Los refugiados afganos en Indonesia reunidos para protestar por la inacción del ACNUR. Los refugiados piden la ciudadanía indonesia o el reasentamiento en otro lugar.. Imagen vía YouTube [1].
Aviso de contenido: Este artículo contiene menciones a la depresión, suicidio y violencia policial..
Una protesta pacífica de refugiados afganos fue violentamente reprimida por la ¨Policía el 17 de enero en Pekanbaru, ciudad indonesia en la isla de Sumatra. Los refugiados intentaban llamar la atención internacional a sus años de desplazamiento, maltratos y descuido del Gobierno indonesio y de la comunidad internacional. La Policía dispersó la protesta con golpes a los asistentes con varas. Se informa que varios asistentes quedaron heridos.
La protesta surgió en el exterior de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) porque un integrante de de la comunidad de refugiados afganos se suicidó el 16 de enero. Con este caso ya eran 15 personas en suicidarse en la comunidad. Veronica Koman, representante de Amnistía Internacional tuiteó un video del enfrentamiento [aviso de contenido: algunos espectadores pueden verse afectados por este video]:
Dozens of Afghan refugees were subjected to violence during forced dispersal by Indonesian police today (17/1/22) in Pekanbaru.
They were protesting in front of the @UNHCRIndo [2] office following the suicide of an Afghan refugee yesterday.
They are all desperate for resettlement. pic.twitter.com/NiLhZctoAR [3]
— Veronica Koman 許愛茜 (@VeronicaKoman) January 17, 2022 [4]
Docenas de refugiados afganos sometidos a violencia durante la dispersión forzada por parte de la Policía indonesia hoy (17 de enero de 2022) en Pekanbaru.
Protestaban delante de la oficina de ACNUR luego del suicidio de un refugiados afganos ayer.
Todos están desesperados por reasentamiento.
Algunos refugiados afganos han estado viviendo en un limbo en Indonesia por más de diez años, a la espera de recibir la ciudadanía del Gobierno indonesio o la aprobación y documentos para ir a otro país.
Mohammad Juma Mohseni se vio obligado a salir de Afganistán en 2011 y ha vivido en Indonesia desde hace casi diez años. Le dijo a Gandhara News, rama de Radio Free Europe, «[Quince] personas se han suicidado y se ha impedido que diez se suiciden”. Agregó «ni Indonesia ni ACNUR ha tenido un mensaje positivo para nosotros».
Indonesia no es parte de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 ni el protocolo de 1967, que tenía el objetivo de eliminar restricciones sobre quién puede ser considerado un refugiado. No tiene leyes de asilo y delega [5] toda la supervisión a la oficina de ACNUR y la Organización Internacional para la Migración (IOM). Hay más de 13 700 refugiados afganos en Indonesia que han estado ahí desde hace más de diez años.
Según SUAKA [6], organización de la sociedad civil indonesia para derechos de los refugiados, a los solicitantes de asilo en Indonesia no se les permite trabajar, recibir beneficios sociales del Gobierno de Indonesia, tener auto o motocicleta, viajar fuera de los límites de la ciudad ni ir a la universidad.
IOM cubre costos de vida básicos mientras esperan repatriación o reasentamiento.
Descuido internacional y tragedia
Algunos refugiados afganos en Indonesia llevan meses acampando frente al edificio del ACNUR. Captura de pantalla cortesía de YouTube [1].
El incidente del lunes 17 de enero es el último de una serie de desgarradores incidentes ocurridos en los últimos meses, en que los refugiados afganos intentan desesperadamente llamar la atención sobre su difícil situación en Indonesia. Algunos refugiados han acampado continuamente frente a las oficinas de ACNUR a la espera de noticias sobre su reasentamiento y tratando de dar a conocer su situación.
Un grupo de refugiados afganos organizó una protesta de 24 horas ante la oficina de la OIM en Medanon el 30 de noviembre de 2021. Uno de los asistentes, Ahmad Shah, de 22 años, se prendió fuego [7] frente al edificio. Estaba en Indonesia desde 2016 a la espera de un reasentamiento permanente, separado de su familia y seres queridos, y sin poder salir del país.
Sufrió quemaduras de tercer grado y, al parecer, fue trasladado a un hospital privado cercano hasta que fue trasladado a uno público el mismo día.
El portavoz de ACNUR en Indonesia, Dwi Prafitria Juma, dijo a The Jakarta Post [8] que la agencia estaba «profundamente preocupada» e investigando el incidente.
Al menos 24 refugiados afganos se habían prendido fuego anteriormente. Seis sobrevivieron.
