Peng Shuai en 2017. Fotos: JC on Flickr [1].(CC BY-SA 2.0 [2]).
Las historias personales de la tenista Peng Shuai [3] y del profesor Gulnar Obul [4] son diferentes, pero el curso de sus historias, especialmente los dramáticos cambios en sus declaraciones tras reaparecer en público, son bastante similares. La semejanza demuestra que los ciudadanos chinos pueden pasar misteriosamente de cautivos a actores.
En noviembre de 2021, Peng Shuai desapareció [5] durante 15 días tras una publicación [6] «negativa» sobre Zhang Gaoli, ex viceprimer ministro de China. Según las capturas de pantalla de esa puboicacióin, la campeona de tenis acusó a Zhang de presionarla para tener relaciones sexuales en su casa hace tres años.
En septiembre de 2018, Gulnar Obul, profesora de la Universidad de Kashgar, en Sinkiang, desapareció [7] y no se le vio dos meses en el sitio web de la universidad tras una entrevista [8] negativa con la revista del Instituto de Investigación Económica de Pekín, en la que calificaba de «sobredimensionada» la campaña de extremismo antirreligioso de China en la región uigur, y afirmaba que «Es… imposible meter todos los problemas [de la región autónoma uigur de Sinkiang] en una gran cesta de fuerzas religiosas extremas».
A medida que se intensificaba la represión contra los uigures se la calificó de funcionaria uigur «de dos caras» y se la acusó de apoyar públicamente al gobierno del Partido Comunista en la región mientras se oponía en secreto a las políticas del Estado.
Antes de su desaparición, Peng Shuai dijo [9]: «… no importa si me golpeo con un huevo o soy una polilla que vuela hacia la llama; estoy diciendo la verdad sobre lo que pasó entre nosotros».
Gulnar Obul también predijo [10] los posibles castigos que podría encontrar en el futuro: «Resistirse a las ideas con las armas, no con las ideas, es un signo de debilidad y de salvajismo». Como predijo, la llevaron [11] a un campo con una capucha negra sobre la cabeza en septiembre de 2018. Radio Free Asia investigó el destino de Gulnar, y un funcionario universitario [12] dijo que era «una de los cuatro profesores detenidos hace tres semanas [que fueron] acusados de tener dos caras».
Gulnar Obul en Kashgar, en foto [12] sin fecha de Radio Free Asia, usada con autorización.
En una rueda de prensa [13] del 1 de febrero de 2021 por el Gobierno regional de la Región Autónoma Uigur de Sinkiang, Gulnar Obul declaró que no había estado en cautiva y que los separatistas estaban fabricando rumores para chantajear a China.
Al igual que Gulnar Obul reapareció [14] en público en la televisión y desmintió las afirmaciones sobre su detención, Peng Shuai apareció repentinamente en la televisión después de que los medios de internacionales descubrieron su desaparición y la Asociación de Tenis Femenino reaccionó [15].
Peng Shuai también cambió sus palabras cuando habló con Lianhe Zaabao [16], y afirmó que su publicación en las redes sociales era un «malentendido [17]» y que «Se trata de la privacidad personal, [y] no debe haber ninguna interpretación distorsionada».
Está claro que la historia de Peng Shuai va en la misma dirección que la de Gulnar Obul. El mundo no debería sorprenderse si Peng Shuai lleva la antorcha en primera línea en la ceremonia previa a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín, ya que, tras el regreso de Gulnar Obul, habló [18] en la XLVII sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos y vendió la línea patrocinada por Pekín de que los uigures de Sinkiang son los «musulmanes más felices del mundo [19]«.
Peng Shuai niega [20] ahora la agresión sexual que había afirmado anteriormente, y declaró: «En cuanto a las recientes noticias publicadas en el sitio web oficial de la WTA, no he confirmado ni verificado el contenido que se publicó sin mi consentimiento». No debería sorprender que se llame a las personas y organizaciones que se preocupan por Peng Shuai «fuerzas hostiles occidentales que están celosas del desarrollo de China», porque esta situación es similar a la que se produjo cuando Gulnar Obul habló en varias conferencias, incluso en el escenario de Naciones Unidas en junio de 2021, cuando declaró [21] que se necesitan urgentemente «centros de formación profesional» para «erradicar el extremismo religioso porque las fuerzas separatistas de ultramar como la WUC están esparciendo [las] semillas del terrorismo». A pesar de su entrevista con el Instituto de Investigación Económica, Gulnar Obul ha dicho [8] abiertamente que «los propios uigures lanzaron una campaña contra el extremismo religioso hace 70 años y tuvieron éxito. No necesitan la intervención del Estado».
El curso de las historias muestra que el Gulnar Obul de hoy es el Peng Shuai de mañana; la realidad [21] de Gulnar Obul se está convirtiendo rápidamente en la realidad de Peng Shuai. Es posible que Peng Shuai ascienda a un cargo oficial en un futuro próximo, como Gulnar fue ascendido a vicepresidente de la Asociación de Ciencia y Tecnología de Xinjiang tras ser liberado.
Pero ambos ya no son la tenista ni el profesor en el escenario; son meros actores (políticos). Quien habla [22] no es Peng Shuai, ni Gulnar Obul, sino el sistema chino. El mensaje suena así: «No pongas en duda nuestra legitimidad; seguiremos y debemos seguir siempre a hombros de estos inocentes».