- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

Secuestran, asesinan y abandonan a trinitense, ciudadanos están frustrados y temerosos

Categorías: Caribe, Trinidad y Tobago, Derecho, Derechos humanos, Etnicidad y raza, Juventud, Medios ciudadanos, Mujer y género
[1]

Vista desde una casa de campo en las colinas boscosas de los Altos de Aripo, zona que algunos temen que se esté convirtiendo en un «vertedero» de cadáveres de mujeres asesinadas en Trinidad. Photo [1] de Georgia Popplewell (CC BY-NC-ND 2.0 [2]).

Casi un año después [3] de que se encontrara [4] el cadáver de Andrea Bharatt, de 23 años, en los Altos de Aripo, zona muy boscosa del norte de Trinidad, otra joven, Keithisha Cudjoe, fue hallada muerta [5] en la misma zona.

Cudjoe llevaba desaparecida desde el 24 de enero, después de haber viajado, al parecer [6], en un auto que amigos suyos habían preparado para llevarla a casa, circunstancias inquietantemente similares a cómo Bharatt y otra joven, Ashanti Riley [4], habían sido secuestradas. Sin embargo, en el caso de Cudjoe, no se denunció [7] la desaparición a la Policía hasta unos días después [8].

La esperanza se ha roto: Se confirma la muerte de Keithisha Cudjoe
Aviso de alerta: Este artículo contiene información sensible. Los detalles incluyen la sospecha de asesinato de una mujer. La información puede ser potencialmente perturbadora y puede desencadenar sentimientos o recuerdos negativos.
—————-
Les seguimos fallando a las jóvenes de este país en todos los niveles, y luego les decimos que es su culpa, que podían haber hecho más. Estoy cansado de perder jóvenes por elementos que nunca tuvimos controlados: Se confirma la muerte de Keithisha Cudjoe.

Como viene siendo habitual, la foto de Cudjoe se difundió en las redes sociales una vez que se denunció su desaparición, aunque algunos usuarios de redes sociales lamentaron [11] que el clamor no fuera tan grande como cuando desapareció Bharatt:

Estoy viendo los escasos comentarios sobre el asesinato de Keithisha Cudjoe y no me sorprende ni me decepciona. Realmente somos un triste Estado de empatía selectiva y de indignación de actuación.

En Twitter, un usuario se dio cuenta de la flagrante diferencia en la narrativa de los medios:

¿Es que las mujeres negras son desechables? Porque, ¿dónde está la indignación? Hasta ahora la gente sigue hablando de Andrea… incluso en el artículo sobre esta chica… ¿qué pasó con Ashanti? ¿Qué pasó con KEITHISHA? No estoy tratando de disminuir el dolor de nadie, pero el patrón es muy desconcertante,
—————
Prestemos también atención a cómo los periodistas escriben sus historias en comparación.
:)

Por ejemplo, Keithisha Cudjoe era una mujer desaparecida, mientras que Andrea Bharatt era una empleada judicial…

Puede parecer que no es nada, pero vuelve a verlo y lee los artículos de nuevo.

Es un fenómeno que la escritora Shivanee Ramlochan, que expresa con frecuencia sus opiniones [15] sobre la plaga de la violencia de género [4] en Trinidad y Tobago, examinó [16] recientemente.

Sobre el asesinato de Cudjoe, Ramlochan se lamentó [17]:

Keithisha Cudjoe should still be with us.

Should never have been forced into a position of bodily peril. Should never have been endangered, alone and terrified and at the mercy of someone, or someones, who would violate her.

But since she was. Since she is now dead.

We ought to have seen more of her: her face, description and relevant particulars, plastered over social media, in the news, on telephone poles and billboards, on WhatsApp statuses and in the public prayers recited at the beginnings of Mass, mosque and mandir services. #FindKeithisha [18] should have been trending. Every one of us ought to have known, even if every one of us might not have cared. And you know many of us didn't and don't care.

Keithisha Cudjoe debería seguir con nosotros.

Nunca debería haber sido forzada a una posición de peligro corporal. Nunca debería haber estado en peligro, sola y aterrorizada y a merced de alguien, o algunos, que la violaran.

