En el Caribe cuentan con varios niveles de toques de queda [1] y restricciones como consecuencia del COVID-19. Mientras algunos países comienzan a ser más flexibles [2] sobre los niveles de aislamientos y reuniones, muchos ciudadanos aún siguen en sus casas por el momento, pero han ido registrando y difundiendo de varias maneras sus opiniones y fotografías en un aislamiento relativo.
Por ejemplo, Dennis Jones, economista retirado y bloguero, alcanzó el capítulo 27 [3] de sus “Crónicas del COVID”, desde su casa en las laderas en Kingston, Jamaica. Como muchos otros en línea, también ha fotografiado qué hay en su patio y alrededores, durante la “vida bajo el COVID”, como él mismo lo ha mencionado.
Jones publicó una fotografía de su sala de estar y también fotografió al camión de helados cuando estaba llegando a su vecindario. Los pedidos a domicilio de comestibles, verduras y helados han aumentado durante el COVID-19.
Susan Goffe, bloguera, comentarista y defensora de los derechos humanos, también ha estado prestando atención a la advertencia tan ah yuh yaad [4] (dicho jamaiquino) “quédense en casa”, mientras que con prudencia documenta [5] las órdenes del Gobierno jamaiquino sobre el COVID-19.
Al amanecer y al atardecer, Goffe «más bien mira hacia afuera, en vez de salir», dice desde su casa en Kingston.
Kate Chappell, periodista independiente de Kingston, publicó fotografías de paseos familiares anteriores mientras desea [6] volver a encontrarse algún día con sus amigos.
Hasta colaboradores de Global Voices participaron, como la editora regional del Caribe, Janine Mendes-Franco, que se tomó algunos momentos para disfrutar de su bellísimo jardín tropical.
Emma Lewis, otra colaboradora de Global Voices, ha publicado actualizaciones del COVID-19 en su blog y sus opiniones [7] y fotografías durante la pandemia.
Mientras la región toma medidas tentativas para emerger de la neblina [8] del COVID-19, las naciones del Caribe buscan “salvar sus trabajos mientras salvan sus vidas.” [9]
Todavía está por verse si los comportamientos armoniosos serán un éxito, aunque el COVID-19 siga merodeando en la sociedad.
Mientras tanto, usuarios de redes sociales eligen ver a través de sus cámaras el lado positivo de quedarse en casa.