Entonces primer ministro británico, Gordon Brown, recibe a Jack Warner, entonces vicepresidente de la FIFA, en la Alta Comisión Británica en Trinidad y Tobago, 27 de noviembre de 2009. Foto de Downing Street en Flickr (CC BY-NC-ND 2.0).

El 17 de noviembre, pocos días antes de la inauguración de la Copa Mundial de la FIFA 2022 en Catar, el trinitense Jack Warner, asediado exvicepresidente de la FIFA, perdió su apelación ante el Consejo Privado. El proceso de licitación para esta Copa del Mundo contribuyó en parte a que, en 2015, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos acusara a varios funcionarios de la FIFA por corrupción. La decisión del Consejo Privado abre el camino para reanudar los procedimientos de extradición contra Warner, ya que Estados Unidos busca procesarlo por su papel en el amplio caso de corrupción de la FIFA, bajo supervisión del entonces presidente Sepp Blatter.

El Departamento de Justicia afirma que Warner recibió hasta cinco millones de dólares estadounidenses en sobornos por usar su voto como presidente de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (CONCACAF) para asegurar a Rusia como sede de la Copa del Mundo 2018. La CONCACAF es una de las seis confederaciones de asociaciones de fútbol pertenecientes a la FIFA. Se cree que el dinero se canalizó a Warner a través de empresas ficticias y otras cuentas en el extranjero.

Se exploraron actos de corrupción similares en «FIFA Uncovered», serie documental recién estrenada en Netflix. Eso hizo que varios usuarios de redes sociales se preguntaran, «¿Por qué Jack Warner no está en prisión?». En Twitter, este usuario comentó:

If you think a documentary on Netflix got Jack Warner caught you must be living in a fairytale.

— Stef Khan (@Stef_Khan) November 17, 2022

Si crees que un documental en Netflix atrapó a Jack Warner, debes estar viviendo en un cuento de hadas.

En Trinidad, donde sigue viviendo, Warner usó su influencia y sus recursos para mediar en el poder político, e inicialmente depositó su lealtad en el Congreso Nacional Unido, actualmente en la oposición. En diferentes épocas, se desempeñó en el partido como ministro de Seguridad Nacional y como primer ministro. En 2013, después de una derrota, disputó su escaño parlamentario, bajo la bandera de su propio Partido Liberal Independiente, por Chaguanas West, bastión del Congreso Nacional Unido, en una elección parcial y ganó de forma aplastante.

Ese mismo año, los dos hijos de Warner, Daryan and Daryll, se allanaron a la acusación y se declararon culpables de los cargos del Departamento de Justicia de fraude y lavado de dinero:

one of the most wild details of the Netflix FIFA Documentary I didn't expect was that the FBI arrested Jack Warner's two sons and told him to fess up and help them or the sons would face over 10 years of jail time

he wished his sons good luck & hope you get a good lawyer!!! https://t.co/cGY98IQlzS

— Douglas Reyes-Ceron (@dreyesceron) November 17, 2022

NUEVO: Jack Warner perdió su apelación y puede ser extraditado a Estados Unidos en el caso de corrupción de la FIFA. Es una gran noticia y más aún a pocos días del Mundial.
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Uno de los detalles más locos que no esperaba del documental de FIFA de Netflix fue que el FBI arrestó a los dos hijos de Jack Warner y le dijeron que confesara y los ayudara, de otro modo los hijos enfrentarían más de 10 años de cárcel

 ¡Les deseó buena suerte a sus hijos y espero que consigan un buen abogado!

Mientras sus hijos siguen en prisión en Estados Unidos, el propio Warner ha logrado evadir la extradición, pero con el último fallo del Consejo Privado, eso puede estar a punto de cambiar. Dada la habilidad inusual de Warner para evitar rendir cuentas a pesar de múltiples escándalos, desde la supuesta reventa  de miles de boletos para la Copa del Mundo de 2006 hasta el supuesto desvío de fondos de ayuda destinados a las víctimas del terremoto de Haití, muchos usuarios de redes sociales dicen que lo creerán cuando lo vean.

Warner emitió una declaración sobre la decisión del Consejo Privado a través de su página de Facebook, en la que básicamente afirma que la motivación de los arrestos de la FIFA de 2015 era pura envidia:

FIFA is an independent association not affiliated to any government or country. At all times it sought, in the interest of football, to offer opportunities to the widest cross section of the international community to host the World Cup. […]

Against that background FIFA gave preference to South Africa, Russia and Qatar to host World Cup Finals. Naturally, the United States of America and the United Kingdom who had previously hosted the World Cup were not selected despite sustained lobbying […] and thereafter began a campaign against FIFA […]

La FIFA es una asociación independiente que no está afiliada a ningún Gobierno o país. Por el bien del fútbol, en todo momento buscó ​​ofrecer oportunidades a la mas amplia muestra representativa de la comunidad internacional para albergar la Copa del Mundo. […]

En ese contexto, la FIFA dio preferencia a Sudáfrica, Rusia y Catar para ser anfitriones de las finales de la Copa del Mundo. Naturalmente, Estados Unidos de América y el Reino Unido, anteriores anfitriones de la Copa del Mundo, no fueron seleccionados a pesar de la presión sostenida […] y luego comenzaron una campaña contra la FIFA […]

Sobre la posibilidad de extradición, llamó a Trinidad y Tobago «un caso atípico», y agregó:

I have no banking account nor property in the United States. I have not transacted any business there. It is unfathomable how a New York District Attorney could commence a prosecution against me based solely on the fact that monies payable to me passed through the American banking system. Furthermore, it is incredulous that allegations of misconduct arising out of a FIFA meeting held in Trinidad could be prosecuted in the United States whereas, in Trinidad itself it does not constitute criminal activity.

