El 26 de marzo, Thierry Henry, leyenda del fútbol francés y entrenador recientemente retirado del CF Montreal, abandonó todas las plataformas de redes sociales para expresar claramente su rechazo al racismo en línea. En un mensaje conjunto a sus 14,8 millones de seguidores en Twitter, Facebook e Instagram antes de cerrar sus cuentas, dijo:
Hi Guys,
From tomorrow morning I will be removing myself from social media until the people in power are able to regulate their platforms with the same vigour and ferocity that they currently do when you infringe copyright…. pic.twitter.com/gXSObqo4xg
— Thierry Henry (@ThierryHenry) March 26, 2021
Hola gente,
A partir de mañana temprano me retiro de las redes sociales hasta que la gente que las controla pueda regular sus plataformas con el mismo vigor y ferocidad que aplican cuando infringes un derecho de propiedad intelectual…
— Thierry Henry
Para Henry, llegó el momento de presionar a las redes sociales para que actúen contra los abusos racistas, que se han disparado durante los confinamientos y las clausuras de estadios provocados por la pandemia de COVID-19, y que han pasado de los ataques físicos y verbales —tirar plátanos al campo y canciones burlonas cuando la pelota está en manos de jugadores negros— al insulto y el acoso en línea. Estos ataques resurgieron en la segunda mitad de 2020 y continuaron en 2021. En su declaración, el exdelantero del Arsenal y del Barcelona escribió:
The sheer volume of racism, bullying and resulting mental torture to individuals is too toxic to ignore. There HAS to be some accountability. It is far too easy to create an account, use it to bully and harass without any consequence and still remain anonymous. Until this changes, I will be disabling my accounts across all social platforms. I’m hoping this happens soon.
El creciente volumen de racismo y acoso, y la tortura mental que provoca a las personas es demasiado tóxica para ignorarlo. Tiene que HABER responsabilidades. Es tremendamente fácil crear una cuenta, utilizarla para acosar y atormentar sin consecuencias y seguir siendo anónimo. Hasta que esto cambie, voy a desactivar mis cuentas en todas las plataformas de medios sociales. Espero que suceda pronto.
Y añadió:
I’m not saying it’s not good to have social media, I’m just trying to say that it has to be a safe place. Basically, I did what I felt and I hope it can inspire people to do the same thing if they feel the same way.
No digo que no sea bueno tener medios sociales, solo intento explicar que deben ser un lugar seguro. Básicamente, hago lo que siento, y espero que mi decisión inspire a otras personas a hacer lo mismo si se sienten igual.
El anuncio de Henry llegó dos días después de que Chrissy Teigen, modelo y personalidad televisiva estadounidense, tomara también la decisión de cerrar su cuenta de Twitter después de sufrir abuso en línea.
Twitter ha sido acusado de permitir lenguaje insultante contra usuarios, normalmente desde cuentas anónimas, en comentarios que a menudo son racistas o misóginos, y aunque el gigante de las redes ha publicado y citado su «política contra conductas de odio«, no suele ser rápido al tratar estos casos.
COVID-19 paraliza el deporte, el racismo vuelve a asomar
En 2020, el mundo del deporte se vio paralizado a causa de la pandemia. Se han tenido que postergar muchos grandes eventos deportivos, como los Juegos Olímpicos y la Eurocopa de fútbol 2020. Durante ese tiempo, un incidente crucial fue la muerte de George Floyd durante su arresto en Estados Unidos. El caso impulsó protestas contra el racismo y la discriminación en todo el mundo.
Mientras las protestas se sucedían en las calles y en línea, grupos de derechos civiles exigieron más acción de las empresas de medios sociales. La Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP), la Liga Antidifamación y Color of Change pidieron una reunión con el director ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg. La presión de los principales anunciantes forzó a la empresa a tratar el racismo y la discriminación entre otras injusticias sociales en esta plataforma. Antes de esto, Facebook retrasaba cualquier respuesta, o simplemente no contestaba los comentarios que pedían combatir las injusticias sociales.
Con la relajación de las medidas de confinamiento en el Reino Unido, la Premier League inglesa (EPL) fue una de las primeras ligas en volver a los estadios, y como símbolo de protesta y solidaridad, los jugadores decidieron arrodillarse antes del comienzo de todos los partidos.
En un partido entre el Manchester City y el Burnley F.C., un avión sobrevoló el estadio con un cartel que decía “White Lives Matter Burnley”, en oposición a la protesta de los jugadores. Con restricciones para que los aficionados al fútbol asistieran a partidos en vivo, el siguiente blanco fueron las cuentas de los jugadores en redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter.
