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Fuertes inundaciones dejan más de 30 000 desplazados en el norte de Sumatra, Indonesia

Categorías: Ambiente, Desastres, Medios ciudadanos, COVID-19

Una foto aérea de las inundaciones en la región de Aceh la semana pasada, tras días de fuertes aguaceros. A través de YouTube [1].

Tras una semana de intensas lluvias en la isla de Sumatra, Indonesia, más de 32 000 personas [2] han sido desplazadas y tres niños han muerto. Muchas más personas están en paradero desconocido [3] en toda la región. Las lluvias torrenciales se abatieron sobre la isla el 31 de diciembre de 2021, provocaron destructivas inundaciones en cuatro distritos. Desde entonces, las lluvias persistentes han dejado partes del norte de Sumatra bajo el agua.

En imágenes: Fuertes lluvias provocan inundaciones en el norte de Aceh, Indonesia

Los habitantes de las regiones más afectadas se han refugiado en mezquitas, refugios temporales y edificios públicos, ya que más de 11 000 viviendas han quedado sumergidas

En algunas zonas, las aguas han empezado a bajar, pero muchas regiones siguen sumergidas, por lo que las zonas son inaccesibles y dificulta las labores de ayuda y rescate. Las autoridades del norte de Aceh han declararon estado de emergencia hasta el 15 de enero.

Esta imagen aérea muestra edificios inundados, incluida una mezquita, durante las inundaciones en Lhoksukon, Aceh del Norte, 4 de enero de 2022. Inundación en Indonesia Catástrofe natural.
(Foto de ZIKRI MAULANA / AFP)

Aunque la preocupación inmediata de los funcionarios es rescatar a los heridos o perjudicados por las inundaciones, algunos están preocupados por lo que vendrá después.

Muhammad Hatta, que vive en una pequeña aldea cerca de la ciudad de Lhoksukon, provincia de Aceh, dijo a AlJazeera [2] que le preocupan especialmente las ramificaciones económicas, señaló: «La economía local ha quedado destruida». Añadió:

We are more worried about what happens after the floodwaters subside. All the rice paddies in the area are underwater. The farmers were just about to harvest them, but crops usually die after three or four days of being completely submerged. The farmers will have lost everything.

Nos preocupa más lo que ocurra después de que las aguas bajen. Todos los arrozales de la zona están bajo el agua. Los agricultores estaban a punto de cosecharlos, pero los cultivos suelen morir a los tres o cuatro días de estar completamente sumergidos. Los agricultores lo habrán perdido todo.

A los especialistas de salud también les preocupa que la inundación pueda agravar los problemas de salud y provocar un repunte del COVID-19, que la provincia de Aceh ha contenido en gran medida durante la mayor parte de la pandemia, con solo 38 000 casos registrados desde marzo de 2020, según recuentos oficiales [12].

La doctora Indra Buana, especialista pulmonar de Lhoksukon, declaró a AlJazeera [12]: «Las cifras de COVID-19 en Aceh del Norte han ido bajando y en las últimas semanas he tenido menos pacientes que vienen a verme con síntomas graves».

Sin embargo, mientras las personas se agolpan en los refugios de emergencia y en las mezquitas, a Buana le preocupa que el virus pueda propagarse. Aceh es una de las regiones menos vacunadas de Indonesia, solo el 22 % [13] de la población tenía doble vacuna contra el COVID-19 al 2 de enero: «Nos preocupa que haya un aumento de casos de COVID-19. Podría ser muy peligroso si alguien de fuera de la zona que tenga COVID-19 visita los refugios y contagia a todos sin darse cuenta».

Aparte del COVID, las inundaciones conllevan su propia serie de riesgos para la salud. La ingestión de agua contaminada puede provocar inflamación pulmonar, y el clima húmedo y la humedad pueden agravar el asma o provocar infecciones de las vías respiratorias superiores.

Aunque las inundaciones se producen todos los años durante la estación lluviosa en Indonesia (entre noviembre y marzo), el país ha estado lidiando con tormentas inusualmente fuertes desde noviembre de 2021, estimuladas por La Niña [14]. Este fenómeno meteorológico se produce cada ciertos años, y provoca que las temperaturas del agua en el océano Pacífico sean más bajas de lo normal y afecta los patrones meteorológicos globales. En Indonesia y el Pacífico, esto da lugar a un aumento de los ciclones y de las precipitaciones, lo que puede provocar desprendimientos de tierra, inundaciones, corrimientos de tierra, etc.

Las inundaciones han afectado al menos a 14 distritos de la provincia de Aceh, Indonesia. Foto de Twitter vía @theguzel_ [15]

En octubre de 2021, Dwikorita Karnawati, jefe de la Agencia de Meteorología, Climatología y Geofísica (BMKG), agencia nacional de Indonesia para gestión de desastres, advirtió que el fenómeno de La Niña se estaba desarrollando e instó [16] a los distritos a prepararse para eventos climáticos más severos, diciendo: «Los registros históricos muestran que La Niña en 2020 causó un aumento en la acumulación de lluvias mensuales en Indonesia en un 20 % a 70 % de las condiciones normales.»

Pero las inundaciones no pueden atribuirse únicamente a La Niña. Los ecologistas afirman que la crisis climática y la deforestación también contribuyen a fenómenos meteorológicos más extremos. La ONG ambiental indonesia Wahli declaró al Jakarta Post [17] que la destrucción se ha agravado porque se ha talado gran parte de los bosques de Sumatra para hacer enormes plantaciones de aceite de palma. Sin árboles ni arbustos que actúen como barreras naturales, las inundaciones pueden ser más mortíferas y destructivas.

Ananda Justisiani, portavoz del equipo de ayuda de emergencia Aksi Cepat Tanggap en Aceh, declaró a Arab News [18]:

Kali ini, banjir terjadi pada skala yang lebih besar lagi. Keadaan sangat teruk sekali kerana sungai-sungai melimpah-ruah dan terdapat hujan yang lebih lebat. Oleh itu, paras air tidak turun.

Esta vez, las inundaciones ocurrieron en una escala mayor. La situación es muy mala porque los ríos están desbordados y llueve más. Por lo tanto, el nivel del agua no baja..

La ministra de Asuntos Sociales [19], Tri Rismaharini (Risma), visitó a los damnificados el 3 de enero y colaboró en la entrega de ayuda y suministros. Muchos de los damnificados pidieron al Gobierno que reconstruyera sus casas destruidas, a lo que Risma respondió en una declaración escrita: «Animamos al Gobierno local a revisar inmediatamente las peticiones de los habitantes». Risma también tiene previsto consultar con expertos para determinar si las viviendas originales son seguras o si les deben trasladar.

Para ayudar a combatir futuras inundaciones, el Gobierno está construyendo la presa de Keureuto, que bloqueará el río Krueng Keureuto y algunos de sus afluentes. Se espera que la presa esté terminada en 2023 y puede ayudar a disminuir las inundaciones anuales.

Sumatra no es la única isla que enfrenta dificultades debido a los fenómenos meteorológicos extremos de este año. Partes de Java y Papúa [20] también se han visto inundadas a comienzos de enero.