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Amenazas para las orquídeas en peligro de Nepal

Categorías: Asia del Sur, Nepal, Ambiente, Economía y negocios, Medios ciudadanos, Relaciones internacionales

Las orquídeas son una de las flores más codiciadas del mundo. Foto de Mamta B Khatri (Búho Verde). Utilizada con autorización.

Las orquídeas son conocidas por su belleza, poderes curativos y valor alimentario, y probablemente son las flores más comercializadas del mundo, legal e ilegalmente. Los coleccionistas, a sabiendas o no, presionan a los lugareños para que saquen [1] estas magníficas flores de la naturaleza para usarlas como flores ornamentales, medicina o alimento [2]. Esto hace que la segunda flor más abundante, con más de 29 000 especies registradas [3] en todo el mundo, sea vulnerable a la extinción. Los conservacionistas sugieren que dar a conocer el comercio legal de orquídeas como cuestión importante de conservación puede evitar la extinción de algunas orquídeas.

Nepal cuenta con 507 variedades de orquídeas registradas [4] y el Gobierno de este país ha incluido todas las orquídeas silvestres en los Apéndices I y II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES [5]), tratado multilateral de protección a plantas y animales en peligro de extinción. Sin embargo, cada año los comerciantes recogen de forma insostenible toneladas de orquídeas silvestres y las exportan [6] a mercados internacionales, lo que hace temer por su conservación.

Cada año se envían [6] 10 000 toneladas de plantas medicinales a 50 países diferentes desde Nepal. Esto incluye 24 especies de orquídeas junto con 12 variedades de Dendrobium [7] que tienen propiedades anticancerígenas. Y estos casos denunciados son solo la punta del iceberg. Hay una larga historia de recolección insostenible de orquídeas en los bosques de Nepal, como cuando se contrabandearon unas 800 toneladas de orquídeas a India desde el este de Nepal en la década de 1980, según información [4] publicada en 1985 por el Real Jardín Botánico de Kew. Gran parte de las orquídeas silvestres de Nepal van a India y China, y algunas a Hong Kong [8].

Reshu Bashyal, que dirige el proyecto Comercio Ilegal y UsoSostenible de Orquídeas Medicinales en Nepal [9], encontró 15 registros de incautaciones en los últimos 10 años, cada una de las cuales oscilaba entre 4,4 y 9.364 kilogramos de orquídeas. Dijo a Global Voices::

They are mostly transported in trucks or public buses, where orchids are bundled in sacks, plastics, or clothes either solely or in mixed form with other herbs. Sometimes, smugglers hoodwink police using innovative ways, such as hiding them in bus engines, or storing them in sealed drums.

La mayoría de las veces se transportan en camiones o autobuses públicos, donde las orquídeas se empaquetan en sacos, plásticos o ropa, solas o mezcladas con otras hierbas. A veces, los contrabandistas engañan a la Policía con métodos innovadores, las ocultan en los motores de los autobuses o las almacenan en bidones sellados.

Según Reshu, entre 2008 y 2016, Nepal registró 49 789 kg de comercio legal de orquídeas, con volúmenes que fluctuaron enormemente a lo largo de los años. Las orquídeas recolectadas en el medio silvestre dominaron el comercio legal, y representan el 96 % del comercio, mientras que apenas el 4 % fueron orquídeas cultivadas artificialmente, en su mayoría pertenecientes a los géneros Dendrobium, Coelogyne, Cymbidium y Otochilus. Una pequeña cantidad de comercio que asciende a 200 kg quedó sin identificar. Estos datos dan una visión inicial de la naturaleza y la escala del comercio ilegal de orquídeas en Nepal, como parte de un esfuerzo mayor para triangular y verificar la dinámica del comercio», añadió Reshu.

Las hermosas orquídeas suelen crecer en ramas inaccesibles de los árboles viejos o en los acantilados y es difícil recogerlas. Foto de Mamta B Khatri (The Green Owl). Utilizada con autorización.

