Marruecos establece cooperación con países de Centroamérica en el ámbito digital

Boulevard Mohamed V, en Rabat, por Nawal Bennani. CC License 3.0.

Este artículo fue escrito por nuestro autor invitado Mohamed Sarraf y editado por Global Voices.

En Marruecos, el año 2018 ha estado marcado por diferentes firmas de acuerdos internacionales. El 9 de julio se reunieron en la sede de la ADII (siglas de Administración de Aduanas e Impuestos Indirectos) en Rabat, el director general Nabyl Lakhdar se reunió con Rita María Zniber, presidenta de la Asociación de Productores de Uvas de Marruecos (ASPRAM), con el fin de llegar a un acuerdo marco. El acuerdo permite institucionalizar a los socios para establecer diversas acciones comunes y coordinadas, hacer un seguimiento preciso del avance de varios proyectos previstos y mejorar el procedimiento ambiental, reglamentario y jurídico de las empresas del sector de la uva marroquí.

El 10 de julio, una delegación parlamentaria centroamericana, de visita oficial en Marruecos, fue recibida por Nabyl Lakhdar en la ADII. Anselmo Otoniel Navarro González, presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales y Asuntos Migratorios del Parlamento Centroamericano (PARLACEN), abordó las diferentes posibilidades de desarrollo de cooperación entre la aduana marroquí y la de los países que conforman el PARLACEN (Honduras, Guatemala, República Dominicana, Nicaragua y Salvador).

El objetivo fue mejorar los servicios aduaneros como punta de lanza para la estrategia de desarrollo de Marruecos. En efecto, las pruebas que tengan éxito en materia de aduanas digitales y de formación (especialmente con las operaciones de riesgo) se exportarán a los países del PARLACEN. Es un primer paso de muchos que vendrán antes de terminar la reforma, prevista para dentro de tres años.

Entre la serie de acciones que ya están en modo de prueba en medio de la reforma está el sistema de marcación fiscal SAMID (Sistema Automatizado de Marcación Integrada de Aduanas), puesto en marcha desde 2010, especialmente en el puerto de Tánger Med. El sistema se utiliza en tiempo real y a distancia, y permite conocer la base impositiva relativa a la Tasa Interna de Consumo (TIC) sobre las bebidas y los productos de tabacos manufacturados que sean importados u obtenidos localmente dentro del país. Fue creado por la empresa suiza SICPA y permite etiquetar estos productos y distinguirlos de los originados en la falsificación, fraude o contrabando. No es el único cambio realizado durante la reforma de 2010. La Administración de Aduanas ha reconfigurado sus diferentes puntos de control, y se apoya principalmente en el análisis y la gestión de riesgos, antes del despacho aduanero de mercaderías y durante el control inmediato de las mercaderías.

También se han puesto en funcionamiento grupos capacitados dedicados exclusivamente a la identificación de operaciones en riesgo, una consolidación de controles y una coordinación especial para los diferentes servicios (Aduana, Oficina de Cambios y de Aduana y Dirección General de Impuestos) para realizar operaciones de verificación empresarial. Los resultados no se han hecho esperar, se han duplicado los embargos de productos entre 2016 y 2017, que llegan a los cinco millones. De la misma manera, la ADII lucha contra el tráfico de dinero, estupefacientes y cigarrillos, lavado de dinero, y asegura un control cada vez mayor de pasajeros.

Pero todo esto sigue siendo insuficiente para Nabyl Lakhdar, que se desempeña como director general de la ADII desde noviembre de 2017, y que anteriomente se hizo cargo entre 1998 y 2015. Originalmente, el sistema en línea BADR (Base Automatizada de Aduanas en Red) se encarga de las mercancías de importación y exportación en Marruecos, Lakhdar ha decidido reformar más intensamente el servicio de aduanas con un plan ambicioso previsto para durar hasta 2021.

¿El objetivo? Tolerancia cero hacia el contrabando y desarrollo de acuerdos internacionales más sólidos.

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