Pero así fue. Y ahora está muerta.

Deberíamos haber visto más de ella: su cara, su descripción y sus datos más relevantes, expuestos en las redes sociales, en las noticias, en los postes de teléfono y en las vallas publicitarias, en los estados de WhatsApp y en las oraciones públicas recitadas al comienzo de los servicios de misa, mezquita y mandir. #FindKeithisha [18] [encuentren a Keithisha] debería haber sido tendencia. Cada uno debería haberlo sabido, incluso si a nosotros no nos hubiera importado. Y sabes que a muchos no nos importó ni nos importa.

Continuó:

Perhaps it is no one's fault that the public campaign to find Keithisha alive was barely recognizable. And perhaps it is no one's fault that Keithisha is referred to in the press, not primarily by her occupation, but by the fact that she was a '21 year-old mother of one’. Maybe there is no one to blame but the killer, or killers. But now that she is dead, which she should never have been, I want us all to be interested in knowing more. […]

If every one of us cared about the kidnapping and murder of Andrea Bharatt, and we ought to have, then we should care as emphatically about Keithisha Cudjoe. We should care that Keithisha's family already believes this killing will not be solved. We should care that the Heights of Aripo, verdant and dimly lit, is turning into a cradle for the smashed-in skulls of our women.

No matter their level of education. No matter the colour of their skin or the accessories they used to adorn their hair. No matter their sexual status, the number of men or other partners they took to their beds. No matter their citizenship. No matter their religion or accent or the type of their nails. No matter if they behaved in ways the Archbishop, Maha Sahib or your pastor might disdain.

Tal vez no sea culpa de nadie que la campaña pública para encontrar a Keithisha con vida casi no fuera reconocible. Y tal vez no sea culpa de nadie que la prensa se refiera a Keithisha, no principalmente por su ocupación, sino porque era una «madre de 21 años de edad». Tal vez no haya que culpar a nadie más que al asesino, o a los asesinos. Pero ahora que está muerta, lo que nunca debió pasar, quiero que todos nos interesemos por saber más. […]

Si cada uno se preocupó por el secuestro y asesinato de Andrea Bharatt, y deberíamos habernos preocupado, entonces deberíamos preocuparnos con la misma intensidad por Keithisha Cudjoe. Debería importarnos que la familia de Keithisha ya crea que este asesinato no se resolverá. Debería importarnos que los Altos de Aripo, verdes y poco iluminados, se estén convirtiendo en una cuna para los cráneos aplastados de nuestras mujeres.

No importa su nivel educativo. No importa el color de su piel ni los accesorios con los que adornen su cabello. No importa su condición sexual, el número de hombres u otras parejas que hayan llevado a sus camas. No importa su nacionalidad. No importaba su religión ni su acento ni el tipo de uñas. No importaba si se comportaban de forma que el arzobispo, el maha sahib o su pastor pudieran despreciar.

En Twitter, el usuario Marcus Sanaton observó:

He estado pensando en Keithisha Cudjoe estos últimos días. ¿Recuerdas las vigilias con velas y las protestas? Han cambiado muchas cosas, ¿verdad? No nos escuchan y las mujeres siguen muriendo

El Movimiento Luz de Velas [20], que había sido muy activo tras la desaparición y el asesinato de Bharatt, emitió una declaración [3] sobre la muerte de Cudjoe, y renovó su llamado [21] al Gobierno para que haga más por proteger a las mujeres del país, incluido el aerosol de pimienta y las armas de fuego con licencia estén «más disponibles».

Desde el asesinato de Bharatt, el parlamento ha aprobado la Ley de Pruebas [22], que abre el camino a técnicas más avanzadas de obtención de pruebas en los juicios penales, y aprobó el uso de aerosol de pimienta [23] para fines de defensa personal, al que se podrá acceder [24] mediante un sistema de permisos. Sin embargo, no se han abordado otras medidas urgentes, como la legislación de los vehículos de alquiler privado [25].

