«Petrolero en Bósforo [1]» de MrHicks46 (CC BY-SA 2.0 [2]).
A pesar de la creciente oposición de los grupos políticos y de la sociedad civil por posibles problemas ambientales y políticos, el presidente Recep Tayyip Erdoğan está decidido a continuar con el controvertido proyecto Kanal Istanbul [3], canal de transporte artificial de 45 km de largo que conectará el mar de Mármara con el mar Negro. El 26 de junio, Erdoğan asistió a la ceremonia de inauguración de lo que llamó su “proyecto loco [4]”. El proyecto ha recibido muchas criticas [5], como las del alcalde de Estambul [6], científicos [7], almirantes retirados [8], embajadores [9] y gente común y corriente [10] por su impacto ambiental, económico y de seguridad.
Hasta ahora, el costo estimado [11] del proyecto es de 15 000 millones de dólares estadounidenses. Sin embargo, es probable que el monto alcance los 21 000 millones de dólares estadounidenses [12] una vez que se agreguen los costos operativos y financieros.
Erdoğan [13] insiste en que Kanal Istanbul contribuirá a la economía de Turquía y ayudará a reducir el tráfico en el Bósforo.
Según el ministro de Transporte e Infraestructura, Adil Karaismailoğlu [14], las ganancias del canal cubrirán los costos estimados unos 12 años después de que se complete el canal.
Pero mientras tanto, el gobernante Partido Justicia y Desarrollo (AKP) parece haber sobreestimado la capacidad financiera del país y ha estado tratando de conseguir inversionistas extranjeros. Algunos de estos potenciales inversionistas son Países Bajos, Bélgica y Rusia, aunque China se ha convertido en la opción más viable [15]. Sin embargo, es probable que la posible participación [16] de China empeore una percepción ya negativa de China [17] en el país.
Iniciativa del corredor medio de Turquía
El Corredor Medio [18], conocido formalmente como la Iniciativa del Corredor Trans-Caspio Este-Oeste-Medio, refleja el sueño de Turquía de construir vínculos con China a través del Cáucaso y Asia Central. El proyecto de ruta comercial [19] Corredor Medio conecta China con Europa a través de Turquía con ferrocarriles y carreteras. Turquía ve el Corredor Medio como un complemento [19] de la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China, más que como un competidor.
Como se puede ver en este mapa del sitio web del Ministerio de Asuntos Exteriores [18] de Turquía, la línea azul representa el Corredor Medio de Turquía y la línea roja representa el Corredor Norte del BRI.
El ferrocarril Baku-Tbilisi-Kars (BTK) [20] se concluyó en 2017, y es uno de los principales proyectos de la iniciativa. Se estima que para 2034, el BTK transportará [18] tres millones de pasajeros y 17 millones de toneladas de carga al año.
Hasta ahora, el primer tren de carga de China a Europa [21] que usó el Corredor Medio llegó a Turquía en noviembre de 2019, y el primer tren de carga de Turquía [22] que usó la misma ruta llegó a China en diciembre de 2020.
Como parte del Corredor Medio y el BRI, Turquía ha realizado numerosas inversiones sustanciales en infraestructura [18]. Los más destacados incluyen el ferrocarril submarino de Marmaray, el túnel Eurasia, y el tercer puente de Estambul que conecta Europa y Asia a través de Estambul y el aeropuerto de Estambul. También se están llevando a cabo varios otros proyectos de infraestructura [18], como el puente del estrecho de Çanakkale, el tren de alta velocidad Edirne-Kars y el túnel de tres niveles.
Tanto China como Turquía están ansiosos [23] por integrar el BRI y el Corredor Medio. El presidente Erdoğan [24] dijo que «el Corredor Medio… se encuentra en el corazón del BRI» y Turquía «seguirá trabajando con nuestros amigos chinos para integrar el Corredor Medio al BRI».
El presidente de China, Xi Jinpin [25],»pidió a las dos partes que promuevan la sinergia entre la construcción conjunta de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, y el proyecto del Corredor Medio de Turquía». Mientras tanto, el ministro de Infraestructura y Transporte de Turquía, Adil Karaismailoğlu [26], dijo que Kanal Estambul es una parte integral del Corredor Medio, y señaló que «con Kanal Estambul, nuestro objetivo del Corredor Medio se fortalecerá».
