En Hong Kong se cumple un año desde que estallaron las protestas contra la ley de extradicción de China. Stand News, medio de noticias en línea de Hong Kong, publicó una serie de artículos para reflexionar sobre el movimiento opositor. En este artículo, Stand News entrevistó a ciudadanos de China continental que enfrentaron amenazas y a presiones por apoyar a las protestas de Hong Kong. El informe original en chino se publicó el 16 de junio 2020. La siguiente versión editada en inglés fue traducida por Winnie Ko y se publica en Global Voices bajo un acuerdo de asociación de contenido.
Huaming (seudónimo) es ciudadano de China continental que llegó a Hong Kong como estudiante en 2014, justo cuando estallaron las protestas masivas a favor de la democracia, mejor conocidas como la Revolución de los Paraguas.
Desde entonces, el entorno político de la ciudad ha sufrido cambios radicales. A Huaming, sus estudios en Hong Kong le brindaron la oportunidad de experimentar un movimiento social único. Con regularidad, publicó observaciones sobre la vida cotidiana y política en Hong Kong a través de su cuenta de Weibo.
En la mañana del 17 de noviembre de 2019, cuando la Policía de Hong Kong decidió cerrar el campus de la Universidad Politécnica de Hong Kong, Huaming se levantó y notó que su cuenta de Weibo estaba repleta de comentarios. Una persona lo regañó por estar «a favor de la independencia de Hong Kong» y ser «una joven escoria», otro le amenazó: «Amigo, ¿cuándo regresarás a China? Te recogeré en el aeropuerto».
Doxing
Desde julio de 2019, muchos ciudadanos de China continental, que expresaron apoyo o simpatía por el movimiento contra la ley de extradicción de China de Hong Kong, vieron cómo sus datos personales se divulgabam públicamente, y terminaron denunciados en escuelas, unidades de empleo, ramas del partido y hasta con las autoridades.
El proceso ha hecho que sus nombres, fotos familiares y números de teléfono sean divulgados públicamente. El ciberacoso puede convertirse en un acoso en la vida real. En algunos casos, fueron citados por la Seguridad Pública de China a su regresa China, y las autoridades también interrogaron a sus familiares. Los comentarios maliciosos en sus redes sociales llevaron a Huaming a la conclusión de que lo habían denunciado.
I did a search on my user account on Weibo and found a user with hundreds of thousands of followers had screenshotted one of my posts and exposed me as a mainlander studying in Hong Kong. (The user's post noted) that I support the demands of young people while making no contribution to (Chinese society).
Hice una búsqueda en mi cuenta de usuario en Weibo y encontré un usuario con cientos de miles de seguidores que había hecho unas captura de pantalla de una de mis publicaciones y me presentaba como ciudadano de China continental que estudiaba en Hong Kong. (La publicación del usuario señaló) que apoyaba las peticiones de los jóvenes sin hacer ninguna contribución (a la sociedad china).
Inmediatamente, Huaming desactivó su cuenta y el acoso en línea desapareció al cabo de unos pocos días; cambió también su nombre público de su cuenta WeChat, eliminó casi todos los artículos que había escrito y ordenó su lista de contactos:
I blocked about 300 to 400 accounts with suspicious names, those with the Chinese flag as profile pictures and people with a warrior-like tone.
Bloqueé a unas 300-400 cuentas con nombres sospechosos, aquellas con una bandera china como imagen de perfil y a las personas con un tono guerrero.
Luego, cambió su nombre en Facebook, editó las configuraciones de seguridad y eliminó todos los textos y fotos relacionados con las protestas de Hong Kong.
Asfixia
Durante el último año, abundaron historias sobre ciudadanos de China continental que apoyan el movimiento contra China de Hong Kong cuyos datos personales han sido expuestos por colegas, amigos e incluso parientes en las redes sociales.
Muy a menudo, se hacían capturas de pantallas de conversaciones privadas en chats como pruebas de su «traición política» a la «madre patria».
Bajo la etiqueta oficial de Weibo «operación de la madre patria contra los negros» (祖國反黑), fueron muchos los documentos personales filtrados y numerosas «listas de cucarachas» (la Policía de Hong Kong llamó «cucarachas» a los manifestantes). Esas publicaciones suelen compartirse decenas de miles de veces.
El canal más popular de esos documentos en Weibo son «Dawn Cicadas»(孤煙暮蟬), con seis millones de seguidores, y «Las águilas de Dios»(上帝之鷹), con 2.2 millones de seguidores. Huaning dijo:
Once they set you as target, their followers dig up all your personal information.
Una vez que te ponen en la mira, sus seguidores desentierran toda tu información personal.
Yunqi Wang, seudónimo de una ciudadana de China continental, la describe como una existencia «asfixiante». Wang llegó a Hong Kong en 2015, se graduó en la universidad y se inscribió a un doctorado en derecho justo cuando comenzó el movimiento contra la extradicción.
La mayoría de sus compañeros vienen de la clase elitista del continente y consideraron normal que Pekín proyectara un poder supremo sobre Hong Kong a pesar del principio de «Un país, dos sistemas».
