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Sur de Iraq está enfurecido por condiciones de vida extremas

Categorías: Medio Oriente y Norte de África, Irak, Derechos humanos, Desarrollo, Medios ciudadanos, Política, Protesta, Relaciones internacionales
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Captura de pantalla de manifestantes iraquíes que ondean banderas y corean lemas mientras las fuerzas de seguridad los rocían con cañones de agua. Imagen: captura de pantalla de un video de YouTube [1] «Aumenta la rabia en Iraq mientras las protestas se esparcen por Bagdad, la capital», publicado el 21 de julio de 2018 por Al Jazeera English.

Los veranos son largos y abrasadores en la ciudad de Basora, al sur de Iraq, donde las temperaturas superan con frecuencia los 37 grados Celsius. Por eso, no sorprendió que sus habitantes tomaran las calles el 8 de julio, después de que Irán restringió el suministro de energía.

Irán suministra 1 400 megavatios de electricidad a la región [2], apenas el 6 % de la demanda estimada [3] de Iraq — pero en un país que ha luchado mucho por satisfacer su demanda de electricidad, cada megavatio cuenta.

Las protestas no son desconocidas para los iraquíes, han participado en frecuentes manifestaciones contra el Gobierno en los años recientes. Las protestas también se han convertido en una especie de tradición de verano, cuando el insoportable calor desencadena frustraciones y obliga a las personas a salir a las calles.

La disminución de la electricidad intensifica los efectos de una terrible ola de calor y las protestas se esparcieron rápidamente a otras nueve provincias del sur, como es, Najaf, Karbala, Dhi Qar, Babil, Maysan, entre otras. Han pasado a prestar atención a otros asuntos que también afectan la calidad de vida, como escasez de agua, creciente pobreza, desempleo y corrupción desenfrenada.

Los activistas y líderes tribales de Basora organizaron su movimiento con la creación de la “Junta de Coordinación para Protestas y Manifestaciones Pacíficas en Basora [4]” para generar una lista de pedidos, y para unirse y asegurarse de que su movimiento siga siendo no violento. En primer lugar de la lista de demandas está un cronograma para restablecer un suministro confiable de agua y electricidad a la ciudad.

Las manifestaciones aumentaron en Basora cuando los manifestantes bloquearon los caminos para paralizar las actividades [5] en el puerto marítimo de Umm Qasr y el oste de Qurna [6], el mayor campo petrolero de Iraq, y obligaron [7] al cierre del cruce fronterizo de Safwan con Kuwait. En Najaf, los manifestantes tomaron por asalto [8] terminales de aeropuerto y pasaron al pavimento, donde desviaron luces y detuvieron el tráfico aéreo.

El sentir contra Irán también se hizo evidente, pues los manifestantes quemaron fotos de líderes iraníes, incluido Ruhollah Khomeini, líder de la Revolución Iraní, y el actual Líder Supremo, Ali Khamenei. Corearon lemas contra la interferencia iraní y prendieron fuego a oficinas de diferentes partidos políticos respaldados por Irán, como Badr, Katiab Hezbollah y Asaib Ahl al-Haq. Los manifestantes acusaron [9] a estos partidos de ser agentes iraníes que facilitan el deterioro de la economía iraquí, con recortes de electricidad y agua, y que consumen petróleo iraquí mientras los iraquíes sufren.

Por su parte, el Gobierno iraquí ha dado razones contradictorias para la decisión de Irán de recortar la energía. El primer ministro Haider al-Abadi sostuvo que los recortes de energía se debian a una escasez de electricidad que aqueja a Irán. Sin embargo, según Mosaab al-Madras [10], portavoz del Ministerio de Electricidad, la razón de Irán detrás de la medida son deudas impagas de Iraq.

Adel Jerian, subsecretario del Ministerio de Electricidad, sostuvo otra teoría por la que Irán restringió el suministro de energía. Sugirió [2] que desde que Estados Unidos se retiró del Plan de Acción Conjunto y Completo​ (JCPOA, por su nombre en inglés), más conocido como el pacto nuclear de Irán, Iraq no pudo cumplir con el pago de deudas luego de las nuevas sanciones impuestas contra Irán. También indicó que los dos países iniciaron negociaciones para encontrar un nuevo mecanismo para pagar la deuda de Iraq.

