Nuevo caso de feminicidio genera indignación y rechazo unánime en el Perú

Eyvi Ágreda. Imagen ampliamente difundida en medios sociales.

En poco más de un mes, Eyvi Liset Ágreda Marchena, de 22 años, fue noticia de primera plana en todos los medios del Perú dos veces: el 24 de abril, cuando se informó que un sujeto le roció combustible y le prendió fuego al interior de un bus mientras regresaba a su casa de trabajar, y el 1 de junio, cuando los mismos medios informaron de su fallecimiento en el hospital donde recibía tratamiento por las graves quemaduras que afectaron el 60% de su cuerpo.

Al día siguiente se supo que el agresor, Carlos Javier Hualpa Vacas, había sido compañero de trabajo de Eyvi y que la acosaba desde hacía semanas. Dos días después del ataque, Hualpa fue capturado por la policía, y aunque al inicio negó todo, finalmente las pruebas lo delataron.

En sus declaraciones, Hualpa revela que le roció gasolina y le prendió fuego «porque se sintió utilizado [por Eyvi]. Tenía que recibir un escarmiento”. Hualpa aseguraba que Eyvi no había devuelto un dinero que él le había prestado para unas compras:

Como no me pagaba, entonces sentí que me había utilizado. […] no dormía, me ponía a llorar. Ella era muy feliz, haciendo su vida normal y yo fregado, discutía con mi mamá. […] alguien tenía que ponerle un alto […].

Realmente, yo no tenía las intenciones de dañar a nadie. Yo solamente quería dañarle su cara, porque ella siempre decía que su cara era bonita.

Hualpa afirma que solamente quería rociarle el combustible en la cara, pero que el bus se movió y que por eso se le esparció por todo el cuerpo. Fue ahí cuando el brazo de Hualpa se prendió también. Otros pasajeros también se vieron afectados.

El 27 de abril, la fiscalía dictó nueve meses de prisión preventiva contra Hualpa por feminicidio agravado en grado de tentativa, por lesiones graves contra siete pasajeros del ómnibus y por delito contra la seguridad pública. Durante la audiencia, Hualpa se mostró arrepentido: “Si me dan 20, 30 años, lo asumo […] me lo merezco”.

Mientras tanto, su víctima era sometida a varias operaciones para remover tejido necrótico y colocarle injertos de piel de cerdo. Eyvi se mantenía sedada para evitarle el dolor de sus heridas y con respiración asistida. El 17 de mayo, se informó que recuperó la conciencia, que conversó con sus familiares y que esperaba salir del hospital pronto, según refirió su hermano en una entrevista.

En total, Eyvi Ágreda pasó por doce operaciones en poco más de un mes.

Por Eyvi, por todas

El viernes 1 de junio, la noticia del fallecimiento de Eyvi sacudió al país. El colectivo «Ni una menos» convocó de inmediato a una marcha pacífica para ese mismo día:

En Twitter, las etiquetas #EyviAgreda, #PorEyviPorTodas y el ya expandido #NiUnaMenos, entre otras, fueron tendencia y caja de resonancia de la indignación general:

El grafiti se refiere a lo expresado por el presidente Martín Vizcarra quien al pronunciarse sobre la muerte de Eyvi Ágreda dijo que «a veces esos son los designios de la vida«. Vizcarra fue muy criticado por esas declaraciones, por lo que luego debió aclarar que lamentaba que un designio no haya permitido a los médicos poder salvarle la vida, y que no se refería a la agresión.

El caso ha generado tanto rechazo que hasta el abogado defensor de Hualpa tuvo palabras duras contra el agresor:

El feminicidio y la violencia contra las mujeres son graves problemas en la sociedad peruana actual. La Encuesta de Desarrollo y Salud Familiar (ENDES 2017) revela que seis de cada diez mujeres peruanas indicaron haber sido víctimas de violencia por parte de sus parejas o acompañantes. Y aunque en los últimos cinco años el porcentaje de mujeres víctimas de violencia se redujo del 71.5% a 65.4%, las cifras continúan siendo alarmantes. Solamente en los cuatro primeros meses de 2018, se registraron más de 40 casos de feminicidio en el Perú, lo que representa un aumento del 26% con respecto al mismo periodo de 2017.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.