Aunque no está de acuerdo con esos puntos de vista, no pudo expresar su opinión en clase:
Because it is safer not to speak up. You pay a high price for expressing your views. What if they took a picture and reported you?
Porque es más seguro no denunciar. Se paga un precio muy elevado por expresar tu opinión. ¿Y si te toman una foto y te denuncian?
Cada vez siente más que hay un muro entre ella y sus amigos y familia.
There is a big information gap between us. Many people learned about the events in HK because the journalist from (Chinese state-owned) Global Times was beaten up. They would ask, how can you turn a blind eye to such violence? A good friend from secondary school scolded me, I deleted friends one by one — it hurt.
Hay un gran vacío de información entre nosotros. Muchos se enteran de los acontecimientos en Hong Kong porque dieron una paliza a los periodistas del Global Times (propiedad estatal). Preguntaban, ¿cómo puedes hacer la vista gorda ante esa violencia? Un buen amigo de la escuela secundaria me regañó, borré a mis amigos uno por uno… me dolió.
En noviembre, vencida por el estrés emocional, decidió suspender sus estudios.
My mental status has been affected by the movement and I haven't been well. I attended the remembrance event of the university student Tsz-lok Chow after he passed away. The siege of the Chinese University of Hong Kong came on top of everything else and my emotions reached a tipping point. I felt that I couldn’t hold on anymore.
Mi estado mental se ha visto afectado por el movimiento y no me he sentido bien. Asistí al acto de recuerdo del estudiante universitario Tsz-lok Chow después de su muerte. Y además con el asedio a la Universidad China de Hong Kong, mis emociones llegaron a un punto crítico. Sentí que no podía aguantar más.
Muchos de los implicados en el movimiento de protestas experimentaron problemas de salud mental. Para sus aliados en China continental, ese sentir se ha visto amplificado por episodios de discriminación.
Algunas de las tiendas a favor de la protesta especificaron que no servirían a clientes del China continental después del brote de COVID-19:
I don’t know what the definition of a Hongkonger is. If they refer to someone residing in Hong Kong and speaking Cantonese, that is me! Glory Café [a famous pro-protest restaurant] made it clear that it doesn’t serve customers from the mainland or those who speak Mandarin. This made me think — I treat Hongkongers as comrades, but do they treat me as one of them? I wasn’t actually accepted…I am not patriotic in China, I hate the nation and the party, but in the eyes of Hongkongers I am a Chinese. My identity is vague, whether as a Chinese or as a Hongkonger.
No sé cual sea la definición de un hongkonés. Si se refieren a alguien que vive en Hong Kong y habla cantonés, ¡ese soy yo! Glory Cafe [famoso restaurante a favor de la protesta] dijo claramente que no serviría a clientes de China continental o a quienes hablan mandarín. Esto me hizo pensar: trato a los hongkoneses como compañeros pero ¿me tratan ellos como uno más? En realidad no me aceptaron.. No soy patriota en China, odio la nación y el partido pero, a los ojos de los hongkoneses, soy chino. Mi identidad es imprecisa, ya sea como chino o como hongkonés.
El proyecto «Tree Hole»
Los conflictos entre China continental y Hong Kong no son nada nuevos. Ligi Zhou (seudónimo) se mudó a Hong Kong con su familias mientras estaba en la escuela secundaria y experimentó los altibajos de la relación entre China continental y Hong Kong en las últimas dos décadas.
Zhou dijo que esas relaciones empeoraron gradualmente y lo atribuyó a los diversos grados de represión impuestos por Pekín a Hong Kong desde que Hong Kong pasó a China.
Lamentablemente, dijo que, a menudo, el rencor que debería ser dirigido al régimen recae en ñas personas.
Durante noviembre de 2019, Zhou empezó a recolectar artículos anónimos de la página de Facebook «Estudiantes de China continental que apoyan a las protestas de Hong Kong» que ha llegado a ser conocido como el proyecto «Tree Hole» (NdT: literalmente el «agujero del árbol» en referencia a la vieja creencia anglosajona de ir al bosque para encontrar un árbol con un agujero al que contarle tus secretos):
We know that there is more than one voice in China, we care about the minority who are between the gaps, speaking Mandarin and from the mainland, yet feel connected with Hong Kong, and therefore feeling its pain. We know you face pressure from the friends and relatives, omnipresent propaganda, persecution, doxxing, punishment and the spread of antagonism inside Hong Kong. Life is tough. We know you find it difficult to join the front lines and peaceful protests — even saying something publicly comes with immense pressure. This Tree hole is to let everyone know, no one is an island nor an outsider.
Sabemos que hay más de una voz en China, nos preocupamos por la minoría que se encuentra en el medio: hablan mandarín y son de China continental, pero han conectado con Hong Kong y sienten su dolor. Sabemos que enfrentan la presión de amigos y familiares, la propaganda presente en todas partes, la persecución, la violación de los datos personales, los castigos y la propagación del antagonismo dentro de Hong Kong. La vida es difícil. Sabemos que te resulta difícil unirte a las líneas del frente y a las protestas pacíficas, hasta decir algo públicamente viene con una inmensa presión. Este «agujero en el árbol» es para que todos sepan que nadie es una isla ni un extraño.