Manifestantes y artistas se preparan con pintura corporal para marcha coreografiada frente a la Secretaría Presidencial. Imagen de Sandesh Bartlett vía Groundviews.
Este ensayo fotográfico la publicó el fotógrafo esrilanqués Sandesh Bartlett en Groundviews, galardonado sitio web de medios ciudadanos. Publicamos una versión editada como parte de un acuerdo de intercambio de contenidos con Global Voices.
El 9 de julio de 2022, el expresidente de Sri Lanka Gotabaya Rajapaksa abandonó el país tras un levantamiento pacífico de masas y acabó renunciando.
La extraña ironía poética de la caída en desgracia de Gotabaya Rajapaksa es difícil de pasar por alto. Tan palpable y punzante es su destierro y retiro sin gracia, que lo más apropiado es que pase sus últimos días en el país como un presidente asediado en un lugar llamado Fort.
No es ningún secreto que la mayoría de los manifestantes de Aragalaya [Nota del editor: «lucha» en cingalés, ahora sinónimo de movimiento] en Gotagogama, el lugar de la protesta en Galle Face Green, en Colombo, que actualmente acampan frente a la Secretaría Presidencial, han demostrado una asombrosa capacidad para organizar las protestas, reunirse y gestionarse por su cuenta. Queda por ver cómo la Aragalaya planea rebautizar Gotagogama para desalojar al presidente en funciones Ranil Wickremesinghe y al resto de los nombrados por Rajapaksa.
Este ensayo fotográfico revela apenas una parte de lo que ha sido Gotagogama, o lo que ha sido Aragalaya en general, pero esperamos que arroje algo de luz sobre cómo ha evolucionado el espacio desde sus primeros días hasta ahora. Todas las fotos fueron tomadas por Sandesh Bartlett y se usan con autorización.
Galle Face, marzo de 2022: El lugar de la protesta en los primeros días de Aragalaya, cuando el nombre «Gotagogama» aún no se oía.
Primeros días de Aragalaya.
9 de abril: Con pancartas improvisadas, los manifestantes musulmanes se preparan para romper el ayuno en la carretera de Galle al amparo de una ligera llovizna.
10 de abril: Ante la falta de compromiso del Estado, los manifestantes comienzan a prepararse para una manifestación prolongada y montan carpas frente al Hotel Shangri-La. De la noche a la mañana, el espacio comienza a evolucionar con más vendedores que instalan tiendas para atender a la creciente multitud de manifestantes.
Mediados de abril: Petardos y pólvora de manifestantes indignados cerca de la Secretaría Presidencial.
Exorcismos: Se celebran rituales religiosos para rezar por el país y expulsar a los Rajapaksa. ‘Queremos exorcizar a los personajes malignos que se han apoderado del país’.
Fines de abril: Invocación a los dioses contra la familia Rajapaksa en Gotagogama, los santones cantan y arrojan ofrendas a una hoguera en la oscuridad.
15 de abril: Esperanzas de un nuevo comienzo para el Avurudu (año nuevo de Sri Lanka) en Gotagogama. Los manifestantes cantan y tocan el tambor al ritmo de las canciones tradicionales de Avurudu con letras adaptadas a lemas de #GotaGoHome.
Enemigo público: manifestante sostiene una muttiya (olla de barro) lista para ser destrozada en un juego de kana muttiya ante los abucheos de la multitud.
Manifestante rompe muttiya con la foto de un miembro de la familia Rajapaksa para Avurudu en Gotagogama.
Jóvenes manifestantes en Gotagogama.
1de Mayo: Manifestantes hacen cola para recibir refrescos donados por los numerosos partidarios de Gotagogama.
Manifestantes resisten el calor intenso de Gotagogama.
Niños vuelan banderas temáticas de #GotaGoHome en Galle Face.
A las puertas de la Secretaría Presidencial, los manifestantes continúan su asedio para pedir la renuncia del presidente.
Manifestantes en la zona de ‘MynaGoGama’.
En señal de molestia, manifestantes posan dando puñetazos y tirando del fajín de un muñeco inflado del entonces primer ministro, Mahinda Rajapaksa
Jóvenes disfrutan de gran variedad de libros disponibles en la renovada Biblioteca Pública de Gotagogama.
11 de julio: Cartel recuerda a los culpables de un ataque organizado contra manifestantes de Gotaogogama con aprobación del entonces primer ministro, Mahinda Rajapaksa.
11 de julio: La infantería apuntala la apariencia de autoridad del Estado en la oficina de la Secretaría Presidencial, ahora ocupada por los manifestantes, después de que la seguridad y la Policía tuvieron que retirarse tras la abrumadora cantidad de manifestantes que asaltaron los edificios del Estado dos días antes.
11 de julio: Coordinadores de Aragalaya, desbordados, intentan contener oleadas de personas que se reúnen para ver el estilo de vida de la clase política que disfruta de la Casa Presidencial.
17 de julio: parte de la Biblioteca Pública de Gotagogama, ahora en la Secretaría Presidencial ocupada, el único edificio no devuelto al Estado y todavía accesible al público a fines de julio.
Público disfruta del jardín de la Casa Presidencial en Fort.
¿JUSTICIA PÚBLICA? Edificio de la Secretaría Presidencial ocupado, julio de 2022.