
Fuerzas de mantenimiento de la paz en Nagorno Karabaj. Captura de pantalla del reportaje de Al Jazeera, «¿Qué tan frágil es el alto el fuego entre Armenia y Azerbaiyán? | Inside Story».
Este artículo se publicó en OC Media. Se reproduce una versión editada en virtud de un acuerdo para compartir contenido.
Las tensiones entre Armenia y Azerbaiyán han alcanzado recientemente su punto más alto desde la firma del acuerdo de paz auspiciado por Rusia que puso fin a la segunda guerra de Nagorno-Karabaj el 10 de noviembre de 2020.
Decenas de enfrentamientos entre fuerzas armenias y azerbaiyanas cerca de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán y la línea de contacto de Nagorno-Karabaj han dejado al menos seis soldados muertos desde mayo. Las tensiones también han aumentado en el plano diplomático, ya que el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, se suele referir a territorios dentro de la República de Armenia con nombres azerbaiyanos y promete readquirirlos.
Armenia, por su parte, se ha irritado ante los comentarios de Aliyev y ha comenzado a comprar nuevas armas a Rusia, como se simbolizó el 11 de agosto cuando el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, regaló una daga al ministro de Defensa armenio, Arshak Karapetyan.
Aunque los expertos independientes de Azerbaiyán han expresado diversas perspectivas sobre las causas de las actuales violaciones del alto el fuego, parece haber consenso en que las recientes tensiones son peligrosas.
Rusia y Armenia
Arzu Abdullayeva, que dirige la Oficina de Azerbaiyán de la Asamblea de Ciudadanos de Helsinki, declaró a OC Media que es probable que Rusia esté detrás de las recientes escaladas.
All the clashes that have taken place in recent days are in fact Russian provocations, because Russia’s interests are always at the forefront, as always.
Todos los enfrentamientos de los últimos días son, en realidad, provocaciones rusas, porque los intereses de Rusia están siempre en primer plano, como siempre.
Dicho esto, Abdullayeva no cree probable que se produzcan nuevas acciones militares.
Según Abdullayeva, el principal interés de Azerbaiyán tras la guerra sigue siendo la «apertura del corredor mencionado en el acuerdo de paz tripartito». El corredor de Zangezur tiene una importancia geopolítica clave, dijo Abdullayeva, ya que proporcionará a Turquía un acceso directo a Asia Central a través de Azerbaiyán.
Abdullayeva añadió que, para mantener la paz, Azerbaiyán debe rebajar el tono de su lenguaje acalorado, ya que no puede «conseguir ningún resultado con una retórica dura» y debe «ofrecer una retórica diplomática real y soluciones».
Ahmad Alili, director del Centro de Análisis Político del Cáucaso, centro de estudios independiente de Bakú, declaró a OC Media que cree que la prioridad para Bakú es la delimitación y demarcación de las fronteras. En particular, dijo, Bakú tiene interés en siete pueblos de exclave azerbaiyanos bajo control armenio.
El control de este territorio, en el noreste de Armenia y que se cruza con la vía principal que conecta Armenia con Georgia, permitiría un «funcionamiento más seguro de los gasoductos y oleoductos de Azerbaiyán a Georgia». Además, permitiría a Bakú «controlar todas las líneas de comunicación de Ereván a Tiflis».
Pero es poco probable que Armenia firme un documento que demarque y delimite las fronteras, dijo Alili a OC Media. Si se firmara un documento así, «sería un reconocimiento de la integridad territorial de Azerbaiyán, es decir, Nagorno-Karabaj sería aceptado como parte integrante de Azerbaiyán».
En consecuencia, Alili argumentó que Armenia está «tratando de posponer» las negociaciones o la firma del documento
«Decente y dignificado»
En declaraciones a OC Media a título privado, Eldar Mammadov, asesor de política exterior del Grupo de los Socialistas y Demócratas en el Parlamento Europeo, afirmó que «aunque el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, declaró que [el conflicto de Nagorno-Karabaj] está resuelto, los hechos en el terreno contradicen estas declaraciones». Y añadió:
You can declare that this question is closed and that there is no such a thing as “Nagorno-Karabakh”, but only “Karabakh”. But this assessment neither reflects the realities nor is it shared by major powers like the U.S., Russia, France and the European Union (EU).
Se puede declarar que esta cuestión está cerrada y que no existe «Nagorno-Karabaj», sino solo «Karabaj». Pero esta apreciación no refleja la realidad ni es compartida por grandes potencias como Estados Unidos, Rusia, Francia y la Unión Europea (UE).
