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Manifestaciones antiextradición en Hong Kong precipitan movimiento contra autoridades policiales respaldadas por Pekín

Categorías: Asia Oriental, China, Hong Kong (China), Derecho, Medios ciudadanos, Política, Protesta

Policía antidisturbios persiguió a manifestantes hasta Wong Tai Sin y dispararon gases lacrimógenos cerca de una zona residencial densamente poblada. Fotografía de inmediahk.net (CC BY-NC 2.0).

Tras el ataque del 21 de julio de 2019, cuando una multitud de hombres vestidos de blanco y armados irrumpieron en la estación de metro de Yuen Long, [1] las manifestaciones contra la extradición en Hong Kong se han convertido en un movimiento ciudadano contra las autoridades policiales respaldadas por Pekín, que hacen la vista gorda ante la violencia de la Tríada [2], banda de crimen organizado presuntamente responsable del ataque.

Desde marzo de 2019, los manifestantes contra la extradición han estado luchando contra un proyecto de ley de extradición que “permitiría a las autoridades locales detener y extraditar a personas buscadas en países o territorios con los que Hong Kong no tiene acuerdos de extradición, como China continental y Taiwán”. Los manifestantes temen que los hongkoneses pierdan su independencia al colocarlos bajo la jurisdicción de China.

Leer más en la cobertura especial [3] de Global Voices sobre las manifestaciones contra la extradición en Hong Kong

¿Quién está detrás del ataque del 21 de julio en Yuen Long?

Desde mediados de julio de 2019, han aparecido videos y testimonios que demuestran que la autoridad policial regional en Yuen Long fue notificada un día antes del ataque organizado. Sin embargo, no se tomó ninguna medida para dispersar a la multitud, que comenzó a reunirse en las calles alrededor de las 18:00 horas.

La multitud irrumpió en la plataforma de la estación a las 22:30 horas, aproximadamente, y en los videos puede verse a dos agentes de policía alejándose del caos. La policía antidisturbios llegó a los 39 minutos de iniciado el ataque, un poco después de las 23:00 horas, y el grupo de personas armadas abandonó la plataforma. Tan pronto como la policía antidisturbios dejó el lugar, la multitud armada inició un segundo ataque y 45 personas resultaron heridas.

Un video de siete minutos de Now TV [4], que ya fue eliminado de Facebook, mostraba a funcionarios policiales de alto rango que entraron a una aldea cercana para negociar con líderes de la Tríada esa misma noche. Sin embargo, después del encuentro, un representante de la Policía dijo a la prensa que se encontraba en el lugar, que no habían visto a ningún hombre armado vestido de blanco. Los atacantes se alejaron de la plataforma después del ataque y las autoridades policiales no detuvieron a nadie en el lugar esa noche. La demora en las detenciones dio tiempo a los principales sospechosos para escapar.

¿Colaboró Facebook con el Gobierno de China y Hong Kong y eliminó pruebas sobre la cooperación entre la Policía y la Tríada en el ataque del 21 de julio en Yuen Long? Internautas descubrieron que un video de siete minutos de NOWTV en Facebook, que mostraba un encuentro entre los matones vestidos de blanco y la policía, desapareció misteriosamente.

Hasta la primera semana de agosto, la Policía había detenido a 19 personas “vestidas de blanco” y acusó a los violentos atacantes con un delito menor de reunión ilícita, que prevé una pena máxima de tres años de prisión. Por otro lado, 44 manifestantes contra la extradición fueron acusados de provocar disturbios, que tiene una pena máxima de 10 años de prisión.

Más pruebas siguen apareciendo acerca de la participación entre bastidores de la Oficina de Enlace de China con el objeto de coordinar el ataque de Yuen Long. Varios medios de comunicación, incluido RTHK, servicio público de radiodifusión de Hong Kong [11], han elaborado una cronología de los hechos que llevaron al ataque:

11 de julio

Li Jiyi, director de la Oficina de Enlace de los Nuevos Territorios, pronunció un discurso en un evento comunitario en el que instaba a los habitantes del lugar y los concejales de distrito a que evitaran que las manifestaciones contra la extradición se extiendieran a Yuen Long.

15 de julio

Varios activistas contra la extradición fueron atacados por una multitud [12] cuando intentaron mostrar una grabación de violencia policial en un parque cerca de la estación de metro de Yuen Long.

20 de julio

Durante una asamblea en apoyo a la fuerza policial de Hong Kong, Arthur Shek, figura pública afín a Pekín, sugirió [13] a simpatizantes de la Policía que utilizaran palos de bambú y tubos de metal para dar una lección a los manifestantes.

21 de julio

Se vio en un video a Julius Ho, legislador pro-Pekín, estrechando las manos y haciendo un gesto con el pulgar hacia arriba a los principales miembros de la Tríada que lideraron el ataque producido alrededor de las 22:00 horas cerca de la estación de Yuen Long.

