Las cuevas de Dunbar en el sur de Etiopía fueron talladas por Mohammed Yiso Banatah con sus manos. Alá le dio instrucciones para crear capillas de bodas subterráneas. Foto de Amanda Leigh Lichtenstein, usada con autorización.
El 26 de diciembre de 2019, BBC en suajili emitió un video que presentaba a Francisco Ouma, anciano de Busia, al oeste de Kenia, que recibió un mensaje de Dios para tallar una cueva. El mensaje llegó en forma de un mapa que recibió en sus sueños. Desde febrero de 1967, Ouma ha seguido el mapa divino que recibió en sueños. Ahora, esta cueva tiene 24 salas y siguen aumentando.
Captura de pantalla de Francis Ouma, que recibió un mensaje de Dios de tallar una cueva con 24 salas a través de BBC suajili / Instagram [1].
A lo largo de la historia, muchos han cuestionado la veracidad de la intervención divina a través de sueños, y hasta expresan dudas sobre la salud mental y la estabilidad de las personas. health and stability. Pero profetas del islam, judaísmo y cristianismo han dado fe de mensajes de Dios [2] a través de sueños desde hace milenos.
«Dios me trajo algo como un mapa», dijo Ouma a BBC suajili. «Luego, cuando estaba cavando, este mapa fue lo que seguí. No fue solamente eso cuando estaba cavando, [no fue que haya dicho] mejor seguir cavando, no».
Con apenas un arado y sus manos, Ouma se enfrascó en prueba y error mientras le caían piedras que le impedían cavar,. Finalmente, encontró el lugar correcto para manifestar el mapa de la cueva de Dios en su mente.
En una habitación, hay una piedra que tiene escritas palabras de Jesús. «Jesucristo fue quien me trajo esa nueva», dijo Ouma, «y luego me explicó, tal como pasó con Moisés». Ouma cree que está trayendo de vuelta otro convenio de Dios con el mundo.
«Se viene la segunda etapa. Esta es la primera etapa del convenio. Se viene la segunda. No puedo decir con certeza qué ocurre ahora porque si lo anunciara, estaría engañando a la humanidad. Por tanto, esperaré para que se dé el informe», dijo Ouma a BBC suajili.
La historia de un anciano que cavó una cueva por orden de Dios.
Es una cueva con 24 habitaciones.
El video de BBC en suajili tuvo casi 50 000 reproducciones con más de cien comentarios, y siguen llegando. Aunque algunos han preguntado sobre la estabilidad mental de quienes sostienen recibir estos mensajes de Dios a través de sueños, incluido un catedrático a quien citan en el video, muchos comentarios apoyan a personas de fe que reciben mensajes en sueños.
Un usuario de Instagram escribió [1]:
Mimi watu kama hawa huwa nawaamini sana kuliko wanaotujaza Kwenye nyumba za Ibaada na Michango isiyoisha kwa Maneno ya Matumaini, Miaka 52 mtu anachimba tu kama angekuwa hana Akili ndugu zake na Serikali hawakumuona? Hajaomba hata msaada wa greda au pesa ya kuweka vibarua hupaswi kuihukukumu Nafsi yake.
Les creo mucho a personas así, mucho más que a quienes nos llenan casas de culto o hacen continuas contribuciones de palabras de esperanza, durante 52 años una persona solamente cava — si no pensara así, ¿su comunidad o su Gobierno no debería reconocerlo? Ni siquiera ha pedido ayuda burocrática ni dinero por su trabajo. No debemos juzgar a esta persona.
En 2012, Mohammed Yiso Banatah explicó los diez sueños a través de los cuales Alá le ordenó cavar capillas de boda subterráneas. Foto cortesía de Amanda Leigh Lichtenstein.
Capillas de bodas subterráneas de Etiopía
En el sur de Etiopía, hay un testimonio similar de un anciano llamado Mohammed Yiso Banatah, que dijo en 2012 que Alá lo visitó hace 33 años en una serie de diez sueños. A través de los sueños, recibió instrucciones explícitas de Alá de crear capillas de boda en cuevas subterráneas.
A estas elaboradas capillas se les conoce como cuevas de Dunbar, y existen en la propiedad de Banatah, en la carretera a medio camino entre Hawassa y Shashamene.
Banatah dijo que fue en su tercer sueño que apareció en su conciencia el mapa [5] para estas capillas en cuevas.
Se puede leer todo mi relato [5] de la secuencia de sueños de Banatah y lo que lo motivó a empezar a cavar lo que sería el trabajo de su vida:
In his final dream, the tenth one in a series back in 1979, a man appeared in his dream who took Mohammed to a small tree on his property and pointed to its roots. The man showed him exactly where to start digging and told him that his life would depend on it. At midnight, he saw visions of gold. Surroundings up close appeared far away and objects farthest away were pulled up close to him. He was told where, when, and how to begin digging and the next day, when he woke up, he began to dig into the earth with his bare hands.
En su sueño final, el décimo de una serie que tuvo en 1979, apareció un hombre en su sueño que lo llevó a un arbolito de su propiedad y señalaba sus raíces. El hombre le mostró exactamente dónde empezar a cavar y le dijo que su vida dependería de eso. A la medianoche, tuvo visiones de oro. Los alrededores se veían lejanas y los objetos lejanos aparecieron a cerca de él. Le dijo dónde, cuándo y cómo empezar a cavar y al día siguientem cuando despertó, empezó a cavar la tierra con sus manos.
Estas cuevas llenas de luz del sol han sido una atracción turística donde las personas se detienen, pagan una suma módica y recorren la quietud al menos cuatro metros bajo tierra. Algunas parejas hasta han organizado ceremonias nupciales ahí.
The architectural genius of these spaces reveals the finery and steadiness of Mohammed’s hand – he’s spent careful hours carving, smoothing, cutting, digging, and designing an intricate series of archways, cosy nooks and hidden rooms within rooms, some that have been furnished with soft mattresses and simple earth-slab shelves, while others are stark and cool with tiny, rounded windows flooding through with secret rays of sunlight appearing out of nowhere.
El genio arquitectónico de estos espacios revela la finura y estabilidad de la mano de Mohammed –-ha pasado cuidadosas horas cavando, alisando, cortando y diseñando una intricada serie de arcos, acogedores rincones y habitaciones ocultas dentro de habitaciones, algunas provistas de suaves colchones y simples repisas de bloques de tierra, mientras son austeras y frías con ventanitas a través de las cuales entran secretos rayos de luz solar que aparecen de la nada.
Las cuevas han tenido un profundo significado espiritual y metafórico a través de la historia.
Todo un capítulo llamado «Al Kahf» [6] o «La cueva» aparece en el Corán. Destaca un cuento cristiano conocido como «Personas de las Cuevas [7]» en el que jóvenes torturados por sus creencias huyeron de la ciudad y encontraron refugio en una cueva y quedaron dormidos.
Cuando despertaron y regresaron, se dieron cuenta de que todos en la ciudad se habían vuelto creyentes.