A mediados de 2020, cuando el presidente turco Recip Erdoğan tuvo su cuarto nieto, su hija y su yerno (entonces ministro de Finanzas) anunciaron el nacimiento del niño en Twitter.
Además de muchos tuits de felicitación de seguidores del gobernante partido Justicia y Desarrollo (AKP) de Erdoğan, la pareja también recibió insultos.
Luego los tuits fueron eliminados y la cuenta fue borrada. Pero esos insultos llevaron a renovar el interés de Erdoğan para finalizar la legislación del país para centralizar el control sobre plataformas de medios sociales en Turquía.
«¿Entienden por qué estamos contra medios sociales como YouTube, Twitter y Netflix? Para erradicar esa inmoralidad», dijo el presidente Erdoğan a miembros de AKP en un discurso televisado, en referencia a los tuits presuntamente insultantes.
«Estas plataformas no le sientan bien a este país. Queremos que se prohíban esas plataformas, que queden bajo control», dijo Erdoğan.
La ley llegó tan rápido como las detenciones de usuarios de medios sociales presuntamente detrás de los insultos.
La nueva ley de medios sociales (ley sobre regulación de publicaciones en internet y represión de delitos cometidos por medio de esas publicaciones) se adoptó en julio de 2020 y está vigente desde octubre de 2020, y establece un serie de requisito que tendrá un impacto duradero en derechos digitales y libertad de expresión en Turquía.
Las empresas de medios sociales estarán obligadas a tener oficina en Turquía; sus representantes serán responsables en asuntos legales; el ancho de banda de las empresas que se nieguen a abrir una oficina se les reducirá la velocidad hasta en un 90 %; las empresas de medios sociales se verán obligadas a guardar datos de usuarios en Turquía. Las empresas deberán publicar un informe sobre sus actividades cada seis meses. Si no lo hacen, recibirán una multa de hasta 10 millones de liras (1.3 millones de dólares).
Un año después de que Turquía restableció el acceso a Wikipedia, el país enfrenta ahora estas nuevas restricciones.
Aunque las empresas no cumplieron al comienzo, las recientes multas han obligado a algunos gigantes de los medios sociales a ceder. TikTok fue una de las empresas que cumplió más recientemente.
Cómo empezó
En abril de 2020, Human Rights Watch informó cómo apareció la ley de medios sociales en un proyecto de ley sobre medidas económicas para enfrentar el COVID-19:
The draft law, circulated April 9, stipulates that all platforms accessed by over 1 million users daily must appoint a legal representative in Turkey on whom courts can serve orders to take down content or block access to accounts. Any platform that refuses would see its bandwidth reduced by 50 and then 95%, rendering the platform unusable in Turkey.
El proyecto de ley, publicado el 9 de abril, estipula a la que accedan más de un millón de usuarios diarios deben designar un representante legal en Turquía, que pueda recibir órdenes judiciales de retirar contenido o bloquear acceso a cuentas. Toda plataforma que se niegue verá reducir su ancho de banda en 50 % y luego en 95 %, lo que hará que la plataforma no se pueda usar en Turquía.
Estas reformas propuestas fueron retiradas temporalmente.
Un mes después, el complejo presidencial de Turquía publicó una guía de medios sociales de 161 páginas, escrito por Fahrettin Altun, jefe de Medios y Comunicaciones, con recomendación directa de «empezar a centralizar el control del dominio digital”.
Altun cree que las redes sociales se han convertido en un «riesgo vital» para los ciudadanos turcos, que se ven cada vez más amenazados por la rápida digitalización y, por tanto, se benefician de la centralización del control de los espacios digitales por parte del Gobierno.
Los periodistas y defensores de la libertad de internet describieron la guía de medios sociales como una herramienta para la censura.
“La guía fue un paso para establecer control del Gobierno sobre Twitter y otras plataformas”, dijo Fatih Polat, editor en jefe del diario opositor Evrensel, en una entrevista con Deutsche Welles (DW).
Gulin Cavus, fundador de la red turca de verificación de hechos Teyit, dijo que la amenaza de la desinformación en línea no proviene de los ciudadanos turcos, como afirma la guía, sino de los organismos gubernamentales que «se dedican a la manipulación a sabiendas», en declaraciones a DW.
Cómo va
En noviembre de 2020, Turquía multó a Facebook, Twitter y YouTube por un total de 1.18 millones de dólares por no cumplir con la nueva ley de medios sociales.
En diciembre, la Autoridad de Tecnologías de Información y Comunicación de Turquía (BTK) golpeó a las plataformas con una nueva penalidad de 30 millones de liras turcas (3.8 millones de dólares) cada una por no haber contratado a representantes locales.
Las multas funcionaron. YouTube, Instagram y TikTok estuvieron entre las primeras empresas en contratar representantes locales.
El 8 de enero de 2021, Facebook anunció que abriría una oficina local, y también que dio a conocer su decisión de designar un representante local en Turquía para cumplir con las nuevas regulaciones.
