cuando una adulta abofetea niños o ejerce autoridad sobre ellos.
No tienes que ser el defensor de otras causas, pero no puedes ser tan inconsciente que no veas la importancia de la interseccionalidad.
De todas maneras, muchos seguían apegados a sus secciones. En un artículo en Wired868, Afryea Charles sugirió que la resolución ponía a Trinidad y Tobago «en grave peligro de perder nuestra libertad religiosa»:
For me, these are clear indications that Jesus is coming back soon. Any student of bible history and prophecy—I count myself among them—knows that, once we begin to pass legislation to ensure LGBTQIA [lesbian, gay, bisexual, transgender, queer/questioning, intersex, and allies] rights, we are taking one more step towards D-Day and the eventual destruction of the earth. […]
I understand the concern and angst about this recent decision. It is not lost on me how the removal of this law might have a serious impact on our way of life. I understand what it can mean for our educational institutions, hospitals, businesses and general lifestyle.
Para mí, estos son claros indicadores de que Jesús viene pronto. Cualquier estudiante de historia de la Biblia y profecía —me cuento también— sabe que, cuando empecemos a aprobar legislación para aprobar derechos LGBTQIA [lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer, intersexuales y aliados], estaremos dan un paso hacia el Día D y la final destrucción de la tierra. […]
Entiendo la preocupación y angustia sobre esta reciente decisión. Me doy cuenta de que revocar esta ley puede tener un serio impacto en nuestro estilo de vida. Entiendo lo que puede significar para nuestras instituciones educativas, hospitales, empresas y vida en general.
Aparentemente hablando en nombre de las personas con mentalidad religiosa, su artículo de opinión llegó a establecer que la «comunidad LGBTQIA es la menor de nuestras preocupaciones». De forma inquietante, Charles nombró a la pedofilia, el abuso sexual, maltrato a ancianos y el robo –acciones donde no hay consentimiento– como iguales a lo que la ley legitimiza ahora:
We need to acknowledge the existence of the sinfulness being practised within our congregations and clean that up first. Adultery, elderly abuse, fornication, homosexuality, lying, paedophilia, sexual abuse, stealing, underhand business deals and all manner of crimes are rampant within and are being practised with impunity.
So, Trinidad and Tobago, get ready! To bugger in public or to bugger in private, that is the question that was answered today.
Debemos reconocer la existencia de prácticas pecaminosas dentro de nuestas congregaciones y limpiar eso primero. Adulterio, maltrato a ancianos, fornicación, homosexualidad, mentira, pedofilia, abuso sexual, robo, tratos de negocios bajo la mesa y toda forma de delitos están descontrolados y se practican con impunidad.
Así que, ¡Trinidad and Tobago, prepárate! Para ser marica en público o ser marica en privado, esa fue la pregunta que se contestó hoy.
Entender esta idea fundamental del consentimiento parecía ser difícil para muchos. Por ejemplo, un hilo de Facebook publicó la captura de pantalla de un comentario de un ciudadano que intentó sostener que hay una situación resbaladiza entre «cambiar las leyes para que encajen en preferencias de comportamiento» y la posible ruptura del orden público. Rhoda Bharath preguntó:
How do we not get that consent is critical to sexual behaviour?
How do we not grasp that people have a right to privacy?[…]
Her opinion is saying that anal sex will lead to crimes being made legal?
Seems uninformed and likely to cause fear. And fear always leads to hate. She should be more responsible.
¿Cómo es que no entendemos que el consentimiento es fundamental en el comportamiento sexual?
¿Cómo no captamos que las personas tienen derechos a la privacidad?[…]
¿Su opinión dice que el sexo anal llevará a otros delitos si se legaliza?
Parece desinformada y probablemente cause temor. Y el temor siempre lleva al odio. Debería ser más responsable.
Julie Mango explicó:
Dear homophobic people of Trinidad & Tobago and The World,
I am exhausted.
I am hurt. I am saddened. I am anxious. And I am human.
I deserve rights. I shouldn't have to explain that to you. I shouldn't have to watch my friends suffer and die. I shouldn't have to fight for my right to just exist.
I am queer and I am not «less than» you. I am not «abnormal» nor «unnatural». I am not a threat to you.
I am a human person deserving of the same rights as any straight person. I may love someone of the same sex, but that is of no importance to you, or to the politics of this country.
We are all humans. We are all the same.