‘Cortaron internet, así que nos pueden golpear’

El Gobierno iraquí ha respondido a las manifestaciones con fuerte represión. Se envió a los servicios de seguridad para controlar las multitudes con cañones de agua, gas lacrimógeno y, en algunos casos, municiones.

Fuentes médicas han dicho [11] a Al Jazeera que al menos 14 personas han muerto desde el inicio de las protestas. El Observatorio Iraquí para Derechos Humanos (IOHR, por su nombre en inglés), supervisor de derechos con sede en Bagdad, calcula [12] que 831 personas «murieron o están heridas», pero no ofrecieron especificaciones sobre la cantidad de muertes y la cantidad de heridos.

Una investigación de Human Rights Watch (HRW) calificó [13] la respuesta del Gobierno como uso excesivo e innecesario de fuerza letal. Los testigos que hablaron con HRW observaron a las fuerzas de seguridad golpear a los manifestantes con rocas y atacarlos con palos y tubos de metal.

Los manifestantes también denunciaron que el Gobierno bloqueó temporalmente internet el 14 de julio, acusación que luego se confirmó con pruebas técnicas de NetBlocks [14], grupo de análisis de censura de internet. Los servicios de medios sociales, como Telegram, Facebook e Instagram, también fueron bloqueados, en lo que puede haber sido un intento de impedir que los civiles difundieran imágenes de uso de violencia por parte de la las fuerzas de seguridad.

Un manifestante habló [15] con Amnistía Internacional sobre su experiencia:

They wanted to beat everyone and left no-one without injury. One person was shot in the leg and I saw one person bleeding from his eye. As we retreated, one of them [Iraqi Special Weapons and Tactics] grabbed me and one beat me. When I struggled away, he threw the baton at me and broke my arm. They cut off the internet so they can beat us.

Querían golpear a todos y que todos quedaran heridos. Una persona recibió un tiro en la pierna, y vi a una persona sangrando de un ojo. Cuando nos retiramos, uno [de Armas y Fuerzas Especiales Iraquíes] me agarró y me golpeó. Cuando luché, me lanzó el bastón y me rompíó el brazo. Cortaron internet, así que nos pueden golpear.

El primer minsitro Abadi ha negado estas acusaciones. El acceso a internet ha sido restablecido, pero algunos sitios de medios sociales siguen inaccesibles.

Presuntamente, el Gobierno iraquí también está realizando una operación a gran escala para encontrar y arrestar a los manifestantes. Según Hesam al-Hashemy [12] de IOHR, “las autoridades iraquíes arrestaron a 348 personas por participar en las manifestaciones, 314 fueron liberadas tras firmar un compromiso de que no realizarían ni convocarían a ninguna protesta posterior”.

Respuestas políticas

En un esfuerzo para calmar las protestas, el primer ministro Abadi ha formado una comisión para investigar sus pedidos, además de prometer empleos para quienes viven cerca de los campos petroleros y 3 000 millones de dólares para mejorar servicios públicos en Basora.

Muqtada al-Sadr, destacado clérigo shiíta y ganador de las elecciones parlamentarias de mayo [16], ha apoyado a los manifestantes. He pedido una demora en la formación de charlas del Gobierno hasta que se cumplan los pedidos de los manifestantes, y sugirió conformar una comisión para conversar con los manifestantes.

El ex primer ministro Ayad Allawi cree que la formación de un gobierno interino es la manera de satisfacer las necesidades de los maniestantes. También sostiene que las elecciones de mayo estuvieron arregladas y está pidiendo que se lleven a cabo nuevas elecciones.

Pocos políticos se han referido a las protestas, pero parece que los que han dicho algo ignoran obstinadamente de qué se tratan las protestas.

Todas las señales indican que los iraquíes del sur no están pidiendo un arreglo temporal, sino un cambio de un sistema políticos que los ha dejado sin agua adecuada para beber, electricidad confiable o empleo remunerado.