Tablero de ajedrez. Doto de Diana Lee [1] vía Flickr (CC BY-NC-ND 2.0 [2]).
En junio de 2022, aproximadamente un mes antes del inicio de la 44ª Olimpiada de Ajedrez en Chennai (India), la Federación de Ajedrez de Kazajstán vio sacudida por una serie de acusaciones que implicaban, directa e indirectamente, a una joven ajedrecista y a algunos hombres de todas las edades: dos altos funcionarios de la federación, el ministro de Cultura y Deporte y hasta el presidente de Estado. El enfrentamiento se convirtió en un torbellino de intrigas y acusaciones, provocaron la indignación de la opinión pública, y revelaron las actividades entre bastidores de las turbias relaciones entre el deporte profesional y la política gubernamental.
Kazajstán, país cuyos líderes políticos y estructuras gubernamentales tienen la costumbre de enrolar a los atletas de élite en la propaganda política del régimen, es conocido por los enormes pagos de premios en efectivo a los atletas triunfadores con cargo al presupuesto estatal. Por ejemplo, han llegado a pagar la mayor suma del mundo [3] por una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeong Chang 2018, la quinta mayor [4] para los Juegos Olímpicos de Verano de Tokio 2020 y la tercera mayor [5] para los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, después de Singapur y Hong Kong. Sin embargo, a cuatro de los siete ganadores de medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Verano de Londres 2012, que fueron recibidos en una pomposa ceremonia solemne [6] por el entonces presidente Nursultan Nazarbayev el 17 de agosto de 2012, se les despojó después oficialmente [7] de sus medallas de oro por infracciones de dopaje. Extrañamente, como gesto del Ministerio de Cultura y Deporte, no se les pidió que devolvieran el dinero del premio y otros numerosos regalos del Estado a pesar de su grave mala conducta. El levantador de pesas Ilya Ilyin, a quien luego despojaron de sus medallas de oro de los Juegos Olímpicos de 2008 y 2012, llegó a formar parte del consejo político del partido gobernante Nur-Otan [8] en 2013, máximo órgano de representación del partido. En la actualidad, la corrupción en las organizaciones deportivas alcanza tal nivel que hasta los diputados de los partidos progubernamentales admiten que «el deporte en Kazajistán está atrapado en los escándalos de corrupción [9], mientras que los atletas sufren extorsiones y humillaciones de funcionarios y agentes deportivos».
Bibisara Assaubayeva en el Campeonato Mundial de Ajedrez por Equipos. Astana, marzo de 2019. Captura de pantalla del canal de TouTube de Телеканал Хабар 24 [10].
En cuanto al escándalo actual, Bibisara Assaubayeva, gran maestra de 18 años y actual campeona mundial de ajedrez relámpago femenino y subcampeona mundial de ajedrez rápido, reveló en una publicación de Instagram [11] el 21 de junio que ella, junto con el resto del equipo nacional femenino, fue arrastrada por el presidente y el vicepresidente de la Federación de Ajedrez de Kazajstán a una reunión con Aida Balayeva, jefa adjunta de la administración del presidente de la República de Kazajistán. Según dijo, la reunión sirvió de ensayo para el encuentro con el presidente de Kazajstán que se celebraría al día siguiente, según averiguó, en la que el equipo femenino iba a pedir 3000 millones de tenges (unos 6,8 millones de dólares) para las necesidades de la federación de ajedrez. Llamativamente, los dos hombres –el recién elegido presidente de la federación, Galim Khussainov, y el vicepresidente, Darmen Sadvakassov– fueron reprendidos por la anfitriona, la señora Balayeva, por su comportamiento inadecuado «delante de las mujeres».
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Queridos amigos, no quería crear un ruido antideportivo a mi alrededor que interfiere en gran medida con el proceso de entrenamiento olímpico.
Solo puedo agregar: soy una gran maestra, una atleta adulta con una mente clara y una memoria sólida. Nunca confundo nada, no especulo. Y no doy ningún paso en las emociones, como sugirió el ministro de Deportes. yo
no confundo Kazajistán con Uzbekistán, no confundo sus federaciones. También sé que los dólares son la moneda nacional de Estados Unidos, inapropiados para determinar cualquier presupuesto en un país independiente con su propia moneda nacional. Especialmente para hacerlo en Akorda, el corazón de Kazajstán. Y 3000 millones de tenge (o deje que el señor Khusainov, según me dicen, tres millones de dólares), que se planeó pedir por las buenas o por las malas al presidente de nuestro país. Es una cantidad enorme y no se la merece la Federación (incluidos nosotros, la selección). Al menos por ahora, un mes antes de los Juegos Olímpicos.
Soy una atleta autosuficiente, que no busca el beneficio personal ni la gloria vacía. El ajedrez me enseñó a valorar el tiempo, el mío y el de los demás, no hay nada más importante que el tiempo. No es correcto, no es ético, es antimoral, si se quiere robar tiempo al presidente del país con solicitudes criminalmente dañinas y vacías, y dinero del presupuesto nacional. Y nadie me convencerá de lo contrario.