You’re on the side of those who fought against interracial marriage. You’re on the side of those who were pro-slavery. You’re on the side of those who fight against women’s rights.
Let me explain.
LGBT rights are human rights. […]
Remember, homosexuality isn’t a choice, but homophobia is.
Queridos homofóbicos de Trinidad y Tobago y el mundo:
Estoy exhausta.
Estoy herida. Estoy triste. Estoy ansiosa. Y soy humana.
Merezco derechos. No debería tener que explicarles. No debería tener que ver a mis amigos sufrir y morir. No debería tener que luchar por mi derecho a simplemente existir.
Soy lesbiana y no soy “menos» que tú. No soy “anormal” ni “antinatural”. No soy una amenaza para ti.
Soy una persona humana que merece los mismos derechos que cualquier heterosexual. Tal vez ame a alguien del mismo sexo, pero eso no debería ser importante para ti ni para la política de este país.
Todos somos humanos. Todos somos iguales. ¿Cuándo se van a dar cuenta de están en el lado equivocado de la historia? Estás del lado de quienes lucharon contra el matrimonio interracial. Estás del lado de quienes estaban a favor de la esclavitud. Estás del lado de los que lucharon contra los derechos de la mujer.
Déjame explicarte.
Los derechos LGBT son derechos humanos. […]
Recuerda, la homosexualidad no es una elección. La homofobia sí.
En respuesta al argumento de que despenalizar a la comunidad LGBT tendrá como resultado perjuicios a la situación actual, muchos usuarios de Facebook empezaron a difundir «datos» sobre la ley de sodomía que irreverentemten expresaba qué cambios ocurrirían, y cuáles no, como resultado del pronunciamiento judicial:

Hoja con datos que circula en medios sociales que deja en claro que la resolución quiere decir que ahora, dos adultos que están de acuerdo, pueden practicar sexo anal en privado sin quebrantar la ley. En broma asegura que, entre otras cosas, «no ocurrirán fuego, azufre ni la ira de Dios».
Hubo otro efecto colateral cuando Trinidad and Tobago Newsday informó que a tres jóvenes que participaban en la manifestación en las afueras de Palacio de Justicia luego de la resolución judicial los echaron de su casa. Varios usuarios de Facebook expresaron su tristeza por este giro de los acontecimientos y les ofrecieron alojamiento temporal.
La atención también se está volcando a problemas mayores. Como Jason Jones dijo a los reporteros en los escalones del Palacio de Justicia de Trinidad luego de la resolución: «El problema de los derechos humanos no es solamente local. Es un problema global. Se penaliza a más de 75 millones de ciudadanos de la Mancomunidad de Naciones con leyes similares –37 naciones– penalizaban como ocurría en Trinidad [y Tobago], pero ahora hay una menos. ¡Ahora son 36!».
En la reunión de jefes de gobierno de la Mancomunidad de Naciones que se llevó a cabo en Londres en abril de 2018, muchos usuarios de medios sociales pidieron que el asunto se viera a ese nivel. Jones escribió un artículo de opinión para The Guardian donde expresó: «Es imperativo que [el tema de los derechos] LGBTQ+ esté en la agenda en Londres. La ocasión ofrece un espacio seguro para esta discusión y una oportunidad para que la capital del antiguo imperio que nos legó estas leyes nos ayude a dejarlas de lado».
Por ahora, la batalla se da localmente y Jones es optimista de que la Comisión de Igualdad de Oportunidades (EOC) de Trinidad y Tobago será fundamental en poner en vigencia leyes contra la discriminación para proteger a comunidades vulnerables: «El próximo paso es avanzar hacia la inclusión en la ley de igualdad de oportunidades«. Agradeció a la comisión por su apoyo en este caso y dijo que la atención debería estar en redactar políticas adecuadas para avanzar.
En palabras que Dion Boucaud expresó en Facebook, que estuvo en el Palacio de Justicia cuando se anunció la resolución:
Today I saw love …. I felt the hate. I saw victory …. and defeat. I saw tolerance and ignorance. I saw activism … I saw democracy.
Today I saw peaceful protest.
Today I saw hope.
A lot to unpack. A lot to discuss. Let the dialogue continue. Peace and love.
Hoy vi amor… Sentí el odio. Vi victoria… y derrota. Vi tolerancia e ignorancia. Vi activismo… vi democracia.
Hoy vi protesta pacífica.
Hoy vi esperanza.
Mucho que procesar. Mucho que discutir. Que el diálogo continúe. Paz y amor.