Radka Denemarková es considerada como un prodigio en la literatura contemporánea checa. Es la única escritora en haber obtenido el máximo galardón literario checo, el premio Magnesia Litera, en cuatro ocasiones y en diferentes categorías (ficción, prosa, traducción y libro del año). Además, mediante las traducciones y los premios
internacionales la cifra de sus lectores continúa aumentando. Quizá su novela más destacada es Peníze od Hitlera (que significa «El dinero de Hitler»), que describe la historia de una judía sobreviviente del Holocausto que regresa a Checoslovaquia después de la Segunda Guerra Mundial a quien le niegan el reconocimiento de
sus derechos más básicos.
Denemarková creció en la Checoslovaquia comunista y presenció la caída del comunismo y el muro de Berlín en su juventud. Estos acontecimientos moldearon su estilo de escritura, y también su participación pública y compromiso de defender la democracia en su región y en China. Durante la conmemoración de los 30 años de la Revolución de Terciopelo en la República Checa, Global Voices le preguntó sobre su experiencia como observadora de los cambios en Europa Central y sobre sus inquietudes y esperanzas con respecto al futuro político en esta parte del mundo. Esta entrevista fue editada por motivos de brevedad.
Filip Noubel: El muro de Berlín cayó hace 30 años y las cosas cambiaron drásticamente en Praga y Berlín. En ese entonces, vivías en la Checoslovaquia comunista y habías iniciado tus estudios en la Universidad Carolina. ¿Cómo percibiste las manifestaciones y la caída del régimen en ese momento? ¿Cuáles fueron tus mayores inquietudes y esperanzas?
Radka Denemarková : Obrovská naděje, že zažiji svobodu. Obava z brutality moci, ale obecně z lidské povahy. Pro mě jsou přelomové tři zážitky. Palachův týden v lednu 1989, kdy lidé vzpomínali na Václavském náměstí výročí upálení studentka Jana Palacha. Byla to tichá setkání, rozehnaná vodními děly. V říjnu moje východoněmecká kamarádka utíkala přes pražské západoněmecké velvyslanectví do svobodného Německa s dalšími tisíci Němci… Pád berlínské zdi byl šťastný okamžik. Třetím zážitkem bylo přespávání na Karlově univerzitě, solidarita. Bohumil Hrabal přinesl v batůžku sto tisíc korun, což byly tehdy velké peníze. Daroval je studentům. Měla jsem radost kvůli tátovi, že se svobody dožil. Založil školní knihovnu, v roce 1969 zachránil spoustu zakázaných knih, které jsme měli doma ve sklepě a půjčoval je nejbližším přátelům. Tyto knihy tehdy znamenaly vězení.
Mojí obrovskou nadějí bylo, že ze Západu přijmeme demokratické hodnoty. U nás se udělala za minulostí tlustá čára. Ale bylo obrovskou chybou neoznačit hned viníky a oběti. My jsme po roce 1989 převzali ze Západu jen konzumní podobu společnosti, nikoliv demokratické způsoby života na všech úrovních.
Radka Denemarková: Mi mayor esperanza era experimentar la libertad. Mi mayor inquietud era experimentar la brutalidad del poder y, en general, de la naturaleza humana. Recuerdo tres momentos claves. La semana de Palach en enero de 1989, cuando las personas honraron el aniversario de la inmolación de Jan Palach en la plaza principal de Weceslao, Praga. Fue una reunión silenciosa dispersada por cañones de agua. En octubre, mi amigo de Alemania Oriental huyó a la Alemania libre a través de la embajada de Alemania Occidental en Praga junto con otros miles de alemanes orientales… La caída del muro de Berlín fue un momento de regocijo. El tercero fue cuando dormimos en la Universidad Carolina y la solidaridad que experimentamos. El escritor Bohumil Hrabal trajo 100 000 coronas checas en una mochila, que era bastante dinero en aquel entonces, y lo ofreció a los estudiantes. Me sentí feliz por mi padre, por el hecho de que vivió para presenciar la libertad. En 1969 [tras la invasión soviética de 1968], él había guardado muchos libros prohibidos, que manteníamos en el sótano de nuestro hogar y prestábamos a nuestros amigos más cercanos. Conservar esos libros en aquel entonces conducía a la cárcel.
