El autor de este artículo prefiere permanecer anónimo por razones de seguridad.
Apoyado en un pequeño balcón de una derruida casa en el centro de Amán, observaba las protestas en la calle cuando una voz a mi derecha preguntó, ¿para qué medio trabajas?».
«Wikipedia”, dije, y agregué, «¿y dónde trabajas tú?». Me miró atentamente y respondió «Seguridad preventiva». Con frescura, solté: «Sí, lo intuía. Debería cambiar la manera en que te vistes, todos ustedes [funcionarios de inteligencia] se parecen mucho». «¿Todos usamos camisetas blancas?”, dijo burlonamente mis palabras.
No quise parar la conversación. «¿Desde hace cuánto trabajas en seguridad del Estado?», quise saber. «Desde que el mar Muerto estaba vivo», bromeó. «Que el mar Muerto descanse en paz», dije. «¿Y cómo te llamas?». Callé por un momento, necesitaba pensar rápido qué nombre dar. «¡Aisha!», dije finalmente (nota: Aisha significa con vida en árabe).
Se paró con mis compañeros, mirando distraídamente la protesta desde arriba. La multitud inició sus cánticos inmediatamente después de las plegarias del viernes en la mezquita Al Husseini [4] en el centro de Amán.
Esta protesta se llevó a cabo hace un año, el viernes 12 de noviembre de 2021 [5], cuando varios partidos políticos y miembros de Herak se reunieron [6] para protestar contra el alza de precios y la corrupción (con directa referencia a los entonces recién filtrados Pandora Papers [7]), e intencionadamente para pedir el rechazo a la ley de defensa. Esa ley se aprobó [8] en marzo de 2020, hace dos años y medio, para mitigar los efectos negativos en la salud y en lo económico de la pandemia de COVID-19 [9].
Órdenes de defensa sin contrapesos
Cuando se activó, esta ley otorgó al primer ministro jordano amplios poderes para dictar órdenes legales –conocidas como «órdenes de defensa»– de forma rápida y con efecto inmediato. Estas órdenes de defensa sustituyen a las leyes ordinarias y se aplican de inmediato sin ningún control.
Las órdenes de defensa incluyen la imposición del uso de mascarillas (Orden de Defensa 20) y la penalización de la difusión de noticias de «alarmismo» relacionadas con la pandemia (Orden de Defensa 8). Actualmente hay 36 órdenes de defensa, muchas siguen vigentes y otras han sido canceladas para facilitar la circulación de personas y el comercio.
Un cartel de la protesta decía, “Las órdenes de defensa se usan como imposición y para amordazar voces». Las autoridades jordanas han usado las órdenes de defensa para apaciguar muchas formas de protesta y asamblea. La orden de defensa 16 [12] se usó específicamente para acusar y detener a manifestantes y activistas [13] bajo la premisa falsa de que su «reunión» empeora la situación epidemiológica. Esto a pesar del hecho de que el Ministerio de Salud ha dejado [14] de emitir informes diarios de casos y muertes de COVID-19, lo que indica que el virus se ha vuelto endémico.
Las organizaciones de derechos humanos cuestionan [15] la necesidad de una ley de defensa, pero según informes recientes [16], el Gobierno tiene la intención de mantenerla vigente en tanto la Organización Mundial de la Salud no ha declarado [16] el fin de la pandemia.
Estado de emergencia disfrazado de protección social
Aunque en mayo de 2022 el rey anunció [18] un plan para parar las órdenes de defensa, el Gobierno sigue justificando [19] la aplicación de la ley con el argumento de que protege los empleos de la gente [20] y la mantiene lejos de la cárcel [21]. Esto se refiere a la orden de defensa 28 [22], que prohíbe la prisión de personas con deudas menores a 100 000 dinares (unos 141 000 dólares), pues Jordania es uno de los pocos países que aún encarcela a los deudores.
La orden de defensa se emitió a fines de marzo de 2021, apenas 12 días después de que Human Rights Watch publicó un informe condenatorio [23] sobre la situación de prisión por deudas de Jordania. La orden de defensa debía expirar a fines de 2021, pero se extendió hasta septiembre de 2022, y luego hasta fines de 2022.
El Gobierno afirma que esta es la última prórroga posible para la orden de defensa, dando a entender que las recientes enmiendas a las leyes de cárcel por deudas deberían bastar para mantener a la gente fuera de prisión. Sin embargo, según los informes, más de 148 000 personas [24] enfrentan cárcel si se archiva esta orden de defensa específica.
Además, la Orden de Defensa 6 prohibía a las empresas recortar salarios y obligaba a mantener a los empleados hasta que se erradicara el coronavirus. No obstante, se dio una excepción [25] a las ONG extranjeras, que pudieron despedir a sus empleados incluso mientras la orden de defensa seguía vigente.
El primer ministro, Bisher Khasawneh [26], mantiene que la Orden de Defensa 6 salvaguarda más de 100 000 puestos de trabajo.
Recientemente, el líder sindical local Mazen Maaytah expresó su apoyo [20] a la ley de defensa, afirma que desempeñaba un papel fundamental en la protección de los trabajadores ante el aumento de los precios y el desempleo.
La periodista Hebatulhayat Obeidat tuiteó su respuesta a su apoyo:
قد يوحي المشهد العام، والصمت السائد، بأنه فرصة حقيقية لاستغلال المشهد، والتوغل باستخدام السلطة في غير مكانها.
لكن هذا تفسير يراه فقط المراهق السياسي، لأن هذا الصمت يتبعه انفجار كامن بعد أن يدرك المواطن خسارته لكل ما يملك.
— Hebatulhayat هبة الحياه (@hebatulhayat) October 21, 2022 [27]
La escena pública y el silencio prevaleciente pueden sugerir que es una oportunidad real para explotar la escena y entrometerse con el poder en el lugar equivocado.
Pero esta es una explicación que solo el «adolescente» político puede ver, porque a este silencio le sigue una explosión latente luego de que el ciudadano se da cuenta de que ha perdido todo lo que posee.
No caben los frustrados y desesperados
Hoy se habla poco de la ley de defensa, y se puede afirmar sin temor a equivocarse que el tema no está en el radar de la opinión pública. La protección social se usa como pretexto para abogar a favor del mantenimiento de este estado de excepción.
El vicepresidente del Patronato del Centro Nacional de Derechos Humanos llegó a afirmar que la ley de defensa ha garantizado [28] la protección de los derechos humanos en estas circunstancias «excepcionales».
El 16 de octubre, el influenciador de redes sociales Sultan Ajlouni tuiteó su comentario sobre los argumentos para prorrogar la Ley de Defensa:
انا بقول اخلطو الإيجابية مع المي… اه صح نشفتو السدود فش مي
طيب رشوها علينا من الطيارات او لقّحونا فيها بدل #كورونا [29] وهيك بتكون حجة لتمديد قانون الدفاع#الأردن [30] #الأردن_مش_بخير [31] pic.twitter.com/RPFDminntK [32]— سلطان العجلوني (@AjloniSultan) October 16, 2022 [33]
Yo digo mezclar positividad con agua… Es verdad, viste las represas, no había agua.
Luego rocíennos esta positividad desde aviones o inyéctenla en vez de la vacuna del COVID-19, y esto sería un argumento para extender la ley de defensa.
Mientras la represión continúa [34], el 13 de noviembre de 2022, en la inauguración de la Segunda Sesión Ordinaria del XIX Parlamento, el rey Abdullah II confirmó que en el país «no caben los que están frustrados y desesperados [35]«.