Mammadov también señaló que una parte de Nagorno-Karabaj está actualmente bajo la protección de las fuerzas de paz rusas y que la soberanía de Azerbaiyán sobre el territorio no se ha restablecido plenamente.
These forces are there because the rhetoric and actions of the government in Baku do not reassure the local Armenians about their future as part of Azerbaijan.
Estas fuerzas están ahí porque la retórica y las acciones del Gobierno de Bakú no tranquilizan a los armenios locales sobre su futuro como parte de Azerbaiyán.
Bakú «puede intentar imponer su voluntad por la fuerza», dijo Mammadov, pero eso lo «enfrentaría a Occidente y a Rusia». Azerbaiyán también tendría que estar preparado para «limpiar étnicamente a toda la población armenia» del territorio, medida con un «alto costo» para la reputación internacional de Azerbaiyán.
Lo mejor que puede hacer Azerbaiyán, según Mammadov, «es ofrecer un trato decente y digno a los armenios de Karabaj para convencerlos de que tienen un futuro en Azerbaiyán».
Solución «mutualmente aceptable»
En cuanto al «desbloqueo de las comunicaciones comerciales y de transporte en la región», tal como se recoge en la declaración de paz tripartita, Mammadov se mostró de acuerdo en que Bakú se centra especialmente en lo que, según dijo, Azerbaiyán llama el «corredor de Zangezur».
Pero el énfasis en el «corredor» es engañoso, dijo Mammadov.
The trilateral statement made on November 9, 2020 says nothing specific about this “corridor”. [The statement mentions] Only the general principle of establishing direct communication between the western regions of Azerbaijan and Nakhichevan.
La declaración trilateral del 9 de noviembre de 2020 no dice nada específico sobre este «corredor». [La declaración menciona] Solo el principio general de establecer una comunicación directa entre las regiones occidentales de Azerbaiyán y Nakhichevan.
Según Mammadov, el establecimiento de esta línea de comunicación directa «en principio, podría fomentar la interdependencia económica y la prosperidad compartida en la región», pero esta posibilidad se ve «constantemente socavada porque Bakú hable de Zangezur como ‘tierra histórica azerbaiyana’, ya que alimenta los temores de la parte armenia» de que el establecimiento de este enlace sea una forma encubierta para anexarse el sur de Armenia.
Any viable long-term solution requires a buy-in from all parties concerned, including Armenia. Azerbaijan should not repeat the miscalculation made by Armenia in the early 1990’s that it could keep its military gains forever, without finding a mutually acceptable solution.
Cualquier solución viable a largo plazo requiere la participación de todos los implicados, incluida Armenia. Azerbaiyán no debe repetir el error de cálculo cometido por Armenia a principios de la década de 1990, de que podría mantener sus victorias militares para siempre, sin encontrar una solución mutuamente aceptable.
¿Quién se beneficia?
Según Mammadov, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, es el «principal beneficiario» de las tensiones actuales, ya que le permiten aprovechar algunas «disposiciones claves» del acuerdo trilateral «como la reapertura de las comunicaciones comerciales y de transporte» que aún no se han aplicado.
It is designed to put pressure on Armenia to deliver on the opening of the “Zangezur corridor”, and also on Russia as the sponsor of the trilateral statement. It is, therefore, no coincidence that the latest round of tensions on the Armenian–Azerbaijani border occurred just before Aliyev’s visit to Moscow.
Su objetivo es presionar a Armenia para que cumpla con abrir el «corredor de Zangezur», y también a Rusia como patrocinadora de la declaración trilateral. Por lo tanto, no es una coincidencia que la última ronda de tensiones en la frontera armenio-azerbaiyana haya sido justo antes de la visita de Aliyev a Moscú.
Además, la tensión permite a Aliyev mantener a la sociedad azerbaiyana movilizada en torno al conflicto y desviar la atención de los crecientes problemas sociales y económicos.
Pero es probable que Aliyev no sea el único beneficiario de este aumento de violencia. También podrían beneficiar al primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, que está usdo el conflicto para «presentar a Azerbaiyán como la ‘parte irracional’ y tratar de conseguir apoyo internacional en torno a esta afirmación», explicó Mammadov.
«Esto explica las últimas maniobras de Pashinyan para asegurarse el apoyo de Occidente, de Estados Unidos y de la Unión Europea, principalmente a través de los franceses», dijo Mammadov.
El peligro es que ahora «sin una vía política significativa» existe la posibilidad de que el conflicto se agrave «a menos que los actores internacionales impongan un proceso político».