Antes de elecciones parlamentarias, Rusia intensificó presión sobre la poca libertad en línea que queda

Las noticias sobre sitios bloqueados, multas a empresas de redes sociales o nuevos controles sobre internet constituyen la mayor parte de nuestras noticias sobre Rusia en estos días. Y sin embargo, antes de las elecciones parlamentarias del fin de semana del 17 al 19 de septiembre, los ataques estatales a libertades individuales en línea, fuerzas de oposición e infraestructuras de internet alcanzaron un punto álgido. A continuación, hacemos una evaluación de los esfuerzos de censura estatal preelectorales.

Exclusión de la esfera pública

Durante los últimos meses, numerosos grupos opositores, ONG que ofrecían asesoría legalsupervisión electoral, medios independientes y usuarios particulares fueron etiquetados como «agentes extranjeros». Esa designación se traduce en obligaciones engorrosas: los «agentes» deben informar frecuentemente al Estado sobre sus actividades y su financiación, y rotular cada contenido publicado en línea con una referencia a su situación. Otros medios y organizaciones de la sociedad civil cuyas políticas se consideraban poco convenientes para el Kremlin fueron catalogadas de «extremistas», lo que prácticamente, les impide realizar cualquier actividad pública o de recaudación de fondos en Rusia.

En el marco de la campaña del Estado contra los «agentes extranjeros» y las «organizaciones extremistas», los organismos censores también bloquearon sitios web y cuentas de redes sociales. Mientras los grupos opositores, como los proyectos del líder opositor Alexéi Navalny, se precipitaban a crear sitios web espejos para mantener su presencia en línea, varios activistas de derechos digitales identificaban una nueva tendencia preocupante. Aunque la lista negra existente compartida con los proveedores de internet estaba disponible para el público, algunos de los nuevos bloqueos se hicieron fuera de esa lista y sin previa notificación

Los grupos expertos afirman que el Estado ahora usa nuevas herramientas de bloqueo instauradas dentro de la política de «internet soberana» de Rusia. Comúnmente conocidos como «medidas técnicas para combatir amenazas», estos métodos se apoyan en las tecnologías de inspección profunda de paquetes y se manejan de forma centralizada desde la agencia reguladora de internet rusa, Roskomnadzor, a diferencia del sistema existente, que depende de los proveedores de internet. El control centralizado también hace menos transparente la censura estatal, lo que lleva a iniciativas como GlobalCheck a valerse de la inteligencia colaborativa para rastrear los blancos y el alcance del bloqueo.

¿Voto empoderado? No tanto.

Los recientes esfuerzos de censura apuntaron específicamente a los sitios independientes de información para votantes, como la iniciativa «Voto Inteligente» de Navalny y el sitio duma.vote de Mikhail Khodorkovsky. Ambos sitios fueron bloqueados por Roskomnadzor. En junio, el ente regulador presionó a Google para que bajara el sitio «Voto Inteligente», alojado con el dominio appspot.com de Google, y finalmente logró bloquearlo, mientras que «duma.vote» recién pudo ser bloqueado el 13 de septiembre.

«Voto Inteligente» también tuvo problemas meses antes cuando se filtró una supuesta base de datos de sus usuarios y la pusieron en venta en uno de los mercados negros virtuales de Rusia. Muchas personas encontraron sus datos en esa base, y luego varias recibieron llamadas o visitas de las autoridades.

Bajo esta presión, «Voto Inteligente» dirigió a sus usuarios a la aplicación móvil y, en consecuencia, los censores estatales solicitaron a Google y Apple que eliminaran la aplicación de Google Play Store y App Store respectivamente, algo que las empresas aún no han hecho. No obstante, hacia fines de agosto, usuarios en Rusia denunció que la aplicación «Voto Inteligente» no podía descargar actualizaciones, lo que indica que el bloqueo fue parcialmente exitoso al menos.

Pedido de cuentas a empresas

La relación del Estado ruso con las empresas de redes sociales ha sido tensa durante mucho tiempo, ya que el país promulgaba nuevas leyes para controlar el ciberespacio, los datos personales y la libertad de expresión en línea. Sin embargo, aunque algunas empresas de internet han cumplido con las leyes de localización de datos o los requerimientos de bloqueo, la mayoría de los gigantes de redes sociales han decidido ignorar sutilmente los requerimientos del Estado o brindarles solo la información mínima necesaria. Al parecer, Roskomnadzor también se conformaba con hacer algunas amenazas ocasionales o labrar pequeñas multas a los «me gusta» de Facebook o Google.

El tenor de esta relación parece haber cambiado durante los últimos meses. En julio de 2021, el presidente Vladimir Putin promulgó una nueva ley que obligaba a las empresas extranjeras de redes sociales con más de 500 000 visitas diarias a abrir sucursales en Rusia y registrar entidades jurídicas locales. Las plataformas que no lo hicieran sufrirían posibles restricciones publicitarias, multas o bloqueos.

En agosto, un juzgado de Moscú impuso nuevas multas a Facebook, Twitter y WhatsApp que ascendían a casi 36 millones de rublos (más de 485 000 dólares) por reiteradas violaciones a los requerimientos contemplados en la ley de localización de datos de Rusia.

El 10 de septiembre, el Ministerio de Relaciones Exteriores ruso citó al embajador de Estados Unidos porque tenían «pruebas irrefutables» de la injerencia de Occidente en los asuntos internos del país y acusaron a las empresas de tecnología occidentales y estadounidenses de violar las leyes electorales rusas.

