[1]Protesta en Bielorrusia, septiembre de 2020. Imagen de Jana Shnipelson, dominio público.
Este artículo [2] de Hleb Liapeika se publicó originalmente en Mediazona y una traducción apareció en Open Democracy el 25 de octubre de 2021. Se reproduce en el marco de una asociación para compartir contenidos y se ha editado para adaptarlo al estilo de Global Voices.
Desde las elecciones presidenciales de Bielorrusia, celebradas en agosto de 2020, el país se ha visto envuelto en una dura represión [3] de las fuerzas de seguridad.
Manifestantes, políticos, participantes de la sociedad civil y periodistas han sido detenidos y torturados [4], y muchos enfrentan penas de prisión. El Centro de Derechos Humanos de Viasna afirma que actualmente hay 812 presos políticos en el país.
En respuesta a esta oleada de violencia policial y detenciones arbitrarias, han surgido campañas de solidaridad en apoyo de quienes enfrentan prisión por cargos de motivación política. Sin embargo, con poca información sobre cómo es la vida dentro del sistema penitenciario bielorruso, la gente de fuera depende de las cartas, y a menudo de los dibujos, de los presos.
Mediazona, medio que informa sobre el derecho y la justicia, publicó recientemente [5] una serie de ilustraciones basadas en imágenes de bielorrusos que se han encontrado entre rejas durante el último año: activistas estudiantiles, manifestantes, opositores ideológicos al régimen de Aleksandr Lukashenko y artistas.
OpenDemocracy traduce y publica el artículo con permiso.
Nadzeya Kalach
Centro de detención previa al juicio número 1, Minsk
[6]Nadzeya Kalach. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Nadzeya Kalach integra el grupo bielorruso de folk-rock Irdorath, y está acusada de «alteración grave del orden público». Fue detenida en agosto de 2021.
En una carta a una amiga, Kalach dice que echa de menos algunas canciones (su amiga ha hecho una lista de reproducción de estas canciones [7] en YouTube), y cuenta cómo ella y sus compañeros de celda hicieron un pastel, y apagaron una cerilla encendida.
«Ahora no soy libre, pero sí lo que creamos y lanzamos al mundo. Mi voz sigue estando en nuestras canciones, al igual que nuestros instrumentos. La gente está escuchando estas canciones en algún lugar y esto les da alegría. Me encanta», escribe.
Siarhei Ramanau
Centro de detención previa al juicio KGB, Minsk
[8]Siarhei Ramanau. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Siarhei Ramanau está acusado de «cometer un acto terrorista» y «acciones ilegales relacionadas con sustancias inflamables». Es uno de los cuatro anarquistas a quienes el Servicio de Fronteras bielorruso calificó de «radicales con un impresionante arsenal» tras su detención en los primeros meses de 2021.
La correspondencia exterior rara vez llega a quienes están dentro del Centro de Detención Preventiva de la KGB, y Ramanau suele escribir cartas cortas. Según sus amigos, hacía bocetos de diseños de tatuajes, y retomó el dibujo a lápiz cuando estuvo encarcelado entre 2014 y 2019.
Dzmitry Dubousky
Centro de detención previa al juicio KGB, Minsk
[9]Dzmitry Dubousky. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
El anarquista Dzmitry Dubousky está acusado de lo mismo que Siarhei Ramanau. Dice que está mejorando sus habilidades de dibujo a lápiz mientras está en la cárcel, y envió a su hermana Yulia una carta y un dibujo con este mensaje:
Here’s a drawing that reflects the atmosphere in our cell :). Sometimes I get carried away with thoughts and reflections; this is how our days pass.
He aquí un dibujo que refleja el ambiente de nuestra celda :). A veces me dejo llevar por los pensamientos y las reflexiones; así es como pasan nuestros días.
Ales Minau
Centro de detención previa al juicio número 1, Minsk
[10]Ales Minau. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Ales Minau era profesor de lengua y literatura bielorrusa en Minsk hasta que fue detenido en agosto de 2021. Se le acusa de «alteración grave del orden público».
En una carta a su amiga Arina, Minau hizo un dibujo del mundo con la frase «¿Por qué hay tanta maldad en el mundo?», en ucraniano.
«A veces la tristeza trata de invadirme, pero he dejado de compadecerme o de quejarme de mi destino, y espero que ocurra lo peor», escribió.
