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Rasha Azab y sus amigas: Siete días fuera de guion para tres periodistas egipcias

Categorías: Medio Oriente y Norte de África, Egipto, Activismo digital, Derechos humanos, Gobernabilidad, Libertad de expresión, Medios ciudadanos, Mujer y género, Periodismo y medios, Política, Protesta, The Bridge, "Greenwashing" global y COP27, Día Mundial de la Libertad de Prensa 2023

La tía de Ala'a Abd el-Fattah, la escritora y comentarista política y cultural egipcia Ahdaf Soueif (derecha) en una conversación con Eman Auf (izquierda), Mona Selim (centro) y Rasha Azab (detrás a la derecha), 13 de noviembre de 2022, Sindicato de Periodistas Egipcios. Rasha, Eman y Muna tienen los derechos de la imagen. Imagen usada con autorización.

El 7 de noviembre, las periodistas Rasha Azab [1], Eman Auf y Mona Selim iniciaron una huelga de hambre [2] en el Sindicato de Periodistas Egipcios [3], organismo gubernamental encargado de la prensa y las libertades de los medios del país, para dar a conocer la situación de los presos políticos egipcios [4]. Su acción provocó el caos hasta que su plantón terminó siete días después.

El plantón se produjo en un contexto de alerta máxima estatal por la tormenta política desencadenada por la COP27 [5], que se vio dominada por el deterioro de la situación de los derechos humanos en Egipto [6]. Los temas más destacados fueron la difícil situación de 60 000 presos políticos [4] y la campaña [7] para salvar la vida del preso político más famoso de Egipto, Alaa Abd el-Fattah [8], que estaba en un momento crucial [9] de su lucha por la libertad.

Rasha Azab [1], periodista y novelista [10] que también escribió el guion de la película de Netflix «Atrapada» [11], habló con Global Voices a través de Signal y Twitter sobre los siete días que ella y sus amigas pasaron desafiando los estereotipos y las expectativas de las periodistas egipcias:

We were talking about public issues with other Egyptian female journalists.

We wanted to keep the idea under wraps so the syndicate wouldn't figure it out ahead of time.

We needed the situation to unfold exactly as it did, with the three of us going to our syndicate as usual and announcing the sit-in.

Hablábamos de temas públicos con otras periodistas egipcias.

Queríamos mantener la idea en secreto para que el sindicato no se diera cuenta antes de tiempo.

Necesitábamos que la situación se desarrollara exactamente como ocurrió, nosotras íbamos a nuestro sindicato como de costumbre y anunciamos el plantón.

Romper un ladrillo en un muro alto

Las tres periodistas tienen una historia de activismo en común. Se conocieron en las manifestaciones que precedieron a la revolución egipcia de 2011 [12], como recuerda Azab:

We used to meet all the time at the Journalists Syndicate … We share a history of struggle. We have a greater appreciation for our friendship after this experience, because it required a lot of trust.»

Nos reuníamos siempre en el Sindicato de Periodistas… Compartimos una historia de lucha. Apreciamos más nuestra amistad después de esta experiencia, porque requirió mucha confianza.

Su experiencia en los medios les había enseñado que en Egipto no se podía hacer periodismo eficaz sin libertad de expresión, por lo que decidieron desafiar la situación.

Se dieron cuenta de que la agencia del Sindicato de Periodistas [3] había caído en un letargo [13] y necesitaba una llamada de atención para recordarle su papel en la esfera pública, sobre todo en relación con el discurso político y la libertad de expresión bajo la presidencia de Abdel Fattah El-Sisi [14]. Como aclara Azab, el mensaje que tenían en mente era directo:

The main message [15] is to encourage people to return to their places, defend them, and exercise their civil, political, and professional rights.

El mensaje [15] principal es animar a la gente a volver a sus lugares, defenderlos y ejercer sus derechos civiles, políticos y profesionales.