Por eso, en vísperas de la próxima reunión con el presidente, acudí a los medios y hablé directa y abiertamente, sin temor a la persecución por la verdad. Si las personas «ofendidas» se consideran ofendidas, defiende tu nombre en los tribunales, tu derecho.Volviendo al tema de las mentiras. Estoy lista para encontrar una «ventana» en el entrenamiento y pasar una prueba de polígrafo.
Que los señores Khusainov y Sadvakasov señalen la hora y el lugar. Ellos pasarán el detector de mentiras conmigo. Está lista para pagar a los tres ella misma, no tendrán que preguntarme al respecto..
Como recuerda Assaubayeva, la idea de la reunión parecía turbia, ya que no se invitó a nadie de la selección masculina a la reunión, ni tampoco al entrenador de la selección, de modo que solo estuvieron presentes los dos jefes de la federación y del equipo femenino.
Esxribió:
Сегодня же до самой последней минуты я была уверена, что нас ведут на встречу к министру за олимпийскими напутствиями, а оказалось Дармен Садвакасов и его начальник нас привели просить 3 миллиарда тенге для бюрократов Казахстанской шахматной Федерации.
Очевидно, что сегодня была генеральная репетиция, руководство КФШ готовит его премьерный показ ЗАВТРА на встрече с Президентом страны, Касым-Жомарт Кемелевичем.
Мне стыдно и поэтому я прошу прощения. Я спортсмен, и хочу им оставаться.
Мне очень стыдно за себя, что я стала участницей этого постыдного спектакля.
Hoy, hasta el último momento, estaba segura de que íbamos a reunirnos con el ministro para su despedida antes de los Juegos Olímpicos, pero resultó que Darmen Sadvakassov y su jefe nos trajeron aquí para pedir 3000 millones de tenge para los burócratas de la Federación de Ajedrez de Kazajstán.
Obviamente, hoy era el ensayo general, ya que los jefes de la Federación se estaban preparando para el estreno de MAÑANA en la reunión con el presidente, Kassym-Jomart Kemelevich.
Estoy avergonzada y pido perdón. Soy una deportista y quiero seguir siéndolo.
Me avergüenzo de mí misma por haber participado en esta obra vergonzosa.
Tal como publicó antes de la reunión con el presidente de Kazajstán, tanto los responsables de la Federación como el ministro de Cultura y Deporte respondieron rápidamente negando las acusaciones y, en cualquier caso, la suma no se planteó en el palacio presidencial, aunque el equipo masculino y el seleccionador no llegaron hasta allí. «Teniendo una audiencia con el jefe de Estado, pero desafortunadamente, sin el equipo masculino y el entrenador principal», escribió bajo su vídeo de la reunión.
Dauren Abayev, el ministro de Cultura y Deporte, que también ejercía de primer jefe adjunto de la administración del presidente, estuvo lo suficientemente seguro como para afirmar que nadie en esa reunión «pidió dinero [13]«, y añadió: «No estuve presente en la reunión, cuando se habló de eso». Sin embargo, esto no impidió que el ministro, conocido por sus comentarios sexistas e insinuaciones sexuales [14] en público, afirmara que Assaubayeva actuó entonces de forma «emocional». En una rueda de prensa especial, Khussainov, presidente del Federación, trató de justificar que «las cifras reflejadas en su puesto no eran ciertas», y dedujo que «Bibisara es todavía una niña [15]. Solo tiene 18 años. Así que, probablemente, no podía entender de qué estábamos hablando». Además, Zhansaya Abdumalik, compañera de la selección femenina que también estaba en la reunión, afirmó en la rueda de prensa que Assaubayeva podría haberse confundido con el presupuesto de la Federación de Ajedrez de Uzbekistán que estaban discutiendo.
Bibisara Assaubayeva, que desde su carrera juvenil fue una de las ajedrecistas acosadas con cartas pornográficas [16] durante más de diez años, enfrentó con éxito en los tribunales rusos las acusaciones [17] de juego desleal por parte del gran maestro Evgeny Solozhenkin, destacado entrenador juvenil ruso, y se le concedió una indemnización. Su respuesta a los ataques y acusaciones de los tres hombres y de una compañera ajedrecista, que resulta ser la diputada del consejo municipal de Almaty del partido gobernante, fue madura y clara. Escribió en su cuenta de Instagram [18]:
Могу лишь добавить – я гроссмейстер, совершеннолетний спортсмен с ясным умом и твёрдой памятью. Я никогда ничего не путаю, не домысливаю. И шагов никаких на эмоциях не совершаю, как предположил господин министр спорта.
Solo puedo añadir que soy una gran maestra, deportista adulta con mente clara y memoria retentiva. Nunca confundo las cosas, nunca asumo. Y no hago movimientos emotivos, como suponía el señor ministro del Deporte.
Tras añadir que «es incorrecto, poco ético e inmoral pretender robarle tiempo al presidente del país y el dinero del presupuesto nacional con una mendicidad criminalmente maliciosa y sin sentido», sugirió a los «ofendidos» que acudieran a los tribunales. Además, sobre el tema de las mentiras, aseguró a Khussainov y Sadvakassov que siempre encontrará un espacio entre sus entrenamientos para someterse a la prueba del detector de mentiras con ellos, y se ofreció a pagar por los tres.
Como es lógico, hasta ahora ninguno de los dos hombres ha expresado abiertamente su deseo de someterse a la prueba del polígrafo.