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Australia revoca ciudadanía a magnate chino por presunta interferencia política en el país

Categorías: Asia Oriental, Australia, China, Hong Kong (China), Medios ciudadanos, Política, Relaciones internacionales
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Huang Xiangmo. Captura de pantalla de HK Apple TV.

La noticia sobre la revocación de la ciudadanía australiana al magnate chino Huang Xiangmo [2] estremeció a la población y comunidades chinas en el extranjero a principios de febrero de 2019. Huang ahora se encuentra reubicado en Hong Kong y declaró ante los medios de comunicación [3] que la prohibición de ingresar al país fue «absurdamente injusta» y «se basó en especulaciones falsas que son prejuiciosas e infundadas». No obstante, el Gobierno australiano y muchos investigadores sienten que Huang utilizó injustamente sus conexiones políticas para impulsar los intereses del Partido Comunista Chino dentro del país.

El proyecto Chinese Border-Crossing Question and Answer [4] organizado por la Fundación para la Cultura y Educación Mediática [5] (CMEF) de Hong Kong, entrevistó al investigador W.L. Yeung, que vive en Perth, para explicar el contexto del suceso.

CMEF: ¿Quién es Huang Xiangmo? ¿Cómo se dio a conocer en Australia?

W.L Yeung (WLY): Huang Xiangmo, whose legal name is Huang Changran (黄畅然), is a property developer, a Director of the Yuhu Group (玉湖集团), a political donor and a lobbyist. He relocated to Australia from China around 2011. The Australian public first heard of him when he splashed AUD$12.8 million on a mansion in a prestigious Sydney suburb in 2012. This real estate transaction had stimulated a buying spree of similarly expensive properties among Chinese investors.

Huang caught public attention again in 2014 when he donated AUD$1.8 million to the University of Technology Sydney to replace an existing China research centre, famous for its independent critical research, with a pro-Beijing Australian-China Relations Institute [6] (UTS ACRI) headed by Huang’s handpicked Director, Australia’s former foreign minister Bob Carr.

He subsequently donated another AUD$4.5 million to several universities. Among the beneficiaries of his generosity is a former Australian diplomat who had once been a vocal critic of the Confucius Institute [7].

Mainstream media did not start to look seriously into him until 2016 when a Fairfax reporter discovered that Huang had made more than AUD$1 million donations to both major political parties from 2012 to 2015. Since then the total sum surged to around AUD$3 million.

The Fairfax report also revealed details of how Huang was caught up in a corruption scandal in his hometown of Jieyang in Guangdong Province prior to his departure for Australia.

W.L. Yeung (WLY): Huang Xiangmo, cuyo nombre legal es Huang Changran (黄畅然), es un promotor inmobiliario, director del Grupo Yuhu (玉湖集团), donante y miembros de un grupo de presión. Salió de China y se reubicó en Australia aproximadamente en 2011. La primera vez que el público australiano escuchó de él fue cuando causó revuelo por invertir 12,8 millones de dólares australianos en una mansión en un suburbio prestigioso de Sídney en 2012. Esta transacción inmobiliaria estimuló una ola adquisitiva de inmuebles de precios similares entre inversionistas chinos.

Huang capturó nuevamente la atención del público en 2014, cuando donó 1,8 millones de dólares australianos a la Universidad de Tecnología de Sídney para reemplazar un centro de investigación sobre China, famoso por su investigación independiente fundamental, por un Instituto para fomentar las relaciones bilaterales australiano-china a favor de Pekín (UTS ACRI) [6], presidido por un director que el propio Huang nombró, el exministro de Relaciones Exteriores de Australia Bob Carr.

Posteriormente, donó otros 4,5 millones de dólares australianos a varias universidades. Entre los beneficiarios de su generosidad se encuentra un exdiplomático australiano que fue anteriormente un férreo crítico del Instituto Confucio [8].

