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Global Voices celebra sus 15 años, presentamos 15 artículos sobre la «llegada a la madurez» del Caribe

Categorías: Caribe, Haití, Trinidad y Tobago, Venezuela, Derechos humanos, Desastres, Economía y negocios, Gobernabilidad, Medios ciudadanos, Política, Protesta, Refugiados, Respuesta humanitaria

Los 15 años de Global Voices.

Diciembre es el alegre mes en el que se creó Global Voices [1] en 2004. Han pasado 15 años rápidamente, pero eso también nos brindó la oportunidad de publicar [2] casi 100 000 artículos que exhortan el discurso y traducir la gran mayoría a otros idiomas [3].

En honor a este hito, tenemos una retrospectiva de cinco partes, y en cada una destacaremos tres de nuestras historias má inspiradoras del equipo del Caribe en 2019 que —a un nivel u otro— representaron una «madurez».

Una victoria legal (y moral) para los granjeros haitianos

Siete miembros del Kolektif Peyizan Viktim Tè Chabè y su asesor celebran tras firmas un acuerdo con el IDB. Foto cortesía de Accountability Counsel, usada con autorización.

El devastador terremoto de 2010 [4] en Haití todavía resuena en la región. Cada vez que se produce un nuevo desastre [5], hay ecos del monstruo de 7,0 Mw que arrasó con partes de Puerto Príncipe, mató [6] a cientos de miles de personas y dejó a los que sobrevivieron en posiciones cada vez más vulnerables.

Por lo tanto, fue con gran alegría que nos enteramos de que el colectivo de agricultores haitianos Kolektif Peyizan Viktim Tè Chabè firmó un acuerdo histórico [7] en 2019 que ofrece reparación a casi 4000 personas desplazadas para dar cabida a la construcción del Parque Industrial Caracol [8], con financimiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y USAID. El Gobierno haitiano consideró el proyecto como parte de los esfuerzos de reconstrucción tras del terremoto, pero en realidad afectó sus derechos a la tierra y su medio de vida.

La tenacidad, paciencia y capacidad del grupo para trabajar juntos por el bien común de su comunidad mostró gran valor y la voluntad de defenderse. Su caso fue la primera vez en Haití que las víctimas de una apropiación de tierras pudieron hacer oír su voz en un proceso formal de resolución de disputas, y su éxito sirve como un fuerte precedente en caso de que cualquier gobierno se vea tentado a tomar decisiones similares en el futuro.

Crisis de refugiados de Venezuela y Trinidad

[9]

Protesta venezolana, enero de 2019. Foto de Valentin Guerrero (CC BY 2.0).

Cuando el estancamiento político [10] de Venezuela degeneró rápidamente en una crisis humanitaria [11], los ciudadanos venezolanos comenzaron a huir del país, y muchos desplazados eligieron la cercana Trinidad y Tobago [12] como su lugar de refugio.

Aunque Trinidad y Tabago cuenta con una política nacional en materia de refugiados y asilo desde 2014, no se está aplicando, lo que ha tenido un efecto adverso en la protección adecuada de los refugiados y solicitantes de asilo, que a menudo terminan considerados migrantes indocumentados. Esto crea un efecto dominó de explotación económica de los refugiados o, como lo expresa un informe de Refugees International (RI) de enero de 2019, «forzados a la ilegalidad».

Sin embargo, para junio de 2019, el Gobierno de Trinidad y Tobago había llevado a cabo un proceso de registro [13], a través del cual decenas de miles de solicitantes de asilo pudieron ser reconocidos legalmente [14], con lo que se minimizó la probabilidad de que se aprovecharan de ellos –decisión que resuena por estar del lado correcto de la historia, sin importar el resultado político en Venezuela.

Protestas recurrentes en Haití

[15]

Bandera haitiana. Foto de Amy Nelson (CC BY 2.0).

El 7 de febrero de 2019, las violentas protestas callejeras [16] de Haití, que habían comenzado como respuesta al aumento de los precios de los alimentos, se detuvieron temporalmente. Sin embargo, el malestar social estaba destinado a continuar, pues gran parte de la crisis socioeconómica del país la alimentaba la corrupción sistémica.

Gran parte de esa corrupción está entrelazada con PetroCaribe –programa de energía regional dirigido por Venezuela y diseñado para ofrecer petróleo y sus productos derivados a precios preferenciales, pero la mala gestión flagrante se traduce en una pérdida del valor de la moneda, un aumento de la inflación y un escándalo de corrupción por valor de 3000 millones de dólares en el que están implicados altos funcionarios del Gobierno, incluido el presidente haitiano Jovenel Moïse.

Como parte de los esfuerzos del Gobierno para desalentar más disturbios, el entonces primer ministro Jean-Henry Céant prometió frenar el aumento vertiginoso de los precios de los productos alimenticios básicos, reducir el gasto público, aumentar el salario mínimo y luchar contra la corrupción apoyando el proceso judicial de PetroCaribe, pero en el contexto de décadas de inestabilidad política [17], el pueblo estaba llegando a un punto de ruptura. Hubo llamamientos generalizados para la renuncia de Moïse.

En marzo de 2019, el Parlamento de Haití emitió [18] un voto de censura contra Céant y Estados Unidos parecía estar desempeñando un papel en la ayuda al país para abordar la crisis [19]. Para el 9 de abril, Moïse nombró [20] a Michel Lapin como nuevo primer ministro de Haití, cuando la violencia de las pandillas asolaba los lugares más complicados de la capital y sus alrededores.

Pero PertroCaribe simplemente no desaparecería. El 31 de mayo, el Tribunal Superior de Cuentas de Haití publicó [21] un informe de más de 600 páginas sobre el mal manejo de los fondos de PetroCaribe. Mientras tanto, la ratificación de Lapin como primer ministro se estancó en el Senado; para julio, Moïse estaba buscando [22] otro primer ministro. En noviembre, el país se mantuvo paralizado [23] en medio de una crisis socioeconómica cada vez más grave, con escuelas, hospitales, mercados y bancos básicamente cerrados, ya que el Gobierno dependía cada vez más de la fuerza para reprimir las protestas [24].

Tal como están las cosas a finales de 2019, parece que Moïse está tan decidido a mantener la presidencia como los ciudadanos haitianos están decididos a sacarlo. Anticipamos que seguirá siendo una situación a observar en el nuevo año.