Incremento de ataques racistas virtuales contra jugadores de fútbol
A principios de este año, numerosos jugadores de la EPL fueron víctimas de ataques racistas en Twitter e Instagram. Marcus Rashford sufrió una de estas agresiones en línea después del empate sin goles contra sus archirrivales del Arsenal.
En un tuit publicado el 30 de enero, Rasford, jugador del Manchester United de 23 años, dijo:
Humanity and social media at its worst. Yes I’m a black man and I live every day proud that I am. No one, or no one comment, is going to make me feel any different. So sorry if you were looking for a strong reaction, you’re just simply not going to get it here ??
— Marcus Rashford MBE (@MarcusRashford) January 30, 2021
La humanidad y los medios sociales están en su peor momento. Sí, soy un hombre negro y vivo cada día profundamente orgulloso de lo que soy. Ninguna persona ni ningún comentario va a hacerme sentir de otra forma. Lo siento si estaban buscando una reacción violenta, simplemente aquí no la van a conseguir.
El jugador fue recientemente nombrado caballero por sus esfuerzos en la campaña para pedir al Gobierno británico que unos 1,3 millones de escolares obtuvieran vales de comida escolar gratuitos durante las vacaciones de verano a causa de la pandemia de COVID-19.
En apoyo de los jugadores, la EPL exigió a las empresas de redes sociales que pusieran en marcha medidas serias contra los ataques racistas.
En una declaración, el presidente de la EPL dijo:
I am appalled to see the racial abuse received by the players this week.” [February 2021] “Racist behaviour of any form is unacceptable and nobody should have to deal with it. Tackling online hate is a priority for football, and I believe social media companies need to do more.
Estoy consternado de ver el acoso racial que han sufrido algunos jugadores esta semana» [febrero de 2021]. «Los comportamientos racistas de cualquier tipo son inaceptables y nadie debería tener que soportarlos. Luchar contra el odio en línea es una prioridad para el fútbol, y creo que las empresas de redes sociales tienen que hacer más.
Un tuit de la cuenta oficial de la EPL pidió a las plataformas de redes sociales que emprendieran acciones contra los abusos en línea. El tuit, que contenía una carta conjunta para el director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, y para Mark Zuckerberg, es la última llamada de la campaña #NoRoomForRacism («No hay espacio para el racismo») que lanzó la EPL en 2019 con la intención de luchar contra la discriminación.
Football calls for social media platforms to take action against online abuse.
✍ Premier League
✍ @FA
✍ @EFL
✍ @BarclaysFAWSL
✍ @FAWomensChamp
✍ @PFA
✍ @LMA_Managers
✍ PGMOL
✍ @kickitoutThere is #NoRoomForRacism ➡ https://t.co/63n2Cdmebm pic.twitter.com/4FIMFD43iQ
— Premier League (@premierleague) February 11, 2021
El fútbol pide a las plataformas de medios sociales que emprendan acciones contra el abuso en línea.
✍ Premier League
✍ Asociación de Fútbol de Inglaterra
✍ English Premier League
✍ Asociación de fútbol de la Superliga femenina Barclays
✍ Asociación de campeonato femenino de fútbol
✍ Asociación de Futbolistas Profesionales
✍ Asociación de Directores de Liga
✍ Oficiales de partido profesionales limitados
✍ Kick it OutNo hay espacio para el racismo.
Lucha contra el racismo y la discriminación en el fútbol
En otros ámbitos, el Gobierno del Reino Unido ha amenazado a las empresas de redes sociales con fuertes multas si no combaten el racismo en sus plataformas. Instagram anunció algunas medidas para tratar las agresiones en línea después de la avalancha de ataques racistas a los futbolistas de la Premier League. La empresa indicó que eliminaría las cuentas que se usan para enviar mensajes insultantes.
Estos insultos han ido aumentando en 2020, y algunos de las redes sociales han actuado de forma activa con directrices a sus usuarios. Eric Han, jefe de seguridad de TikTok en Estados Unidos, dio cinco formas para contrarrestar el discurso de odio en TikTok en un artículo en el que la empresa promete «seguir aplicando un sistema proactivo para detener la difusión del odio y reconocer el odio y los grupos extremistas violentos» y sienta las bases de su código de conducta. Como consecuencia, se han eliminado de TikTok más de 380 000 videos y 64 000 comentarios de odio, y se han clausurado 1300 cuentas en Estados Unidos.
KickItOut.org, organización que lucha contra el racismo y la discriminación en el fútbol, unió esfuerzos con la EPL, la Asociación de Fútbol (FA) y la Asociación de Futbolistas Profesionales (PFA) para relanzar estos esfuerzos.