En su declaración, Facebook dijo:
We have been closely following developments on Turkey’s recently amended Internet Law No. 5651 which stipulates new requirements for social media platforms. Like other companies, we have decided to begin the process of appointing a legal entity as a local representative in compliance with the law, while also recognizing how important it is for our platform to be a place where users can exercise their freedom of expression.
This decision does not change Facebook’s Community Standards, nor the global process for reviewing government requests, and we will withdraw the representative if we face pressure on either. We will continue to review and evaluate government requests in accordance with these policies, including our commitments as a Global Network Initiative member, and under the UN Guiding Principles on Business and Human Rights. We will continue to report details of the content we restrict, in line with our existing transparency processes.
Hemos seguido de cerca la evolución de la recién modificada Ley de Internet 5651 de Turquía, que estipula nuevos requisitos para las plataformas de medios sociales. Al igual que otras empresas, hemos decidido iniciar el proceso de designación de una entidad legal como representante local en cumplimiento de la ley, a la vez que que reconocemos la importancia de que nuestra plataforma sea un espacio donde los usuarios puedan ejercer su libertad de expresión.
Esta decisión no cambia las normas comunitarias de Facebook, ni el proceso global de revisión de las solicitudes gubernamentales, y retiraremos al representante si recibimos presiones en cualquiera de los dos casos. Seguiremos revisando y evaluando las solicitudes de los Gobiernos según estas políticas, incluidos nuestros compromisos como miembro de la Iniciativa de la Red Global, y en virtud de los Principios Rectores de Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos. Seguiremos informando de los detalles del contenido que restringimos, de acuerdo con nuestros procesos de transparencia existentes.
La plataforma TikTok dijo:
TikTok is a powerful platform that gives voice to diverse communities, and we remain focused on providing people in Turkey the opportunity to express themselves creatively through video, from sharing unique cooking skills to easy tutorials on drawing. We're also committed to respecting local laws in the markets in which we operate, even when we disagree with them. As such, we will comply with the requirements of the law — establishing a local legal entity and providing a local point of contact to the Government in Turkey as a next step to compliance – while we maintain our commitment to the freedom of expression that is fundamental to the creativity that thrives in our community.
TikTok es una poderosa plataforma que da voz a diversas comunidades, y seguimos centrados en ofrecer a la gente de Turquía la oportunidad de expresarse de forma creativa a través del video, desde habilidades culinarias únicas hasta sencillos tutoriales de dibujo. También nos comprometemos a respetar las leyes locales de los mercados en los que operamos, aunque no estemos de acuerdo. Por eso, cumpliremos con los requisitos de la ley, estableceremos entidad legal local y proporcionaremos un punto de contacto local con el Gobierno en Turquía como siguiente paso para el cumplimiento, y mantendremos nuestro compromiso con la libertad de expresión que es fundamental para la creatividad que prospera en nuestra comunidad.
Como represalia a las empresas que se negaron a cumplir la normativa, la Autoridad de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (BTK) prohibió a las empresas en línea anunciarse en Twitter, Periscope y Pinterest, en una decisión publicada en el Boletín Oficial el 19 de enero.
Es probable que esta medida repercuta en los medios de vida de muchas personas en Turquía, en un momento en que el país enfrenta retos económicos como consecuencia de la pandemia.
Mientras tanto, el cumplimiento de YouTube, Facebook, TikTok y otras plataformas son un «mal precedente que hará más difícil que otras empresas se defiendan», dijo Electronic Frontier Foundation. La EFF se mostró especialmente crítica con la decisión de YouTube de acatar la ley, dado el historial de intentos anteriores del Gobierno turco para controlar la plataforma.
Los funcionarios turcos dicen que la ley es similar a la NetzDG [Ley de Aplicación de la Red] de Alemania. Sin embargo, los expertos dscrepan. Emma Sinclair-Webb, experta en Turquía de Human Rights Watch, dijo que, a diferencia de Turquía, Alemania tiene una «clara separación de poderes y un poder judicial independiente».
Según Engelliweb, sitio que documenta contenidos censurados, en octubre de 2020, al menos 450 000 dominios, 140 000 URL y 42 000 tuits estaban bloqueados en Turquía.
El 21 de enero, el Instituto Internacional de la Prensa (IPI) emitió una declaración en la que pedía a Turquía que retirara la nueva ley y anulara las sanciones impuestas.
Renan Akyavas, coordinador del programa IPI Turquía, dijo:
This law and its penalties threaten the removal of critical voices, including journalists who have been driven from mainstream media, from social media via content removal or self-censorship. Turkey must withdraw this law and all penalties on social media companies issued under it. This law represents a serious expansion of digital censorship and threatens a last bastion for journalists and critical public discussion.
Esta ley y sus sanciones amenazan con eliminar las voces críticas, incluidos los periodistas que han sido expulsados de los medios convencionales, de las redes sociales por eliminación de contenidos o autocensura. Turquía debe retirar esta ley y todas las sanciones impuestas a las empresas de medios sociales en su aplicación. Esta ley representa una grave expansión de la censura digital y amenaza un último bastión para los periodistas y el debate público crítico.
Pero los funcionarios en Ankara aún deben ceder.