Mi mayor esperanza era que adoptáramos los valores democráticos occidentales. Pero dimos por terminado el asunto del pasado, y fue una enorme equivocación no haber etiquetado de manera inmediata a los culpables y a las víctimas. Lo que adoptamos de Occidente después de 1989 fue un modelo de consumismo y no un estilo de vida democrático.
FN: Este año se cumplen 30 años de cambios decisivos: la unificación de Alemania, la desaparición de Checoslovaquia y la región entera ahora forma parte de la Unión Europea. La democracia parece haber ganado, pero los sucesos políticos recientes parecen indicar un nuevo camino hacia la democracia no liberal. ¿Cómo ocurrió esto?
RD: Česká společnost je nemocná. A co je horší, odmítá se léčit. Zdrojem této atmosféry je neustálý pocit, že jsme jen jakýsi nárazník mezi Západem a Východem. Totalitní slovní zásoba se vrací nenápadně a je to nemírně nebezpečné. Jazyk odráží myšlení. Když mizí demokracie, tak ne ze dne na den, ale centimetr po centimetr. Musíme udržet pozice, které jsme dosáhli a bojovat za svobodu. To dnes vyžaduje hodně síly.
Země východní Evropy jsou frustrované. Oběti a viníci se slili. U nás jsou u moci lidé, kteří zbohatli v divokém kapitalismu devadesátých let, bývalí spolupracovníci Státní bezpečnosti jako premiér, představitelé komunistické moci, arogantní oligarchové. V Polsku navíc velkou roli hraje konzervativní katolická církev. Všichni představitelé moci si berou jako vzor Viktora Orbána. Toho napodobují. A on napodobuje Putina. Jsme stále mentálně satelitními státy Ruska.
Máme ve východní Evropě naštěstí i pozitivní odkaz. V duchu masarykovského a havlovského humanismu. Odkaz ideového prostředí masarykovského humanismu pro mě dnes znamená: sociální cit. Odkaz ideového prostředí havlovského humanismu pro mě dnes znamená: nalézt v sobě opět hlubší odpovědnost za svět, vystupovat proti všem skrytým i otevřeným tlakům a manipulacím, aby lidský život nebyl zredukován na stereotyp výroby a konzumu. Řečeno s Masarykem, závisí-li na něčem náš národní osud, pak především na tom, jak dostojíme svým úkolům lidským.
RD: La sociedad checa está enferma. Lo peor es que se rehúsa a recibir tratamiento. Esta mentalidad se origina de este sentimiento eterno de que solo somos una zona neutral entre Oriente y Occidente. El vocabulario del totalitarismo está regresando lentamente y de manera desapercibida, que es particularmente peligroso. El lenguaje refleja el pensamiento actual. Cuando la democracia desaparece, no ocurre gradualmente sino centímetro a centímetro. Debemos conservar las posiciones que alcanzamos y luchar por la libertad. Esto requiere de bastantes esfuerzos en la actualidad.
Los países de Europa Oriental viven en constante frustración. Las víctimas y los culpables se convirtieron en uno solo. Las personas que ostentan el poder son quienes se enriquecieron durante los años del capitalismo desenfrenado en la década de 1990, los exagentes de Seguridad del Estado checoslovaca, como nuestro actual primer ministro, personas que representaron el antiguo poder comunista, los oligarcas arrogantes. En Polonia, la Iglesia católica conservadora también juega un papel enorme. Todos los líderes políticos consideran al político húngaro Viktor Orbán como un ejemplo y lo imitan, mientras que él imita a Putin. Mentalmente, seguimos adheridos a Rusia.
Con suerte, tenemos unos buenos ejemplos en Europa Oriental, con el humanismo de Masaryk y Havel. Cuando aludo al humanismo de Masaryk me refiero a la empatía social; en lo que respecta al humanismo de Havel, significa encontrar dentro de uno mismo un mayor sentido de responsabilidad por el estado del mundo, rechazar cualquier forma de presión y manipulación visible y oculta, de modo que la vida humana no se reduzca a una perspectiva estereotipada de producción y consumo. Como dijo Masaryk, nuestro destino nacional depende en gran parte de nuestra capacidad para cumplir nuestra misión humana.