Kim Samusenka
Centro de detención previa al juicio número 1, Minsk
[11]Kim Samusenka. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Kim Samusenka es una de las cuatro personas acusadas de piratear los sistemas informáticos del Comité Ejecutivo de la ciudad de Minsk, y está entre rejas desde noviembre de 2020. Su esposa Alesya recuerda que le pidió a Kim que «dibujara algo bonito, para tener un bonito recuerdo de él». Samusenka dibujó un gato, que en opinión de Alesya se parece a su esposo: «Es tan positivo como él, y con la misma visión irónica del mundo».
«Hay un otoño maravilloso al otro lado. También me gustaría pasear por hí con toda la familia», escribió en una carta, describiendo el placer del ejercicio diario en la cárcel.
Kasya Budzko
Centro de detención previa al juicio número 1, Minsk
[12]Kasya Budzko. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
La estudiante Kasya Budzko ha sido condenada a dos años y medio de prisión por «alterar gravemente el orden público» en relación con las protestas estudiantiles.
Ha enviado un dibujo surrealista a una amiga y cuenta algunas noticias en una carta: una nueva compañera de celda que habla bielorruso. Budzko, que habla ruso, dice que «podría, por fin, superar mi barrera interna y empezar a hablar bielorruso».
Maria Kalenik
Centro de detención previa al juicio número 3, Homyel
[13]Maria Kalenik. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Maria Kalenik, estudiante de la Academia Estatal de Artes de Bielorrusia, fue condenada a dos años y medio de prisión en el mismo caso que Kasya Budzko. Suele enviar cartas con dibujos de animales a sus amigos, y envió dibujos de un gato y una ardilla a sus amigos Hleb y Darina.
«Este gato está furioso porque lo han despertado», explicó. Kalenik dibujó una ardilla, dice Darina, solo porque es arte y debaten habitualmente sobre arte y diseño.
Ruslan Slutsky
Centro de detención previa al juicio número 2, Minsk
[14]Ruslan Slutsky. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Ruslan Slutsky fue detenido en enero de 2021. Según los investigadores, había dejado una serie de clavos caseros para los neumáticos en una carretera de la región de Vitsebsk antes de una concentración de autos en apoyo de las autoridades bielorrusas en noviembre de 2020.
En una carta a una amiga por correspondencia, Polina, Slutsky dice que empezó a dibujar dos meses después de ser encarcelado. «Y puedes ver los resultados en este dibujo», escribió. «Recibo cartas de amigos, y ahora tengo una más. Muchas gracias».
Ivan Krasousky
Centro de detención previa al juicio número 1, Minsk
[15]Ivan Krasousky. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
El anarquista Ivan Krasousky fue condenado a tres años de prisión abierta por participar en las protestas postelectorales de 2020-21. Tras recibir una postal de su amiga por correspondencia Darina, Krasousky le devolvió un dibujo de Bob Esponja. «¡Tu postal es INCREÍBLEMENTE genial! Nos ha alegrado mucho», escribió. La amiga por correspondencia de Krasousky dice que no recuerda lo que envió originalmente.
Ales Pushkin
Prisión Investigativa número 8, Zhodzina
[16]Ales Pushkin. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
El artista e intérprete Ales Pushkin fue detenido el 30 de marzo de 2021, y está acusado de «rehabilitar el nazismo». Ahora en prisión, envía a su amiga Valeria dibujos y borradores de un futuro libro.
El dibujo de Pushkin va acompañado de un poema: «En Hrodna, oí el grito de un cuervo/ El cuervo es la encarnación de Odín/ Soy descendiente de vikingos».
Anastasia Mirontsava
Colonia Prisión número 4, Homyel
[17]Anastasia Mirontsava. Ilustración de Maria Tolstova para Mediazona.
Anastasia Mirontsava fue condenada a dos años de prisión por participar en las protestas de agosto de 2020, acusada de «alterar gravemente el orden público» y «atacar a un agente de policía».
En una carta de agosto de 2021, Mirontsava habla de una mujer que conoció en la cárcel, que cuida las flores del jardín de la prisión y se molesta si alguien las toca. La mujer le contó que hace ocho años, cuando otra presa que cuidaba de las flores quedó en libertad, las flores empezaron a morir. La nueva conocida de Mirontsava tuvo que hacerse cargo de ellas, al principio sin querer.
Her eyes get so bright when she starts talking about the flowers! She says that they can feel everything. What you say to them, they communicate back. They send the same energy back. She says that the flowers are also imprisoned here.
Sus ojos brillan mucho cuando empieza a hablar de flores. Dice que pueden sentirlo todo. Lo que les dices, te lo devuelven. Te devuelven la misma energía. Dice que las flores también están presas aquí.
Mirontsava también incluyó una foto de un árbol plantado por la «primera mujer» en la prisión hace 15 años.
Ilustraciones de Maria Tolstova [18].