No tengo cuenta bancaria ni propiedad en Estados Unidos. No he hecho ningún negocio allí. Es incomprensible que un fiscal de distrito de Nueva York pueda iniciar un proceso en mi contra basado únicamente en el hecho de que el dinero que se me paga pasó a través del sistema bancario estadounidense. Además, es increíble que las denuncias de mala conducta derivadas de una reunión de la FIFA celebrada en Trinidad puedan procesarse en Estados Unidos cuando, en la propia Trinidad, no constituye una actividad delictiva.

En Facebook, Garvin Walters coincidió:

While I have no sorrow [for] Jack Warner […] my issue is WHY is this a case for the US?
If there's corruption in Russia or China or even England, where US currency was used, will they pursue the culprits there?
I will HATE to believe that it's because of our ‘third world’ status, that this is happening.
I can understand the crime [was] being committed on US soil, but it wasn't.

Si bien no siento pena [por] Jack Warner […] mi problema es ¿POR QUÉ este es un caso para Estados Unidos?
Si hay corrupción en Rusia, China o incluso Inglaterra, donde se usó la moneda estadounidense, ¿perseguirán a los culpables allí?  DETESTARIA creer que esto está sucediendo debido a nuestra condición de ‘tercer mundo’.
Puedo entender si el delito [estaba] cometiéndose en suelo estadounidense, pero no fue así.

Anthony Morgan Beach respondió:

Once the laundered money passes through a correspondent bank in the US, it violates Federal laws.

Una vez que él dinero lavado pasa por un banco corresponsal en Estados Unidos, viola las leyes federales.

Aún así, algunos creen que Warner, que tiene la reputación de ser una especie de Robin Hood, podría ser un chivo expiatorio del corrupto sistema FIFA. En Twitter, este usuario respondió:

The Jack Warner defensive squad are victims of effective altruism turning a blind eye to the 99% wrong he did because he did 1% good. Sorry, that’s not a get out of prison card.

— Kristoff Samm (@kristoffsamm) November 17, 2022

El equipo de defensa de Jack Warner es víctima de un altruismo efectivo que se hace de la vista gorda ante el 99 % del mal que hizo porque hizo un 1 % de bien. Lo siento, eso no es una tarjeta para salir de prisión.

Mientras tanto, Warner ha dado instrucciones a su equipo legal para que «continúe presionando [su] caso en las tres etapas restantes de estos procedimientos», lo que probablemente incluiría una apelación del veredicto del magistrado ante el Tribunal de Apelación y, una vez más, ante el Consejo Privado.

El periodista deportivo local Lasana Liburd, cuyo periodismo de investigación contribuyó a la denuncia de Andrew Jennings sobre la FIFA en su libro «Foul», interpretó así la declaración de Warner: «Esto no sugiere que Warner confíe en sus posibilidades en ningún foro legal, pero si que está decidido a extender el proceso el mayor tiempo posible». Liburd también llamó a Warner «presumiblemente inseguro de los hechos cuando dio su propia opinión de la extradición».

Muchos de los comentarios en la publicación en Facebook de Warner fueron mensajes de apoyo, como Tony Ila, que sugirió que, como Warner siempre había estado en desacuerdo con el actual Movimiento Nacional del Pueblo (PNM), el Gobierno estaría más predispuesto a «estar de acuerdo y seguir adelante con su extradición».

Es más, parece que el fiscal general Reginald Armour no planea bloquear la extradición, y ha emitido la siguiente declaración:

The Privy Council has unanimously determined that no procedural or substantive unfairness has taken place preventing Mr. Warner's extradition to the USA. […]

As Attorney General, I am able to assure the citizenry of this Republic that in Trinidad and Tobago the rule of law and due process are alive and well, and the law must now be allowed to take its course.

El Consejo Privado ha determinado por unanimidad que no ha habido injusticia procesal o sustantiva alguna que impida la extradición del señor Warner a Estados Unidos. […]

Como fiscal general, puedo asegurar a los ciudadanos de esta República que en Trinidad y Tobago el estado de derecho y el debido proceso están vivos y en buen estado, y ahora se debe permitir que la ley siga su curso.

El curso en sí está por verse. En su mayor parte, Trinidad y Tobago no es conocida por ser proactiva en temas de corrupción.

Si se extradita Warner, que tiene casi 80 años, podría enfrentar hasta 20 años de prisión. Según Liburd, esta última decisión lo lleva «un paso más cerca a un boleto de ida a Nueva York».