Los medios de comunicación principal recién comenzaron a investigarlo en 2016, cuando un reportero de FairFax descubrió que Huang hizo donaciones de más de un millón de dólares australianos a los dos partidos políticos importantes, de 2012 hasta 2015. Desde entonces, la cifra total aumentó aproximadamente a tres millones de dólares australianos.

El artículo de FairFax también reveló información sobre cómo Huang fue implicado en un escándalo de corrupción en su pueblo natal de Jieyang, en la provincia de Guangdong, antes de partir a Australia.

CMEF: La decisión del Gobierno australiano se basó en una recomendación de seguridad, de que estaba «dispuesto a realizar actos de interferencia extranjera». ¿Cuáles son los «actos de interferencia extranjera» que Huang ha realizado en Australia?

WLY: I believe the “acts of foreign interference” here refer to Huang’s united front association and the pattern of his donations, both of which suggests he has been actively seeking political influence in order to promote the interests of the Chinese Communist Party.

Huang was head of the Australian Council for the Promotion of Peaceful Reunification of China [9] (ACPPRC) and is currently head of the Oceanic Alliance of the Promotion of Peaceful Reunification of China [10] (OAPPRC). Both organizations are official branches of the China Council for the Promotion of Peaceful National Reunification [11] (CCPPNR) in Beijing run by the United Front Work Department of the CCP Central Committee. Huang’s membership in these groups was mentioned by the Australian Security Intelligence Organisation (ASIO) as one of the reasons for cancelling Huang’s permanent resident status.

A 2016 protest rally in support of China’s sovereignty at the South China Sea (SCS) was staged by the Melbourne branch of the ACPPRC. It also links to other protest activities, including protests against the visits of the Dalai Lama to Australia.

During parliamentary debates into the Sam Dastyari scandal in 2016 [12], alarming evidence had emerged, pointing to ways in which Huang used his friendship with politicians to solicit policy endorsement in alignment with Beijing’s interests:

  • Labor Senator Sam Dastyari, who was caught on record of allowing Huang to pay a fine of A$44,000 on his behalf to settle a court case, had previously parroted Beijing’s line on SCS, contrary to his party’s policy, in a press conference Huang arranged exclusively for Chinese language media.
  • At about the same time, Huang withdrew a AUD $400,000 donation promised to the Labor party after the party’s foreign affairs spokesman had openly criticized China’s expansion at the SCS.
  • It was suggested that Huang and others had topped up their political donations in 2014 prior to the signing of a controversial China-Australia Free Trade Agreement.

Government records also indicated that Dastyari had attempted to use his political influence to fast-track Huang’s citizenship application.

WLY: Creo que los «actos de interferencia extranjera» se refieren a la asociación del Frente Unido de Huang y al patrón de sus donaciones, ambos sugieren que ha intentado activamente tener influencia política para promover los intereses del Partido Comunista Chino.

Huang fue el director del Consejo Australiano para la Promoción de la Reunificación Pacífica de China (ACPPRC) [9] y es actualmente el director de la Alianza Oceánica para la Promoción de la Reunificación Pacífica de China (OAPPRC) [10]. Ambas organizaciones son sedes oficiales del Consejo Chino para la Promoción de la Reunificación Nacional Pacífica (CChPRP) [11] en Pekín, supervisado por el Departamento de Trabajo del Frente Unido del Comité Central del PCCh. La Organización Australiana de Seguridad e Inteligencia (ASIO) manifestó que la participación de Huang en esos grupos fue una de las razones por las que cancelaron su estado de residente permanente.

La sede del ACPPRC en Melbourne organizó una asamblea de protesta en apoyo a la soberanía de China sobre el mar del sur de China (SCS). También la vinculan con otras actividades de protesta, como las manifestaciones en contra de la visita del Dalái Lama en Australia.

