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Policía angoleña mata a muchacho de 23 años por incumplir normas de confinamiento, informan medios locales

Categorías: Angola, Guerra y conflicto, Medios ciudadanos, Protesta, COVID-19
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Joven murió a manos de un policía angoleño. Captura de pantalla [2] de un video publicado por Televisão Pública de Angola.

El 12 de julio, agentes de la Policía Nacional de Angola mataron a tiros a José Teokamba Manuel, de 23 años, al aplicar medidas de confinamiento pro la pandemia del COVID-19, según [3] los medios locales.

A Maurício José, de 17 años, que se encontraba con Manuel en ese momento, le dispararon en el hombro y los propios policías lo llevaron al hospital. Ya lo dieron de alta.

El incidente tuvo lugar en el distrito de Maianga, en Luanda, capital del país. Según informa el periódico O País, un comunicado de la Policía Nacional reveló que los agentes estaban patrullando cuando se cruzaron con un grupo de jóvenes en un momento y lugar desautorizados.

El portavoz de la Policía Nacional, Nestor Goubel, reconoció que los disparos provenían de los agentes, según el Observador [4], y añadió que los agentes responsables fueron detenidos y que serán castigados.

Por el funeral de Manuel hubo protestas de los habitantes locales. Hubo barricadas en la vía principal, y llamaron [5] a la Policía para dispersarlas.

El activista y académico Miguel de Barros, de Guinea-Bisáu, publicó un vídeo de la protesta que tuvo lugar en Luanda tras la muerte de José Teokamba Manuel:

Entre el abuso de poder y la violencia innecesaria del Estado, reina una fuerte cultura de impunidad y falta de respeto por la vida con encubrimiento de las autoridades. Cuando se mata a un joven que no representa ningún peligro solo porque no lleva mascarilla protectora es un crimen, y revela toda la violencia sufrida. ¡Indignante!

Angola ha presenciado [8] casos de violencia policial en Luanda capital desde que se declaró un estado de emergencia por la pandemia.

En mayo, António Domingos Vilola, de 21 años, murió de un tiro en la cabeza después de que la Policía se acercara a un grupo de gente que iba por la calle sin mascarillas, como informó [9] Voice of America (VoA). Según los parientes de la víctima, un agente de la Policía Nacional disparó a Vilola después de decir que no llevaba mascarilla. En una declaración, la Policía Nacional acusó a los jóvenes de resistirse y de «moverse para atacar a las fuerzas de ley y orden».

En abril se publicó en línea un video [10] en el que se ve a agentes de policía agrediendo violentamente a personas después de que estas supuestamente incumplieran las medidas de confinamiento.

El periodista y escritor Victor Hugo Mendes publicó [11] en Facebook un texto de Dilson Barros condenando el incidente de José Teokamba Manuel:

Mais uma pessoa morre vítima de violência policial. Fez ontem uma semana que o jovem José Kilamba Rangel, de 23 anos, foi morto no bairro do Prenda supostamente por não estar a usar máscara.

Não é o primeiro, o segundo, nem o terceiro. Já foram vários. A violência policial contra pessoas indefesas está a aumentar aos nossos olhos. Desde a morte da zungueira Juliana Cafrique, já morreram vários inocentes.

As questões que colocamos são as seguintes: 1. Até quando vamos assistir essas mortes? 2. O que estará o Estado a fazer para que não se voltem a registar este tipo de mortes? Não basta deter e julgar os agentes, é preciso traçar um plano com medidas concretas para diminuir a probabilidade deste tipo de actos ocorrer, desde a formação dos agentes ao seu armamento e controle.

Lembro que a polícia deve proteger os cidadãos e ser sinónimo de segurança e não uma causa de mortes de indefesos que, completamente desarmados, não representam ameaça para homens fardados e armados…

Admira-me o silêncio das autoridades no meio de tantas mortes, numa altura em que a violência policial é causa de uma onda de manifestações pelo mundo afora na sequência da morte de George Floyd por um polícia.

Otra persona que muere por violencia policial. Fue hace una semana cuando al joven José Kilamba Rangel, de 23 años, lo mataron en el vecindario de Prenda porque presuntamente no llevaba mascarilla.