El 14 de septiembre, los juzgados rusos castigaron a las empresas de redes sociales con más multas por no borrar contenidos «ilícitos» no especificados. Según un informe de France 24, Facebook recibió una multa de 21 millones de rublos (288 000 dólares), Telegram fue multada con nueve millones de rublos (123 000 dólares), y Twitter con cinco millones de rublos (68 000 dólares). Se desconoce si las empresas acordarán pagar o impugnar esas multas. Ya antes, Roskomnadzor se había quejado de que las plataformas de redes sociales se rehusaban a eliminar contenidos relativos a las protestas masivas.

Los organismos censores estatales también amenazaron con aplicar sanciones administrativas y multas a Apple y Google por no eliminar la aplicación de «Voto Inteligente» de sus tiendas de aplicaciones.

En un acto de secuestro de patentes, una empresa rusa de manufactura de lana ubicada en Daguestán registró el nombre de «Voto Inteligente» en Rusia y solicitó al juzgado de Moscú que prohibiera que Google y Yandex, principal motor de búsqueda ruso, mostrara la frase «umnoe golosovanie» (‘voto inteligente’ en ruso) en sus resultados. Aunque al principio Yandex refutó la orden, después eliminó el sitio de Voto Inteligente y todos los sitios espejos de sus resultados de búsquedas luego de que estos enlaces fueron agregados a la lista negra estatal rusa.

El 15 de septiembre, GlobalCheck denunció que algunas de las mayores operadoras de telecomunicaciones de Rusia habían empezado a bloquear el acceso a Google Docs, y concluyó que probablemente el bloqueo estaba relacionado con los respaldos a candidatos de «Voto Inteligente» para las elecciones, que el equipo de Navalny publicó en la plataforma ese mismo día.

Ataque contra herramientas de elusión de censura

Los organismos censores rusos también redoblaron sus esfuerzos para atacar las tecnologías y proveedores de elusión de censura, cuyas herramientas se usan ampliamente para sortear los bloqueos impuestos por el Estado.

El 3 de septiembre, Rusia bloqueó seis importantes proveedores de redes virtuales privadas (VPN): NordVPN, ExpressVPN y WireGuard, un popular protocolo VPN. Antes habían bloqueado OperaVPN y VyprVPN. Roskomnadzor declaró que solo bloqueaba aquellos proveedores de VPN que facilitaban el acceso a sitios «ilegales» o prohibidos. El organismo censor también indicó que había sondeado a las empresas y agencias rusas que dependían de los protocolos VPN para su labor cotidiana a fin de crear una «lista blanca» de conexiones VPN que podían seguir operando en el país, «para evitar interrupciones de softwares o aplicaciones que no infringen las leyes rusas y usan VPN por razones técnicas».

El 8 de septiembre, Roskomnadzor envió advertencias oficiales a Apple, Google, Cloudflare y Cisco para exigirles que dejaran de dar asistencia a la aplicación móvil y al sitio de «Voto Inteligente» a través de herramientas tales como los servicios CDN y DNS que permiten eludir la censura estatal rusa. El regulador acusó a estas empresas de involucrarse en actividades potencialmente ilegales por ayudar a «organizaciones extremistas» que podrían ser parte de las «injerencias extranjeras» sobre las elecciones de Rusia. Hasta el 15 de septiembre, ninguna de las empresas había respondido a las demandas.

El mismo día, Ivan Zhdanov, director ejecutivo de Team Navalny, presentó pruebas de los ensayos de bloqueo de los censores rusos sobre los servidores DNS públicos de Google y Cloudflare en la red de las principales operadoras de telecomunicaciones rusas. El 13 de septiembre, los canales de Telegram que cubrían noticias de la RuNet [internet rusa] denunciaron que Rostelecom, proveedor estatal ruso, propuso bloquear masivamente los servidores DNS públicos de Google y Cloudflare. Los grupos expertos afirman que los ensayos probablemente eran un intento de evaluar las posibles consecuencias de un bloqueo masivo de herramientas de elusión de censura antes del fin de semana de las elecciones.

¿Qué sigue?

Según Cristo Grozev, periodista de investigación que trabaja para Bellingcat, las autoridades rusas tenían planeado implementar un sistema estatal de acreditación para proveedores de alojamiento durante los siguientes dos años. De aquellos proveedores acreditados se esperaría que dieran datos detallados sobre las actividades de sus usuarios con los servicios de seguridad del Estado, lo que socavaría aún más el anonimato en la red. Aquellos proveedores de alojamiento y sitios web que no quedaran acreditados podrían ver reducida su velocidad a apenas 24 kbps, asegura Grozev, lo que resultaría en una calidad más baja del acceso a cualquier parte de la internet global fuera de Rusia.

Vladislav Zdolnikov, experto en tecnologías de la información y creador de GlobalCheck, dijo al medio independiente MediaZona que es muy probable que estos nuevos actos de censura se extiendan más allá de las elecciones:

…политическое пространство в России было практически полностью зачищено, и «докручивание» цензуры в интернете было неизбежно.

Будет хуже, как мы все отлично понимаем.

…El espacio político de Rusia fue casi totalmente barrido, por eso, «apretar los tornillos» de la censura era virtualmente inevitable.

Se va a poner peor, como bien lo sabemos.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.