FN: Tus libros a menudo se inspiran en temas que aún se consideran tabú dentro de la sociedad checa: el destino de los judíos y los alemanes después de la Segunda Guerra Mundial, la violencia contra las mujeres, la influencia de China en los valores europeos. También defiendes públicamente los derechos de los migrantes y las minorías étnicas y sexuales. Por esto, recibes galardones pero también ataques de las personas, y el rechazo de importantes personalidades culturales. ¿En dónde encuentras el apoyo, el espacio y las personas de modo que puedas continuar expresándote públicamente?
RD:Nekompromisní svobodu slova a názoru mám už jen ve svých knihách a v západoevropských médiích. Berlusconiho syndrom, tedy koupení médií jako zdroj propagandy a „národních hodnot“, bují ve východní Evropě. I politici mé země jsou Čínou okouzleni a tvrdí, že jde o stabilizovanou a harmonickou společnost a pro nás nezbytného ekonomického partnera. Já se tam ale setkávala se vším, co si lze představit pod pojmem brutální policejní stát.
Věřím románu, ten dokáže říct pravdu. Mým tématem je odlidštění. Jsem součástí lidstva a neuznávám perspektivu „států“ a národnostních kotců a nadřazených pohlaví. Moje knihy překvapivě znamenají pro mnoho lidí očistnou katarzi. Mně jde o nápravu myšlení a podporu lidí, kteří jsou senzitivní a vzdělaní, ale nemají hlas, protože je překřičí arogantní moc. Tito lidé se musejí propojit a ukázat, že existuje paralelní způsob života.
V románech obnažuji, co tvoří dnešní mentalitu. Po roce 1945, zmizelo řádné právo pro miliony vyhnaných Němců, aby později pro další, ještě netušené statisíce rovněž mohlo zmizet. To jsou morální následky masového vysídlení, jež se dají rozpoznat: Když je možné potrestat člověka za to, že patří k určitému národu, pak je později možné, že bude potrestán za to, že patří k určité společenské třídě nebo k určité politické straně. Budoucnost nebude hrdá na ten okamžik, kdy byl na světě zaveden pojem kolektivní viny.
RD: Los únicos lugares donde puedo encontrar la libertad absoluta para hablar y expresar mis opiniones son en mis libros y en los medios de Europa Occidental. El síndrome Berlusconi, que permite la captura de los medios como fuente de propaganda y los «valores nacionales», está prosperando en Europa Oriental. Pekín ha cautivado a los políticos checos, que afirman que China representa una sociedad estable y armónica, y que para nosotros es un socio económico indispensable. Pero según mi experiencia con China, representa lo que consideramos como un Estado policial brutal.
Creo en la novela, puede decir la verdad. Mi tema principal es la deshumanización. Pertenecemos a la raza humana y no acepto las creencias de los «estados», de las restricciones étnicas y del género superior. Sorprendentemente, mis libros sirven de catarsis para muchas personas. A mí lo que me interesa es corregir la mentalidad y apoyar a las personas, que son sensibles, preparadas pero que carecen de una voz debido a la arrogancia del poderoso que grita más fuerte. Estas personas deben unirse y demostrar que una forma de vida paralela es posible.
En mis novelas revelo cómo se genera la mentalidad de la actualidad. Después de 1945, la ley desapareció para millones de alemanes expulsados, así que lo mismo podría sucederle después a cientos de miles de otras personas. Estas son las consecuencias morales de la expulsión masiva que se pueden identificar: si es posible castigar a una persona porque pertenece a una nación, entonces es posible que más adelante se castigue a cualquiera por pertenecer a una clase social específica o partido político. El futuro no verá con optimismo el momento en que el mundo introdujo la idea de la responsabilidad colectiva.
FN: Experimentaste el comunismo, por lo tanto, tienes una idea muy concreta de lo que significa vivir sin libertad. ¿Qué piensan las generaciones de checos más jóvenes al respecto? ¿Es este también un tema que abordan los autores checos más jóvenes?
RD: Pro spisovatele ne, tomu nerozumím. Dokonce ani pro ty starší. Většina lidí se chová, jako by rok 1989 nebyl. Havel je vzorem ve světě, jeho Charta 77 probudila vznik Charty 08 v Číně, doma je vysmívaný. Charta 77 byla prvním významným aktem solidarity v komunistické éře. Představovala počátek občanského napřímení. „Partajní mládenci“ v Čechách se dnes pokoušejí o kapitalismus „se socialistickou tváří“: vítězství vyvolených, bez konkurence a mimo volnou soutěž.