No es el primero, ni el segundo, ni siquiera el tercero. Ha habido muchos. La violencia policial contra la gente indefensa está creciendo ante nuestros ojos. Desde la muerte de la vendedora ambulante Juliana Cafrique, han muerto varias personas inocentes.

Las preguntas que nos hacemos son: 1. ¿Hasta cuándo presenciaremos estas muertes? 2. ¿Qué hará el Estado para evitar que vuelvan a ocurrir este tipo de muertes? Detener y juzgar a los agentes no es suficiente, es necesario realizar un plan con medidas concretas para reducir la probabilidad de que ocurran estos incidentes, desde el entrenamiento de los agentes hasta sus armas y controles.

Les recuerdo que la Policía está para proteger a los ciudadanos y ser sinónimo de seguridad, y no para causar muerte de gente indefensa y completamente desarmada que no implica ninguna amenaza para hombres uniformados armados…

Me sorprende el silencio de las autoridades frente a tantas muertes, en un momento en el que la violencia policial es la causa de una ola de manifestaciones en todo el mundo por la muerte de George Floyd a manos de un policía.

El periodista Felix Abias escribió [12] que lo único que le quedada por hacer era poner una foto de los fallecidos en su perfil:

Só me resta colar a foto no meu perfil

Somam e seguem as mortes por conta de agentes da Polícia que parecem não saberem mais nada senão mexer o gatilho, a matar gente pobre, do subúrbio, lá onde o vento faz a curva, além da GASOSA, e no final do mês recebem os seus salários.

Sem nada acontecer de substancial como consequência desses actos perfeitamente evitáveis, como a exoneração de responsáveis de lugares-chave no Ministério do Interior, a exoneração do próprio ministro, por exemplo, é caso para dizer que os POBRES continuam sem porta-voz lá EM CIMA.

É simples. Se no meio tanta gente a morrer estivesse um filho de GENTE GRANDE, que o diabo seja surdo, alguns dirigentes já nem se lembrariam do último cargo. É esta dura realidade que custa admitir.

Todo lo que me queda por hacer es pegar la foto en mi perfil.

El número de muertes por parte de agentes de policía está en continuo aumento, parecen no saber otra cosa que apretar el gatillo y matar a gente pobre de las zonas residenciales, allí donde vira el viento, más allá de GASOSA, y al final del mes reciben sus salarios.

El hecho de que no ocurra nada sustancial como consecuencia de estos actos perfectamente evitables, como el despido de figuras clave en el Ministerio de Interior o del propio ministro, por ejemplo, demuestra que los POBRES siguen sin un portavoz que los represente allá ARRIBA.

Es simple. Si entre toda la gente que muere se encontrara el hijo de ALGUIEN IMPORTANTE, que no me oiga el diablo, algunos líderes no recordarían siquiera su último trabajo. Lo difícil es enfrentarse a esta dura realidad.

El activista Nelson Dembo, más conocido como «Gangsta», se sintió indignado, y pidió [13] a sus seguidores que se unieran a una conversación virtual en su cuenta de Facebook, donde argumentó que la muerte de Teokamba revelaba el silencio y la hipocresía de figuras públicas de Angola, que no se pronunciaron contra las barbaridades cometidos por el Estado:

#Família hoje a partir das 22:00 entrarei em #directo para abordar, a #morte #gratuita do #jovem do #prenda as mãos da #Polícia #Nacional

Polícia está que tem como função a #proteção e a #segurança do povo #Angolano mas que múltiplas vezes atropela a #ética #deontológica da própria #Instituição, regras estás que só aparece no papel mas na prática é a #inversão dos #valores…

Cadê os #Músicos para darem a cara por estas mortes constantes a mão da polícia??? Só precisam do povo Angolano para ir comprar os vossos #CDS na praça de #independência?..

Familia, hoy desde las 22:00 horas estaré en directo para hablar sobre la muerte injustificada del joven de Prenda a manos de la Policía Nacional.

La Policía tiene como función la protección y la seguridad de los angoleños, pero muy a menudo pisotea la ética de la propia institución, las normas solo existen sobre el papel, pero en la práctica es lo contrario de estos valores…

¿¿¿Dónde están los músicos a la hora de enfrentarse a estas matanzas constantes a manos de la Policía??? ¿Solo necesitan a los angoleños para comprar sus CD en la Plaza de la Independencia?