Recolección para cultivo, horticultura y fines medicinales

Buddhi Rai, perteneciente a una tribu indígena kirant [10] de la aldea de Siktemba, distrito de Panchthar, al este de Nepal, presume de sus orquídeas recogidas a lo largo de 40 años, en su mayoría Cymbidiums. «Las llamamos aamlabung en nuestra lengua», afirma Buddhi en conversación con Global Voices. «Hay muchas especies de orquídeas en nuestros bosques. Sin embargo, la mayor parte de mi colección procede de las ciudades indias de Mirik, Darjeeling y Kalimpong». Como las orquídeas híbridas son más resistentes y sus hermosas flores duran meses, la gente prefiere plantarlas. Añadió que estas hermosas orquídeas suelen crecer en las ramas inaccesibles de los árboles viejos o en los acantilados y son difíciles de recolectar.

Los kirati usan las orquídeas para confeccionar sus atuendos tradicionales [11]. Los tallos de las aamlabung se secan como el heno y se convierten en cordones dorados», explica Buddhi. Estos cordones en forma de hermosos ramilletes duran más cuando se añaden a los trajes tradicionales».

Aunque en Nepal no existen orquídeas para productos alimenticios [3] como la vainilla, el salep, la chikanda y el faham, la industria ayurvédica nepalí –medicina tradicional– incluye unas 94 especies de orquídeas [3]. Muchas especies de orquídeas nepalíes se usan también en la medicina tradicional china.

«He visto aamchis de la región del Himalaya vendiendo tubérculos de orquídeas encontrados en nuestras colinas en ciudades como Biratnagar y Katmandú», añade y señala el uso de orquídeas para curar varias dolencias. He encontrado tubérculos de una orquídea con flores moradas de nuestras colinas que se venden en Katmandú como afrodisíaco».

El Gobierno de Nepal ha incluido todas las orquídeas silvestres en el Apéndice I y II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES). Foto de Mamta B Khatri (The Green Owl). Utilizada con autorización.

Políticas contradictorias

Aunque todas las orquídeas están protegidas en Nepal, en 2008 el Gobierno de este país anunció que permitía la recolección de orquídeas silvestres para su comercio, lo que contradice sus políticas oficiales, según el documento de investigación «Recolección y comercio de orquídeas silvestres en Nepal [8]«.

«La Dactylorhiza hatagirea [13] es endémica del Himalaya y se parecida a una palmera. Localmente, se le conoce como paanch aunle, y está estrictamente prohibida su recolección, uso y venta», dijo el botánico Kamal Maden en entrevista con Global Voices. LA flor está clasificada como especie en peligro de extinción, y ha sido incluida en el Apéndice II de la CITES, lo que significa que no está necesariamente en peligro de extinción, pero puede extinguirse si no se controla su comercio.

El paanch aunle es una especie protegida por la Ley Forestal de 2049 (1993)», escribe [4] Kamal. En 2005, la tercera enmienda del Reglamento Forestal, 2051 (1995), fijó el derecho de exportación en 500 rupias nepalesas [4,20 dólares estadounidenses] por kilo». Pero el comercio clandestino de paanch aunle a China sigue prosperando.

Muchas otras especies de orquídeas, incluida la Gastrodia elata [14], enfrentarán extinción si el Gobierno sigue concediendo licencias de exportación para especies en peligro crítico.

La aplicación de una política firme y directrices claras sobre la recolección sostenible, junto con la preservación del hábitat, ayudarán a conservar las orquídeas en la naturaleza. Sin embargo, comprender mejor el comercio [3] y enfrentar sus amenazas es de vital importancia para su conservación.

Reshu Bashyal tuitea a menudo sobre las orquídeas para recordar su conservación.

¡Estos son los dos nuevos «compañeros» de nuestra oficina!
Cuando hay problemas con el comercio ilegal de orquídeas de sus hábitats naturales, también hay algunas iniciativas a pequeña escala para promover la propagación de orquídeas en Nepal, para reducir la presión sobre las orquídeas silvestres.

Encontramos esta belleza en el bosque durante nuestra reciente caza de orquídeas (en algún lugar de Nepal).
Mientras seamos conscientes de la importancia de la conservación de estas increíbles bellezas, tendremos la oportunidad de verlas prosperar en la naturaleza.