Mapa de libertad de prensa de 2022 de Reporteros sin Fronteras

Hong Kong ha registrado este año la mayor caída en el Índice Internacional de Libertad de Prensa. En 2022m la ciudad, que en 2921 ocupó el puesto 80, descendió 68 puestos, hasta el 148, entre 180 países.

Reporteros sin Fronteras, organización internacional de vigilancia, lleva 20 años supervisando la libertad de prensa en todo el mundo a través de su índice. El índice de 2022 se publicó el 3 de mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa.

En 2002, Hong Kong ocupaba el puesto 18, lo que la convertía en un faro de la prensa libre en el mundo, especialmente en Asia, pero la libertad de prensa se ha erosionado considerablemente. En 2021, tras la promulgación de la ley de seguridad nacional, bajó al puesto 80, y este año ha vuelto a caer hasta el 148, ya que la policía de seguridad de la ciudad obligó a cerrar dos importantes medios de comunicación independientes, Apple Daily y Stand News.

#HongKong has plummeted down an international press freedom chart as authorities have wielded a draconian new security law to silence critical news outlets and jail journalists, a new @RSF_inter report said on Tuesday. In full: https://t.co/JZNmkgKhIk #pressfreedomday #WPFD pic.twitter.com/P8M8gZWRaK

— Hong Kong Free Press HKFP (@hkfp) May 3, 2022

Hong Kong ha descendido 68 puestos, y se sitúa en el puesto 148 del índice anual de libertad de prensa de Reporteros sin Fronteras 2022.
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Hong Kong ha caído en un índice internacional de libertad de prensa, ya que las autoridades han aplicado una draconiana ley de seguridad para silenciar a los medios críticos y encarcelar a los periodistas, según nuevo informe de Reporteros sin Fronteras, publicado el martes. Léelo completo.

En 20 años, la libertad de prensa en Hong Kong ha caído de la segunda mejor categoría «Satisfactorio» a «Problemático» y este año a la segunda peor categoría «Situación difícil», y por primera vez por debajo de Filipinas (147) y Singapur (139).

RSF ha adoptado una nueva metodología en su índice de 2022, que define la libertad de prensa como

The effective possibility for journalists, as individuals and as groups, to select, produce and disseminate news and information in public interest, independent from political, economic, legal and social interference, and without threats to their physical and mental safety.

La posibilidad efectiva de que los periodistas, como personas y como grupos, seleccionen, produzcan y difundan noticias e información de interés público, independientemente de las interferencias políticas, económicas, legales y sociales, y sin amenazas a su seguridad física y mental.

Los cinco nuevos indicadores son: contexto político, marco jurídico, contexto económico, contexto sociocultural y seguridad.

La clasificación de Hong Kong se ha visto adectada por los indicadores legislativos y de seguridad, tal como muestra el informe de Reporteros sin Fronteras sobre la región. El organismo de control internacional describe la ley de seguridad nacional como:

A pretext to gag independent voices in the name of the fight against “terrorism”, “secession”, “subversion”, and “collusion with foreign forces.»

Un pretexto para amordazar las voces independientes en nombre de la lucha contra el «terrorismo», la «secesión», la «subversión» y la «connivencia con fuerzas extranjeras».

Además de la ley de seguridad nacional, la antigua ley de sedición se ha usado como herramienta legal para cerrar Stand News.

En cuanto al indicador de seguridad, Reporteros sin Fronteras señaló:

During the 2019 protests, hundreds of journalists were victims of police violence and were also detained and indicted. A new wave of arrests started in 2021, when a dozen journalists were detained for national security crimes.

Durante las protestas de 2019, cientos de periodistas fueron víctimas de la violencia policial y también fueron detenidos e inculpados. En 2021 se inició una nueva oleada de detenciones, en la que se detuvo a una docena de periodistas por delitos contra la seguridad nacional.

Según el barómetro de Reporteros sin Fronteras, entre los 480 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación actualmente encarcelados, 18 son de Hong Kong. Ocho periodistas y miembros de la dirección de Apple Daily han sido detenidos, y siete han sido acusados de combinarse con fuerzas extranjeras en virtud de la ley de seguridad nacional. Entre ellos está el fundador del medio, Jimmy Lai. En cuanto a Stand News, dos exdirectores han sido acusados de conspiración para publicar material sedicioso.

El informe sobre el índice 2022 de Reporteros sin Fronteras señala que la libertad de prensa se ha deteriorado drásticamente en la región de Asia-Pacífico, que alberga a más de la mitad de la población mundial, como consecuencia de los conflictos militares y de los sistemas políticos autocráticos que facultan a los Gobiernos para tomar el control absoluto de la información.

Entre los 32 países de Asia-Pacífico, ocho se encuentran en la categoría de «Situación muy grave», y Corea del Norte (180) el peor clasificado a nivel mundial, seguido de Myanmar (176), ya que el golpe militar de 2021 ha provocado «una represión extremadamente dura contra los periodistas». China (175), Vietnam (174), Bangladesh (162), Laos (161) y Pakistán (157) siguen manteniendo un firme control sobre los medios y el flujo de información. Afganistán (156) también experimentó una fuerte caída, ya que reporteros y medios se convirtieron en objeto de intimidación después de que los talibanes tomaron el poder en agosto de 2021.

El informe de Reporteros sin Fronteras 2022 también destaca el desafío de la polarización del caos informativo causado por las noticias falsas y la propaganda, que crean divisiones dentro de las sociedades democráticas y socavan las democracias a nivel mundial:

At the international level, democracies are being weakened by the asymmetry between open societies and despotic regimes that control their media and online platforms while waging propaganda wars against democracies.

A nivel internacional, las democracias se están debilitando por la asimetría entre las sociedades abiertas y los regímenes despóticos que controlan sus medios y plataformas en línea mientras libran guerras de propaganda contra las democracias.