El plantón no fue un acto improvisado. Varias cuestiones urgentes las impulsaron a organizarla en ese momento. Lo que más llamó la atención fue la falta de postura del Sindicato sobre la libertad de prensa y de los medios, a pesar de su papel principal en el diálogo nacional [16]:

Several factors influenced the timing of the sit-in. The first is that for three months, there have been conversations about releasing political prisoners. [17] They stated that around 1,200 prisoners would be released in the first wave, yet dozens of people are still being detained [18] on similar charges. Egypt's security policy has remained largely unchanged.

Our stance also included solidarity with Alaa Abd el-Fattah's hunger strike, which exceeded 220 days at the time, and he had abstained from drinking water since November 6, when news about him completely stopped. He has received worldwide support, but nothing in Egypt. As Alaa's friend, I saw that neither he nor us deserved this.

The third motivation was to liberate the Journalists Syndicate, which was responsible for monitoring imprisoned journalists.

Before the sit-in, 30 journalists had been imprisoned, but that number increased by one during the sit-in; Ahmed Fayez. I'm not sure if his arrest following a post he wrote on Alaa Abd el-Fattah [19] came by chance or irony.

These are largely governmental actions designed to keep the Syndicate out of situations like this.

Varios factores influyeron en el momento del plantón. El primero es que desde hace tres meses se viene hablando de la liberación de presos políticos [17]. Afirmaron que unos 1200 presos serían liberados en el primer grupo, pero decenas de personas siguen detenidas por cargos similares [18]. La política de seguridad de Egipto ha permanecido prácticamente inalterada.

Nuestra postura también incluía la solidaridad con la huelga de hambre de Alaa Abd el-Fattah, que en ese momento superaba los 220 días, y se había abstenido de beber agua desde el 6 de noviembre, cuando cesaron por completo las noticias sobre él. Ha recibido apoyo en todo el mundo, pero nada en Egipto. Como amigo de Alaa, vi que ni él ni nosotros nos lo merecíamos.

La tercera motivación era liberar al Sindicato de Periodistas, encargado de vigilar a los periodistas encarcelados.

Antes del plantón, había 30 periodistas encarcelados, pero ese número aumentó a 31 durante el plantón: Ahmed Fayez. No estoy seguro de si su detención a raíz de una publicación sobre Alaa Abd el-Fattah [19] se produjo por casualidad o por ironía.

Se trata en gran medida de acciones gubernamentales destinadas a mantener al Sindicato al margen de situaciones como esta.

La oportunidad ideal se presentó con la COP27:

We needed to share some of Egypt's voice right then and there since 40,000 people were in Egypt for the climate summit, and Egypt is a part of the larger world. We thought that there was no better moment than then in terms of personal and content goals.

Necesitábamos compartir algo de la voz de Egipto en ese mismo momento, ya que 40 000 personas se encontraban en Egipto con motivo de la cumbre sobre el clima, y Egipto forma parte de un mundo más amplio. Pensamos que no había mejor momento que ese en cuanto a objetivos personales y de contenido.

Confusión, caos y avivamiento de las llamas

El camino que lleva al Sindicato de Periodistas está vinculado a los acontecimientos que precedieron a la revolución de 2011. Es un símbolo importante de la lucha por la liberación de Egipto.

Libertad, vida y victoria para Alaa Abdel Fattah, amigo y luchador. La fotografía fue tomada durante una protesta en las escaleras del Sindicato de Periodistas en 2007.

Sin embargo, desde su elección a la presidencia del Sindicato en 2013, que coincidió con la llegada al poder del presidente Abdel Fattah el-Sisi [14], Dia Rashwan [24] se ha centrado en pulir la imagen del régimen [25] y purgar el diálogo nacional de su contenido político [26], impulsado por las órdenes de la Agencia Nacional de Seguridad (ANS) de Egipto [27]. Esto ha repercutido negativamente en los periodistas y los interesados en preservar las libertades, y también en la actuación de la ANS, que se ha acostumbrado a la sumisión y el silencio. Según Azab:

Rashwan suffocated the Syndicate. He didn't even allow it to become a social club where people could go, sit and talk. He transformed it into a limited civil entity.

