Brote de ébola de República Democrática del Congo se extiende a vecina Uganda, se activa rápida respuesta

En agosto de 2012 se trataron varios casos de ébola en el hospital de Kagadi, en el distrito de Kibaale. Se han identificado tres nuevos casos entre personas que entraron en Uganda por la frontera con la República Democrática del Congo. Foto de CDC en Flickr, con licencia CC BY 2.0.

El 12 de junio, funcionarios del Ministerio de Salus de Uganda emitieron un comunicado de prensa que confirmaba dos casos de ébola. Un niño de cinco años y su abuela, de 50, dieron positivo en el virus del ébola el 10 de junio, y murieron dos días después, el 12 de junio. Un hermano menor del fallecido, de tres años, y un hombre de 23, sin relación con la familia, se mantienen aislados en el hospital de Bwera, en el distrito fronterizo de Kasese, República Democrática del Congo.

La familia de tres miembros viajó a Uganda desde la vecina República Democrática del Congo (RDC):

COMUNICADO DE PRENSA: Niño de cinco años que llegó de RDC el 10 de junio y dio positivo en ébola murió esta mañana. Dos nuevos casos confirmados de ébola ─la abuela y un hermano del fallecido─ están actualmente aislados en la Unidad de Tratamiento del Ébola del hospital de Bwera

La cadena NTV Uganda confirmó luego el fallecimiento de la abuela:

Otra paciente de ébola ha fallecido en la Unidad de Tratamiento de Ébola de Bwera, en el distrito de Kasese.

El ébola es un virus raro y a menudo mortal que se extiende por contacto humano cercano con fluidos como sangre, heces o vómito. Según el Centro de Control de Enfermedades, esta dolencia toma su nombre del primer caso detectado en 1976 cerca del río Ébola, en lo que hoy es la República Democrática del Congo. Ha habido brotes en varios países africanos, y casos en otros países como Reino Unido, Italia, Rusia y Filipinas. Entre sus síntomas están fiebre alta, fuertes jaquecas, dolor muscular y hemorragias injustificadas.

La República Democrática del Congo lleva desde agosto de 2018 luchando contra un brote de ébola en la provincia de Kivu del Norte, que ha sido particularmente difícil de contener debido al conflicto armado, la desinformación y la desconfianza. Las últimas cifras del Ministerio de Salud congolés muestran que cerca de 1400 personas han muerto en el país por la enfermedad causada por el virus del ébola desde agosto de 2018, pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dudado hasta ahora si declararlo una «emergencia de salud pública de importancia internacional» (ESPII).

El número de casos de ébola en la RDC se ha incrementado en 51 en los últimos siete días.
Las cifras del Ministerio de Salud muestran que 1396 personas han muerto desde que comenzó el brote en agosto de 2018.

Dada la proximidad con Uganda, estos casos confirman los temores sobre la posibilidad de que aparecieran casos en este país por la frecuente migración informal a través de la permeable frontera. En agosto de 2018, cuando se produjo un brote de ébola en Kivu del Norte, Uganda puso en marcha actividades de preparación y supervisión en 22 distritos fronterizos con RDC para prevenir que la enfermedad entrara en Uganda.

El Ministerio de Salud montó unidades de tratamiento del ébola en el Hospital General de Bundibugyo, en el Hospital Bwera de Kasese ─donde recibieron tratamiento y murieron el niño y su abuela─ y en el Centro Sanitario Rwebisengo del distrito de Ntoroko.

No es la primera vez que Uganda se enfrenta al ébola, pero estos son los primeros casos registrados en Uganda que se han entrado al país y tienen su origen en la actual crisis de ébola de la RDC.

Una vez que el ébola se extendió a Uganda y potencialmente a otros países como los vecinos Ruanda y Sudán del Sur, la OMS convocó una reunión de emergencia el 14 de junio en Ginebra para debatir la posible designación de la crisis como ESPII:

Tras la propagación del ébola a Uganda desde la RDC, vuelvo a convocar al Comité de Emergencia del RSI en Ginebra para determinar si el brote constituye una emergencia de salud pública de importancia internacional. Será la tercera reunión del comité durante este brote.

Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, elogió al ministro de Salud ugandés por reconocer la necesidad de una acción nacional para prevenir la propagación del ébola. También dijo que en ese país se habían vacunado unos 4700 trabajadores sanitarios de 165 centros de salud, entre ellos el hospital donde el niño infectado y su abuela fueron tratados antes de morir:

Uganda ha vacunado a cerca de 4700 trabajadores sanitarios de 165 centros de salud, incluyendo el hospital donde se trata al niño infectado, dentro de su preparación ante una posible importación del ébola durante el actual brote de la RDC.

Según un informe de la OMS de 2018, el Ministerio de Salud ugandés comenzó a afianzar su sistema de respuesta al ébola con acciones como «reforzar la vigilancia, aumentar los conocimientos de rastreo de contactos, diagnósticos de laboratorio, prevención de infecciones y control y gestión clínica de pacientes, que abarca cuidado psicosocial, funerales dignos y seguros, mejora de la comunicación de riesgos y compromiso de la comunidad».

Según el informe, la frontera de Mpondwe registra el paso de más de 20 000 personas en días de mercado. Los funcionarios de frontera controlan la temperatura corporal de las personas que entran en Uganda desde la RDC, y las que tienen fiebre alta se someten a más controles para detectar síntomas similares a los del ébola:

Punto fronterizo, en el río Similiki. Tráfico de aproximadamente 500 personas al día y mil en días de mercado. El examen de temperatura está muy activa con todos los viajeros de DRC, a los que se hace el examen antes cruzar a Uganda.
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Examen de temperatura en la frontera de Mpondwe, en el distrito de Kasese. Mpondwe es un punto fronterizo entre Uganda y la RDC.

Uganda ha pedido a las comunidades que suspendan los mercados fronterizos por los casos de ébola confirmados.

El Gobierno de Uganda exige a las comunidades fronterizas entre Uganda y RDC que suspendan todos los mercados y grandes reuniones, bodas y funerales. Este llamamiento se hace después de la muerte de un niño de cinco por ébola en Kasese esta mañana.
También se confirman dos casos más: su hermano de tres años y su abuela.

Desde 2018, educadores sanitarios realizan visitas puerta por puerta para informar a la gente, y en la televisión y la radio se emiten mensajes sobre el ébola.

Números de teléfono locales que funcionaron como líneas de emergencia del ébola en el hospital de Kagadi, distrito de Kibaale, en 2012, cuando se produjo un brote de ébola. Foto de CDC en Flickr, con licencia CC BY 2.0.

Los internautas ugandeses han expresado su temor por los nuevos casos, pero también han aplaudido la rápida respuesta del Gobierno y su demostrado compromiso con la detección y prevención del ébola:

«También se han instalado unidades de tratamiento de ébola en el hospital general de Bundibugyo, Hospital de Bwera en Kasese, centro de salud de Rwebisengo en el distrito de Ntoroko y hay otro en construcción en el hospital de la amistad en Naguru en Kampala», según información de la OMS.
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Uganda ha contenido varios brotes de ébola, y las comunidades suelen responder bien a las instrucciones del gobierno respecto a la prevención.

Felicitaciones al Ministerio de Salud ugandés y a los equipos en el terreno por su rápida activación del protocolo contra el ébola. Deseamos éxitos a todo el personal de contención.

No es la primera vez que Uganda se enfrenta al ébola y consigue contenerlo, aunque esta vez la cepa es distinta:

Interesante dato del ébola: aunque Uganda ha tenido cinco brotes anteriores, ninguno fue causado por Ébola Zaire, cepa responsable del brote de RDC. Ciertamente, Uganda sufrió el tercer mayor brote registrado, el de Gulu, en 2000-2001. Tienen experiencia con el ébola.

Solo en 2012, Uganda tuvo que lidiar con dos brotes de ébola que dejaron 21 muertos. El historial ugandés de respuesta a enfermedades epidémicas virales es diametralmente distinto al de los países de la región debido a su fuerte inversión en el Instituto Ugandés de Investigación en Virus (UVRI) y su condición como «líder mundial en supervisión de virus».

Uganda se enfrenta ahora a una amenaza única, ya que el brote se ha propagado desde la vecina RDC, país con el que comparte una extensa frontera y que sufre un brote imparable.

Uganda ha prohibido las reuniones públicas en el distrito de Kasese. No obstante, la OMS ha constatado que el movimiento a través de la frontera de la República Democrática del Congo y Uganda no ha sido restringido hasta el momento.

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