Nadějí je pro mě mladá generace. V rámci východní Evropy máme studenta Mikuláše Mináře, který organizuje Milion chvilek pro demokracii a na Slovensku prezidentku Zuzanu Čaputovou, která přichází s novým politickým myšlením a chováním. Smutné je, že nejprve musel zemřít novinář a jeho snoubenka, aby se lidé na Slovensku vzpamatovali a zamysleli.
RD: No para los escritores y no entiendo por qué. Ni siquiera para la generación mayor. La mayoría se comporta como si 1989 [el año de la caída del comunismo] nunca sucedió. Havel es una referencia mundial, su Carta 77 condujo a la creación de la Carta 08 de China, pero en casa las personas se burlan de él. La Carta 77 fue el primer acto de solidaridad significativo en la era comunista, representó el primer despertar de una conciencia civil. En la actualidad, los «camaradas jóvenes del partido» intentan desarrollar un «capitalismo con un rostro socialista«: consiste en la victoria de los elegidos, que actúan fuera de las reglas de la competencia y licitaciones públicas.
Para mí, las generaciones más jóvenes representan esperanza. En Europa Oriental, tenemos a Mikuláš Minář, el estudiante que creó el movimiento Un Millón de Momentos para la Democracia, y en Eslovaquia tenemos a la nueva presidenta Zuzana Čaputová, que viene con una agenda política y comportamiento nuevos. Es lamentable que un periodista joven y su prometida tuvieran que morir para que las personas en Eslovaquia pudiesen despertar, y comenzar a pensar seriamente acerca de su futuro.
FN: ¿Cuál es tu mayor miedo con respecto al futuro de la democracia en la República Checa y en Europa Central?
RD: Stojíme nyní před zásadní otázkou: otevřená demokracie nebo uzavřená společnost, svoboda projevu nebo cenzura, právní stát nebo nová forma autoritářského režimu. Společnost je záhadné zvíře, se spoustou skrytých tváří a schopností. Moc dobře vím, že hlavní starostí, kterou mají všichni lidé na světě společnou, je tato: Co si počít se svým životem. Byla jsem v Číně, kde se „políbilo“ to nejhorší z kapitalismu a to nejhorší z komunismu a ekonomicky vše skvěle funguje, což všichni skrytě obdivují: ovšem bez lidských práv. V tom vidím nebezpečí pro východní Evropu.
Vím, že politika společného lidství stojí před nejosudovějším z osudových kroků lidstva. A tady se ukazuje, že právě na takovém humanismu, o který usiluje každý v rámci prostředí, v němž žije, záleží budoucnost lidstva. Lidstvo se musí vzpamatovat, uvědomit si, že solidarita i vzhledem ke klimatickým změnám je nezbytná. Nejtěžší bude boj proti nacionalismu, malosti, omezenosti. Ale jsem optimista. Je to moje provokativní naděje, ale naděje.
RD: En este momento estamos contemplando una pregunta fundamental: ¿Queremos una democracia abierta o una sociedad cerrada, libertad de expresión o censura, estado de derecho o una nueva forma de autoritarismo? La sociedad es un animal extraño, con muchos rostros y habilidades ocultas. Sé muy bien que la inquietud principal que compartimos todos en este planeta es esta: ¿qué hacer con esta vida humana? Visité China donde lo peor del capitalismo se fusionó con lo peor del comunismo, y desde un punto de vista económico funciona perfectamente, y todos lo admiran secretamente, aunque no exista ningún derecho humano. Es aquí donde percibo el peligro para Europa Oriental.
Sé que el proceso político de una humanidad compartida se encuentra ahora en uno de sus momentos más cruciales. Es evidente que el futuro de los humanos depende de este tipo de humanismo que cada uno de nosotros intenta fuertemente alcanzar dentro de los límites de nuestro entorno. Los humanos deben entrar en razón y darse cuenta de que la solidaridad, que abarca también el contexto del cambio climático es absolutamente necesaria. Lo más difícil será combatir el nacionalismo, una perspectiva inflexible del mundo, y cualquier restricción, pero soy optimista. Esta es mi esperanza provocadora, aun así es esperanza.