Relaciones económicas chino-turcas
Las relaciones comerciales entre Turquía y China crecieron sustancialmente después de que China se unió a la Organización Mundial del Comercio el 11 de diciembre de 2001. En ese momento, el comercio bilateral era de menos de 2000 millones de dólares estadounidenses. Durante los siguientes 20 años, la facturación alcanzó los 26 000 millones de dólares [27]. No obstante, esta es una relación desigual [28]. Mientras que las exportaciones de China a Turquía suman 23 041 millones de dólares, las exportaciones de Turquía a China ascienden a apenas 2865 millones.
Una manera de cambiar el panorama comercial desigual es aumentar las inversiones chinas en Turquía [28] a través de iniciativas como el BRI. Aunque China no se encuentra entre los diez principales inversionistas de Turquía, más de mil empresas chinas [29] han invertido en rubros como finanzas, energía, producción e infraestructura. En 2019, el exembajador de China en Turquía, Deng Li [30], esperaba que la inversión china alcanzara los 6000 millones de dólares para fines de 2021. Cuando se combina con los ingresos del turismo, las inversiones chinas en Turquía pueden desempeñar un papel importante en reducir la salida de divisas de Turquía.
China también ha realizado importantes inversiones en infraestructura en el país. En 2015, un consorcio chino adquirió el 65 % de Kumport [31], tercer mayor puerto de contenedores de Turquía, por 940 millones de dólares. En enero de 2020, un consorcio chino intentó adquirir el 51 % del tercer puente de Estambul [32] por 688 millones de dólares. Sin embargo, informes recientes sugieren que el acuerdo aún no se ha cerrado [33]. Este desarrollo podría descarrilar las inversiones en infraestructura relacionadas con el BRI de China en Turquía, especialmente porque el Estado turco ve cada vez más el puente, como una parte importante [18] de su iniciativa del Corredor Medio.
Captura de pantalla de Vox report [34], «El plan de un billón de dólares de China para dominar el comercio mundial».
Controversia sobre la financiación china
De todas las inversiones chinas en el país, la posible financiación china del proyecto Kanal Istanbul ha desencadenado el debate más acalorado en Turquía.
El Gobierno de Turquía [35] estima que el costo del proyecto alcanzará los 15 000 millones de dólares. Pero con los crecientes problemas económicos [36], que han empeorado por el COVID-19 [37], el gobierno de turno necesita una inyección de efectivo. [38] Además, según Reuters [39], los bancos turcos se han mantenido alejados del proyecto debido al daño ambiental previsto, los posibles riesgos financieros y la oposición política y social generalizada al proyecto.
Varios informes afirman [40] que China está dispuesta [41] a financiar el costoso proyecto y lo ha discutido [42] con funcionarios turcos durante visitas diplomáticas. El 30 de abril de 2021, el ministro turco Adil Karaismailoğlu [43] confirmó el interés de China, y agregó que Países Bajos, Bélgica y Rusia también están interesados en financiar el proyecto.
El presidente del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kılıçdaroğlu [44], advirtió a los posibles inversionistas y Gobiernos extranjeros, que no financien el proyecto. El 9 de mayo afirmó [44] que si la coalición de la oposición gana las próximas elecciones, el nuevo gobierno no devolverá el dinero invertido, e incluso distanciará a Turquía de los países inversionistas. El líder del Partido Bueno (İYİ Parti), Meral Akşener [45], hizo una advertencia similar.
Según una encuesta de MetroPOLL, la mayor parte de la sociedad turca se opone [46] al proyecto Kanal Istanbul. Si bien el 51 % [47] de los encuestados piensa que la razón principal del proyecto es generar ganancias, solo el 29.1 % [47] cree en la afirmación de Erdoğan, de que el canal reducirá el tráfico marítimo en el Bósforo.
Alaeddin Yalçınkaya [48], profesor de la Universidad de Mármara, cree que la inversión china dará como resultado la colonización china de la región de Kanal. El líder del Partido Futuro, Ahmet Davutoğlu [49], también afirma que el gobierno de AKP espera que China proporcione fondos para el Kanal a cambio de tierras alrededor de la zona del Kanal, lo que dañaría la soberanía nacional de Turquía. Otros [50] también advierten a Turquía sobre la diplomacia de la «trampa de la deuda» [15], que se refiere a la política de China de confiscar tierras para préstamos impagos.
Hasta ahora, el Gobierno ha hecho caso omiso de las críticas, y se ha centrado en promover activamente el proyecto Kanal Estambul.