Durante el debate parlamentario sobre el escándalo de Sam Dastyari en 2016 [12], surgió evidencia alarmante que señaló cómo Huang aprovechó su amistad con políticos para solicitar apoyo en políticas que estuvieran alineadas con los intereses de Pekín:

  • El senador del partido laborista Sam Dastyari, a quien descubrieron mediante los registros que permitió que Huang pagara una multa de 44 000 de dólares australianos a su nombre para resolver un caso judicial, anteriormente reiteró la política de Pekín sobre SCS, contrario a la política de su partido, en una conferencia de prensa que Huang organizó exclusivamente para los medios de comunicación de habla china.
  • Aproximadamente en el periodo, Huang retiró una donación de 400 000 de dólares australianos que había prometido realizar al Partido Laborista, después de que el vocero de asuntos exteriores del partido criticó públicamente la expansión de China en SCS.
  • Se sugirió que Huang y otras personas habían incrementado sus donaciones políticas en 2014 antes de la firma de un controvertido acuerdo de libre comercio entre China y Australia.

Los registros gubernamentales señalaron también que Dastyari intentó utilizar su influencia política para agilizar el proceso de solicitud de ciudadanía de Huang.

CMEF: Huang se mantuvo activo en Australia durante muchos años. ¿Por qué el Gobierno australiano decide tomar acción recién ahora? ¿Hubo algún suceso político y jurídico recientemente que haya conllevado a esta decisión?

WLY: Australia’s counter-espionage legislation was seriously out of date in the past. Foreign donations were permitted in Canberra as as well as in most states (except NSW). Following months of intense debates and reviews, a new set of legislation on foreign political interference [13] was passed in June 2018 which bans foreign political donations. The new legislation gives a clear definition of political interference, provides law enforcement the necessary tools to investigate and prosecute offenders, as well as the legal basis for the government to force foreign agents to register and to prosecute them when they fail to comply.

Diplomatic relations between China and Australia is now at an all-time low. China seems to take an offence at Australia banning Huawei from taking part in future 5G mobile infrastructure rollout and the passing of the foreign political interference legislation.

WLY: La legislación sobre contraespionaje de Australia estaba seriamente desactualizada. Las donaciones extranjeras estaban permitidas en Canberra, y en la mayoría de los estados (a excepción de Nueva Gales del Sur). Tras meses de intensos debates y revisiones, un nuevo un conjunto de leyes sobre interferencia política extranjera se aprobó en junio de 2018, que prohíbe las donaciones políticas extranjeras. La nueva legislación ofrece una definición clara qué es la interferencia política, da a los cuerpos de la Policía las herramientas necesarias para investigar y procesar a los infractores, asimismo, el fundamento legal para que el Gobierno obligue a los agentes extranjeros a ingresar en el registro y procesarlos cuando no acaten la norma.

Las relaciones diplomáticas entre China y Australia actualmente decayeron considerablemente. Aparentemente, a China le ofendió que Australia prohibiera la participación de Huawei en la presentación de infraestructura móvil 5G y por la aprobación de la legislación sobre interferencia política extranjera.

CMEF: ¿Cuál es la reacción del público general con respecto a la revocación de la residencia permanente de Huang? ¿Cómo reacciona la comunidad china a esta noticia en particular?

Yeung: Public opinion supports the government’s decision. Prime minister Scott Morrison’s personal rating had slightly improved since Huang’s ban was made public, even though Liberal continues to trail behind Labor in opinion polls.

The Chinese dissident community is jubilating. A Chinese-Australian community group, the Australian Values Alliance, has just issued a statement to welcome the decision. Outside of the dissident circle, however, Chinese communities nationwide are rather quiet, reflecting a sense of uncertainty and insecurity over the impact of the new legislation.

Pro-Beijing Chinese media in Australia have fired some pathetic shots. A widely circulated WeChat post from a Perth-based public news platform attempted to rouse sympathy by claiming that Huang, a respectable community leader, had been treated worse than a serial killer. The WeChat platform is owned by the general secretary of the WA Shanghai Federation, a powerful united front group whose president is an honorary advisor of the WA branch of the ACPPRC.

