[1]Marco de la iniciativa de la Franja y la Ruta de China: el inesperado poder de las narrativas locales
Global Voices se complace en anunciar el lanzamiento de nuestro estudio en profundidad [2] sobre la influencia del poder blando chino en los países que participan en la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China. Desde 2021, nuestro Observatorio de Medios Cívicos [3] ha estado trabajando en un proyecto de investigación participativo [4] para analizar la transferencia de tecnología china, el poder blando, las comunicaciones y la información pública sobre la inversión y el desarrollo de infraestructura. Trabajando con investigadores y escritores locales de todo el mundo, exploramos cómo las perspectivas locales apoyan o contrarrestan las ambiciones de China, y cómo China promueve narrativas que refuerzan su impulso por el poder global.
En nuestra investigación, analizamos cómo las perspectivas locales apoyan o contrarrestan las ambiciones de China, y cómo China promueve narrativas que refuerzan su impulso por el poder global. Trabajando junto a investigadores y escritores locales de todo el mundo, diseccionamos narrativas sobre la intersección de la transferencia de tecnología china, el poder blando, las comunicaciones y la información pública sobre la inversión y el desarrollo de infraestructura.
Esta investigación comprende un conjunto de datos de investigación y análisis cualitativos centrados en narrativas de medios influyentes y fuentes de medios clave. Visita el conjunto de datos públicos [5], del proyecto, integrado en Airtable y que da enlaces y filtros relacionales para el estudio. El conjunto de datos ofrece numerosos puntos de entrada para lectores curiosos e investigadores interesados en explorar las relaciones dentro de los datos. Analizamos 748 elementos de los medios que ilustran las percepciones locales de la Iniciativa de la Franja y la Ruta en 14 países, identificamos y analizamos los marcos narrativos y los temas en juego. También publicamos 37 historias [4] basadas en este conjunto de datos que sintetizan el análisis.
[2]Marco de la iniciativa de la Franja y la Ruta de China
La investigación del Observatorio de Medios Cívicos [3] de Global Voices identifica y rastrea temas clave y marcos narrativos que surgen en torno a hechos, tendencias y otros fenómenos, y explica el contexto y el subtexto de los medios locales, vernáculos y multilingües.
Descarga un PDF [6] del informe.
Accede a la base de datos pública [5]
El Gobierno chino anunció los primeros elementos de la Iniciativa de la Franja y la Ruta en 2013, en forma de proyectos de desarrollo de infraestructura internacional marcados con referencia a las rutas comerciales de la Ruta de la Seda. Esta gran narrativa creció en conjunto con la inversión china en una multitud de corredores de transporte, puertos y otros proyectos de infraestructura clave, hasta el punto de que la Iniciativa de la Franja y la Ruta se incorporó a la Constitución china en 2017. Esta creación de una gran estrategia para la influencia económica global en paralelo con una narrativa maestra para respaldar esa visión es indicativa del enfoque centralizado y de arriba hacia abajo de China para la planificación y la gobernabilidad.
Pekín ha creado con frecuencia narrativas efectivas que ponen a China en el centro del desarrollo y la influencia. Sin embargo, nuestra investigación descubrió una dinámica a menudo polémica entre las grandes narrativas promovidas por China y sus representantes y agentes, y las diversas narrativas locales de ciudadanos, activistas, periodistas y gobiernos. Observamos el poder de las narrativas locales para influir, y en ocasiones incluso detener, las ambiciones de desarrollo de China. Observamos los intentos de China de ejercer influencia a través de representantes locales, a menudo de élite, ya sea para apoyar sus perspectivas o suprimir la discusión pública. También observamos otros países que intentaban construir narrativas opuestas que promovían su propia visión del desarrollo, a menudo en competencia o cooperación incómoda con la visión china.
La Iniciativa de la Franja y la Ruta es una narrativa con alcance imperial, de orden mundial, respaldada por miles de millones de dólares, con el objetivo de organizar el mundo de acuerdo con una visión específica. Esta narrativa es una proyección de futuros posibles que emanan de un centro de poder: el polo opuesto de la visión de sociedades en red y su manifestación, por ejemplo, en tecnologías de comunicación abiertas. Las sociedades en red, con sus múltiples nodos de poder e influencia, están repletas de narrativas locales y efímeras y, al menos de manera aspiracional, confían en la deliberación y el debate para construir una visión colectiva del mundo.
¿Pueden las narrativas maestras sobrevivir en una era de sistemas de información en red? Si esos sistemas están diseñados, como lo está internet en China, para servir a los intereses de instituciones poderosas, ¿los ciudadanos se harán eco de las narrativas de construcción del mundo que promueve? Cuando se presentan perspectivas alternativas para oponerse o neutralizar las narrativas maestras creadas centralmente, estas últimas aún suelen ganar. Las narrativas maestras disfrutan del respaldo de los medios estatales con buenos recursos. Proyectan el impacto en el mundo real de la inversión china en infraestructura y desarrollo económico. Y ciertamente, el enfoque de China provocó una respuesta de los países del G7, que en 2022 asumieron un compromiso de 600 000 millones de dólares para financiar la infraestructura global denominada Asociación para la Infraestructura Global.
Sin embargo, la influencia de tales grandes narraciones puede ser limitada con el tiempo. En septiembre de 2021, el Gobierno chino lanzó un nuevo plan y la narrativa que lo acompaña llamada Iniciativa de Desarrollo Global. Desde entonces, los funcionarios chinos han discutido la Iniciativa de la Franja y la Ruta con menos frecuencia, y su futuro como lógica organizadora de las relaciones internacionales chinas es incierto. Quizás este cambio sea en respuesta a los cambios en las relaciones internacionales, lo que a su vez sugiere que la efectividad de la narrativa de la Franja y la Ruta ha llegado a su límite. La Iniciativa de Desarrollo Global, como marca, carece del estilo y el alcance de la Iniciativa de la Franja y la Ruta; podría confundirse con un proyecto de Naciones Unidas, o algo creado por un grupo de expertos en Washington o Bruselas. Y tal vez ese anonimato sea intencional: un proyecto con un nombre que suena a nada, una pantalla para influir en la abstracción más amplia que llamamos «global».
Durante los próximos meses, Global Voices revisará muchos de los temas y narrativas encontrados en esta investigación y explorará, en historias, cómo se están desarrollando en 2023.
Visita la página principal [3] del Observatorio de Medios Cívicos.