«Esta es la séptima persona que salvamos, que estaba experimentando estrés excesivo y luchando contra la depresión por haber vivido en el limbo durante siete años», dijo Juma en una conferencia de prensa frente a la oficina del ACNUR.
En los últimos meses, numerosos refugiados [9] de Indonesia se han cosido la boca como forma de desobediencia civil y protesta.
En entrevista con la agencia de noticias Voice of America, el fundador de Solidaridad Indonesia para Refugados (SIR), Ali Yusef, explicó que los refugiados de Indonesia se sienten obligados a tomar medidas tan extremas porque se sienten silenciados y no que los escuchan. Se preocupa por su salud mental e insta a los representantes de ACNUR a tomar medidas inmediatas.
The facts on the ground are that the UNHCR is less responsive to the fate of refugees in Indonesia. The proof is that they are not able to communicate with UNHCR when they want. … Don't let their delay mean the refugees who are sewing their mouths can injure themselves or even take their own lives. In the name of humanity UNHCR, please meet them. Explain that UNHCR is looking for a solution for them.
Los hechos demuestran que ACNUR es menos receptivo a la suerte de los refugiados en Indonesia. La prueba es que no pueden comunicarse con ACNUR cuando quieren. … Que su retraso no implique que los refugiados que se cosen la boca puedan lesionarse o incluso quitarse la vida. En nombre de la humanidad, ACNUR, por favor, reúnete con ellos. Explícales que ACNUR está buscando una solución para ellos.
Y añadió: «El mundo juzgará que Indonesia es indiferente a los ciudadanos internacionales».
Tanto ACNUR como OIM son responsables de gestionar a los refugiados en Indonesia hasta que puedan ser trasladados a otro lugar más permanente. Ya se les ha acusado [10] de descuidar y gestionar mal los asuntos de los refugiados.
Antes de que los talibanes llegaran al poder en agosto de 2021, Indonesia albergaba el cuarto mayor número [11] de refugiados afganos del mundo, por detrás de Irán, Pakistán e India. La mayoría de estos refugiados tenían la intención de estar en Indonesia solo temporalmente hasta que pudieran llegar a Australia. Sin embargo, en 2013 Australia cerró sus fronteras a los refugiados y solicitantes de asilo. Muchos quedaron apátridas y varados en Indonesia sin recurso alguno.
La situación ha empeorado desde la caída de Kabul en agosto de 2021. Los expertos afirman [12] que la situación en Afganistán probablemente está exasperando el sentir de impotencia con los que ya lidian muchos refugiados afganos. Además, ha acabado con sus escasas esperanzas de poder regresar a su país de origen y ha hecho aún más improbable que se les pueda realojar, por la afluencia añadida de nuevos refugiados que han huido de los talibanes.
Además, muchos países han reducido el número de refugiados que aceptan en los últimos años, y durante la pandemia del COVID-19, el número de refugiados reasentados ha alcanzado el nivel más bajo de los últimos 20 años [10], según ACNUR. La organización descubrió que 160 países habían cerrado sus fronteras en algún momento durante la pandemia en 2020, y que 99 estados no hacían excepciones para quienes buscaban protección.
Como resultado, a muchos refugiados les resulta imposible reubicarse en un tercer país o alcanzar la estabilidad.
Durante años, las organizaciones de defensa de los refugiados han pedido [13] que se mejoren las condiciones en Indonesia, aunque esos llamados no han tenido mucho impulso. Mientras tanto, los ciudadanos hacen lo que pueden y usan la etiqueta #HelpRefugees_Indonesia [ayuda a los refugiados, Indonesia] en Twitter y en las redes sociales, como un llamado para apoyar a los refugiados.
Freedom and a peaceful life are the right of refugees in Indonesia#HelpRefugees_Indonesia [14] pic.twitter.com/L3JV8onO5t [15]
— Nabizada Habib (@NabizadaHabib) January 15, 2022 [16]
Diez años son suficientes.
Queremos reasentamiento.
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Libertad y vida pacífica son el derecho de los refugiados en Indonesia.
En una petición en change.org [17], en la que se habla de la situación de los refugiados afganos en Indonesia, Musa Zafar escribió
Their most basic fundamental rights, which are emphasized in international instruments such as the Universal Declaration of Human Rights, are systematically infringed on a daily basis. Their freedom of movement, education, employment, and political and social rights have been ignored. These people have been forgotten and the world has turned a blind eye to their crisis.
Sus derechos fundamentales más básicos, los que resaltan instrumentos internacionales como la Declaración Universal de los Derechos Humanos, se infringen sistemáticamente a diario. Se ha ignorado su libertad de movimiento, educación, empleo y derechos políticos y sociales. Estas personas han sido olvidadas y el mundo ha hecho de la vista gorda ante su crisis.