Phoenix TV has also posted a video interview with Keith Suter, who called himself an Australian scholar of international studies. However, the Australian international studies community on Twitter was unable to verify Suter’s qualification and his institutional affiliation. During the interview, Suter argued against the legality of ASIO’s ruling.

WLY: La opinión pública respalda la decisión del Gobierno. La valoración personal del primer ministro, Scott Morrison, mejoró ligeramente después de la prohibición de Huang se hizo pública, a pesar de que el Partido Liberal continúa siguiéndole los pasos al Partido Laborista en las encuestas de opinión.

La comunidad disidente china está contenta. Un grupo comunitario chino-australiano, la Alianza de Valores Australianos, recientemente emitió una declaración en la que aceptaron la decisión. Fuera del círculo opositor, no obstante, las comunidades chinas a nivel nacional no se han pronunciado al respecto, lo que refleja un sentido de incertidumbre e inseguridad sobre el impacto de la nueva legislación.

Los medios de comunicación a favor de Pekín en Australia han manifestado su sentir de forma patética. Una publicación que realizó una plataforma informativa pública ubicada en Perth, que circuló extensamente en WeChat, intentó generar solidaridad con la afirmación de que a Huang, respetable líder comunitario, lo habían tratado peor que a un asesino en serie. La plataforma WeChat es propiedad del secretario general de la Federación de Shanghai de Australia Occidental, influyente colectivo del Frente Unido cuyo presidente es asesor honorario de la sede de AO del ACPPRC.

Phoenix TV publicó también un video de una entrevista con Keith Suter, que se autodenominó académico australiano de estudios internacionales. No obstante, la comunidad australiana de estudios internacionales no pudo verificar en Twitter su título ni su afiliación institucional. Durante la entrevista, Suter argumentó contra la legalidad de la decisión de la ASIO.

CMEF: ¿Qué implica la decisión para la política nacional australiana y la relación diplomática con China? ¿Existe la posibilidad de que se tomen más acciones para reducir la interferencia de China en el país?

WLY: A part of the new legislation contains a transparency scheme, modeled in part on the United State’s foreign agents registration act. It will require individuals or institutions to make a declaration if they are acting on behalf of foreign power to influence the political processes of Australia. Those who are currently lobbying for foreign governments in Australia have a six-month grace period to register. It is expected that some individuals or institutions who have failed to comply will be prosecuted. So yes, I believe this will go a long way in protecting Australia against interference from most foreign countries including China.

I am one of the Australian scholars of China, the Chinese diaspora and China-Australia relations who signed a joint letter in March 2018 to support the new foreign interference legislation. I share with other cosignatories a firm believe that “identifying, recognizing and winding back CCP interference as an unacceptable and counterproductive part of bilateral engagement is a step towards developing a healthy China-Australia relationship over the long term”.

WLY: Una parte de la nueva legislación contiene un plan de transparencia, que fue estructurado, en parte, de forma similar a la la ley de registro de agentes extranjeros de Estados Unidos. Este requerirá a las personas o instituciones realizar una declaración si actúan a nombre de un poder extranjero para influenciar los procesos políticos de Australia. Concedieron un periodo de gracia de seis meses para que las personas que actualmente ejercen presión para Gobiernos extranjeros en Australia se registren. Se espera que se procese a algunas personas o instituciones que no acaten la norma. Por lo tanto, sí creo que esto será de gran ayuda para proteger a Australia contra la interferencia de la mayoría de países extranjeros, entre estos China.

Soy uno de los académicos australianos que estudia China, a los chinos en el extranjero y las relaciones China-Australia que firmó una carta conjunta, en marzo de 2018, para apoyar la nueva legislación sobre interferencia extranjera. Comparto con otros consignatarios la firme creencia que «identificar, reconocer y retraer la interferencia del PCCh, como una parte inaceptable y contraproducente de la participación bilateral, es un paso para desarrollar una sana relación China-Australia a largo plazo».