En Facebook, Dionne Ligoure fue una de las muchas personas que expresaron [26] su frustración:

I am fed up of crime…of women being brutalized, ensnared, murdered like prey almost daily!
WHY ISN”T THERE SOME KIND OF POLICE POST IN GUANAPO OR ARIPO WHEN IT IS CLEAR THAT THIS AREA IS A DUMPING GROUND FOR KILLERS!!
How many more women must die? How many more children must be motherless? How many more families must be left to grieve?

¡Estoy harta de la delincuencia… de que las mujeres sean maltratadas, atrapadas, asesinadas como presas casi a diario!
¿POR QUÉ NO HAY ALGÚN PUESTO POLICIAL EN GUANAPO O ARIPO CUANDO ESTÁ CLARO QUE ESTA ZONA ES UN VERTEDERO DE ASESINOS?
¿Cuántas mujeres más deben morir? ¿Cuántos niños más deben quedar sin madre? ¿Cuántas familias más deben quedar en duelo?

El más profundo pésame a la familia y amigos de Keithisha Cudjoe.
🕊
Vuela alto, ángel.
🙏🏽
¿Cuándo estarán seguras las niñas y mujeres? Caminamos con dianas en la espalda en un estado de miedo constante. Siento que hayamos vuelto a fallar.
😢

Renee Cummings, trinitense que vive en Nueva York, agregó [28]:

I’ve said it repeatedly and will say it again, what’s missing from T&T’s response to homicide and violent crime is IMAGINATION, INNOVATIVE THINKING, CRITICAL THINKING, CRITICAL DATA ANALYSIS and DATA INTERPRETATION, INFORMED EVIDENCE BASED DECISION-MAKING and DATA-DRIVEN LEADERSHIP with a comprehensive understanding of CRITICAL CRIMINOLOGY. We have some excellent police officers and solid police leaders but their playbook needs a real time upgrade.

Lo he dicho en repetidas ocasiones y lo volveré a decir, lo que falta en la respuesta de Trinidad y Tobago a los homicidios y los delitos violentos es la IMAGINACIÓN, el PENSAMIENTO INNOVADOR, el PENSAMIENTO CRÍTICO, el ANÁLISIS CRÍTICO DE LOS DATOS y la INTERPRETACIÓN DE LOS DATOS, la TOMA DE DECISIONES BASADA EN LA EVIDENCIA Y EL LIDERAZGO CONTINUADO CON LOS DATOS, con una amplia comprensión de la CRIMINOLOGÍA CRÍTICA. Contamos con excelentes agentes de policía y sólidos líderes policiales, pero su libro de jugadas necesita una actualización en tiempo real.

Mientras los editoriales de los periódicos abogan [29] por un mayor compromiso en la lucha contra el crimen y los ciudadanos rezan [30] y esperan que se haga justicia [31], Shivanee Ramlochan recomendó [17] algo más, acción [32]:

[S]tand in that gap of ignorance and fear that says some girls are inherently good, and others are whores. That some girls, even if no one wants to say it out loud, deserve to be saved more than others. Stand in that gap and use your advocacy and your art, your politics and your time, to teach at least one person how wrong it is to think this way about black women and girls, how abjectly wrong it is to think some women are more killable, and that's just how the world works. It isn't. And listen. If it's too soon for you to teach, or if it feels all too much, because it is, then grieve. Take the time to grieve.

Keithisha Cudjoe.

I am so sorry that we know your name because you're gone.

Se trata de eliminar esa brecha de ignorancia y miedo que dice que algunas chicas son intrínsecamente buenas y otras son putas. Que algunas niñas, aunque nadie quiera decirlo en voz alta, merecen ser salvadas más que otras. Ponte en esa brecha y usa tu defensa y tu arte, tu política y tu tiempo, para enseñar al menos a una persona lo equivocado que es pensar así sobre las mujeres y las niñas negras, lo terriblemente equivocado que es pensar que algunas mujeres son más «matables», y que así es como funciona el mundo. No es así. Y escucha. Si es demasiado pronto para que enseñes, o si sientes que es demasiado, porque lo es, entonces relájate. Tómate el tiempo para llorar.

Keithisha Cudjoe.

Siento mucho que sepamos tu nombre porque te has ido.