Nuevas manifestaciones contra la conexión entre la Tríada y la Policía

Como respuesta al ataque de Yuen Long, más de 200 000 ciudadanos se reunieron en Yuen Long el 27 de julio para manifestarse contra el violento ataque, a pesar del rechazo de la Policía a emitir un permiso de protesta. Esta concentración ilegal condujo nuevamente al uso de gases lacrimógenos y a una represión violenta.

Esta vez, en lugar de una multitud vestida de blanco, la policía antidisturbios arrinconó a los manifestantes en la estación de metro de Yuen Long, donde detuvo a 11 personas y 23 resultaron heridas. [14]

A las 17:23 horas dispararon gases lacrimógenos delante de una ambulancia en On Lok Road (Yuen Long).

Kris Cheng, de Hong Kong Free Press (HKFP), lo sintetizó así en Twitter:

Resumen: Los manifestantes se limitaron a no entrar a las aldeas, pero ante la ocupación de las principales carreteras en Yuen Long, la policía utilizó armas sin límites: gases lacrimógenos, balas de goma y granadas de esponja, y agredió a los manifestantes en la estación de metro… Más gente cree en la conexión entre la Policía y la Tríada.

El 28 de julio, los manifestantes realizaron otra concentración en la isla de Hong Kong para exigir una investigación independiente de las causas y las responsabilidades del aumento de los conflictos en torno a la saga de la extradición.

Mientras los manifestantes caminaban hacia la Oficina de Enlace de China en el distrito Occidental, la policía antidisturbios disparó una ronda tras otra de gases lacrimógenos, gas pimienta y balas de goma en el distrito de Sheung Wan cerca del distrito Central. Al menos 16 manifestantes resultaron heridos y 49 personas fueron detenidas [14] durante los disturbios:

Luego de que la policía disparara varias rondas de gases lacrimógenos, aún se observa el humo en el aire en las calles de Sheung Wan.

La mala ventilación en las calles interiores provoca que el humo demore más en disiparse.

Partidarios de la línea dura pro-Pekín refuerzan su oposición a una investigación independiente

Mientras que la última encuesta efectuada por el Instituto de Investigación de la Opinión Pública de Hong Kong reveló que el 79 % [24] de los encuestados está a favor de que se realice una investigación independiente sobre la saga de la extradición, las autoridades policiales se oponen fuertemente. Cuando Matthew Cheung, secretario general de la administración, declaró que no descarta una investigación independiente y pidió disculpas el 26 de julio por el ataque en Yuen Long, la Asociación de Inspectores de Policía reaccionó con un comunicado [25] en el que pedía su renuncia.

La principal oficina de Pekín para asuntos de Hong Kong brindó también una extraña conferencia de prensa el 29 de julio para expresar su apoyo a la Policía de la ciudad [26].

Esta alianza entre Pekín y la Policía de Hong Kong ha intensificado tensiones existentes en la ciudad. El Gobierno de Hong Kong no ha tomado ninguna medida para pacificar sus relaciones con los manifestantes porque los partidarios de la línea dura pro-Pekín continúan impulsando un programa ofensivo. La Policía de Hong Kong se está preparando para desplegar camiones hidrantes [27] para dispersar a las multitudes en las próximas protestas.

El 1 de agosto, durante el 92º aniversario de la creación del Ejército Popular de Liberación (EPL) de China, Chen Daoxiang, comandante de la fuerza en Hong Kong, afirmó que [28] el Ejército no podía tolerar protestas perturbadoras contra la extradición y que estaba decidido a proteger la seguridad nacional y la soberanía.

El Ejército Popular de Liberación publicó ese mismo día un video de propaganda en el que proclama en cantonés que todas las consecuencias son responsabilidad de los manifestantes, mientras los obliga a retroceder en un procedimiento antidisturbios:

¿Una advertencia directa para los secesionistas de Hong Kong y sus aliados extranjeros? En primer lugar, el comandante de la guarnición de Hong Kong del EPL se comprometió a salvaguardar la estabilidad de Hong Kong; poco después, la guarnición dijo que está segura acerca de su capacidad para proteger a Hong Kong.

Comenzaron a propagarse rumores acerca del despliegue del EPL para reprimir las protestas antiextradición.

En un giro sin precedentes, alrededor de 20 000 funcionarios del Gobierno de Hong Kong [33]se reunieron el 2 de agosto en el distrito Central e instaron a la administración a satisfacer las demandas de los manifestantes de retirar el proyecto de ley de extradición completamente y realizar una investigación independiente.

Surge la estrategia de las manifestaciones no autorizadas

Los manifestantes se mantienen decididos y cambiaron a una estrategia que consiste en convocar movilizaciones repentinas. El 3 de agosto, la policía disparó gases lacrimógenos en gran parte de la península de Kowloon, desde Tsim Sha Tsiu hasta Wong Tai Sin, mientras los manifestantes corrían de un lado a otro [34] e interrumpían el tráfico como gatos salvajes.

Como se vio en el distrito de Wong Tai Sin, luego de que los manifestantes se dispersaran, cientos de ciudadanos se enfrentaron a la policía antidisturbios para que abandonaran el lugar:

Cómo fracasó la policía en Wong Tai Sin a través de Telegram