The group identified a set of common principles which will drive their working agenda moving forward. The principles include that: football and social media should be places where everyone feels that they belong; discrimination, hate and abuse towards those who play, support or work in the game is totally unacceptable and will not be tolerated; online and offline hate must have real-world consequences for perpetrators and individuals should be held accountable for their actions.
El grupo identificó un conjunto de principios comunes que harán avanzar su agenda de trabajo. Entre estos principios: el fútbol y las redes sociales deben ser espacios que todo el mundo sienta como suyos; la discriminación, el odio y el insulto a los que juegan, apoyan o trabajan en el deporte es totalmente inaceptable y no se tolerará; el odio en línea ni fuera de línea debe tener consecuencias en el mundo real: los autores deben responder por sus acciones.
Es hora de que las empresas de internet actúen
En febrero de 2021, el defensa de la selección irlandesa Cyrus Christie dijo que los casos más mediáticos de insultos racistas a futbolistas en línea de los últimos meses solo son la punta del iceberg. Lo que soportan los jugadores negros y de otras minorías étnicas en divisiones menores pasa prácticamente desapercibido, pese a la sensibilización pública.
Aunque las plataformas de redes sociales se han utilizado para difundir historias de interés humano y conectar a gente de todo el mundo, en un artículo de 2020 para The Conversation, Imran Awan escribió sobre los insultos en línea y señaló:
“As Black Lives Matter continues to draw attention to racism—the trigger pushback from people using social media to express sentiments against people of colour—it’s time internet companies did more to tackle all forms of bigotry.
Mientras el movimiento Black Lives Matter sigue llamando la atención sobre el racismo —el tiro por la culata de quenes usan los medios sociales para expresar sentir contra la gente de color— ya es hora de que las empresas de internet hagan algo más para combatir toda forma de intolerancia.
Y continúa:
It’s important to recognise that these comments on social media reflect wider attitudes that are endemic in the offline world. Social media can appear to act as a megaphone for racists, but these opinions are much more mainstream than you think. As a society we need to grapple with how these ideas have become normalised, and challenge and expose them.
Social media companies including Facebook, Twitter and now TikTok have taken active steps to block and remove those people clearly linked with the far right. But this is only a starting point. More needs to be done to identify other individuals who are less obviously spreading hatred, often under the protection of anonymity. Only then can we try and effectively change attitudes and reduce social media’s significant capacity for harm.
Es importante reconocer que estos comentarios en medios sociales reflejan actitudes más amplias, endémicas en el mundo real. Puede parecer que las redes sociales actúan como un megáfono para los racistas, pero estas opiniones son mucho más habituales de lo que se piensa. Como sociedad, necesitamos combatir cómo estas ideas se han normalizado, cuestionarlas y exponerlas.
Las empresas de medios sociales como Facebook, Twitter y ahora TikTok, han tomado medidas para bloquear y eliminar a los usuarios claramente vinculados con la extrema derecha. Pero ese solo es el punto de partida. Es necesario hacer más para identificar a otras personas que difunden odio de forma menos evidente, a menudo escudándose en el anonimato. Solo entonces podemos intentar cambiar actitudes, cambiarlas efectivamente y reducir la considerable capacidad de daño que tienen los medios sociales.
En 2018, Twitter introdujo un algoritmo en un esfuerzo para luchar contra el acoso. El sistema pretende utilizar señales en el comportamiento —cómo reaccionan los usuarios a un tuit— para valorar si una cuenta se une o retira de ciertas conversaciones. El algoritmo actualizado está pensado para hacer descender algunos tuits en la lista de búsquedas de resultados o respuestas, pero esos tuits no se borran de la plataforma. Eso no es efectivo. En enero de 2020, Twitter anunció que estaban probando nuevas funciones que permitirían a los usuarios controlar quién puede responder a sus tuits. Por lo que parece, aún queda mucho por hacer.
En un estudio relacionado sobre «Niveles crecientes de discurso de odio y toxicidad en la red durante esta época de crisis», la empresa l1ght, emprendimiento basado en inteligencia artificial, mostró un considerable incremento en el discurso de odio dirigido a asiáticos, más específicamente a los chinos, a quienes algunos culpan por el origen del coronavirus en China. Este estudio mostró los efectos de que la gente pase más tiempo en línea por los confinamientos y los toques de queda impuestos para restringir los movimientos durante la pandemia.
Queda mucho por hacer, y con la actual tendencia de algunaos famosos de abandonar los medios sociales, falta por ver cómo las distintas plataformas harán efectivos sus códigos de conducta. Con más atención sobre la raza y los ataques en línea, los reguladores podrían unirse a la conversación para hacer de las plataformas de medios sociales lugares más seguros.