Rashwan didn't speak to us during the sit-in, but he oversaw it the entire time. He directed employees to bring him the ID cards of anybody who came to meet us. We expected this, and we dealt with him as part of the security apparatus deployed throughout the sit-in.

Rashwan asfixió al Sindicato. Ni siquiera permitió que se convirtiera en un club social donde la gente pudiera ir, sentarse y hablar. Lo transformó en una entidad civil limitada.

Rashwan no habló con nosotros durante el plantón, pero lo supervisó todo el tiempo. Ordenó a los empleados que le trajeran los documentos de identidad de quien viniera a reunirse con nosotros. Lo esperábamos y tratamos con él como parte del dispositivo de seguridad desplegado durante el plantón.

Aunque el Sindicato no consiguió usar el plantón para generar un verdadero debate, el discurso fue un éxito porque reveló las intenciones subyacentes de las distintas corrientes políticas, como señala Azab:

Because there were mediators between industry veterans and the journalists, this may have been the most candid discussion in a long time. They were attempting to persuade us to abandon the sit-in.

Faced with pandemonium, the Syndicate Independence Movement [28] declared that this was a solo action by three members without consulting the leaders. They deemed it sudden, hurried and required more planning.

We began the sit-in believing that we were protesting against the authorities, the «general silence in Egypt,» and the suffocation caused by Rashwan, but we quickly discovered that we were in a serious reappraisal with the current, to which we primarily belong.

Como había mediadores entre los veteranos de la industria y los periodistas, tal vez haya sido la discusión más sincera en mucho tiempo. Intentaban convencernos de que abandonáramos el plantón.

Ante los hechos, los independentistas del sindicato [28] declararon que se trataba de una acción en solitario de tres miembros, sin consultar a los dirigentes. La consideraron repentina, precipitada y que requería más planificación.

Empezamos el plantón creyendo que protestábamos contra las autoridades, el «silencio general en Egipto» y la asfixia provocada por Rashwan, pero pronto descubrimos que estábamos en un serio replanteamiento con la corriente a la que principalmente pertenecemos.

Temor y ansiedad

De izquierda a derecha, Mona Selim, Emad Auf y Rasha Azab el último día del plantón en el Sindicato de Periodistas Egipcios. Rasha, Eman y Muna tienen los derechos de la imagen, usada con autorización.

No se puede exagerar la audacia del plantón, sobre todo teniendo en cuenta que las tres periodistas pertenecen a una cultura que no tolera que las mujeres se salgan del guion.

Como era de esperar, la preocupación por las ramificaciones de la huelga acompañó a las periodistas en ese viaje:

We decided to protect ourselves when we went to the Journalists Syndicate. Of course, I am well aware that in such harsh conditions, no one is safe, whether they go to their union or walk down the street. Egypt is ruled by tyranny, and tyranny affects everyone, whether they are involved or not.

Any concern for us stems from apprehension about what might happen to us after the strike.

We only told close family members, who needed to know. Iman informed her children and family, and Mona informed hers. The rest found out through the Internet or through friends.

We had to face their concern for us.

Decidimos protegernos acudiendo al Sindicato de Periodistas. Por supuesto, soy muy consciente de que en condiciones tan duras, nadie está a salvo, tanto si va a su sindicato como si camina por la calle. Egipto está gobernado por la tiranía, y la tiranía afecta a todos, implicados o no.

Cualquier preocupación por nosotros viene de la aprensión por lo que pueda pasarnos después de la huelga.

Solo se lo dijimos a los familiares cercanos, que necesitaban saberlo. Iman informó a sus hijos y familiares, y Mona a los suyos. El resto se enteró por internet o a través de amigos.

Tuvimos que enfrentar su preocupación por nosotros.

Los periodistas pusieron fin pacíficamente a su plantón, y Abd el-Fattah puso fin a su huelga de hambre de seis meses [29] siete días después.

Aunque hasta ahora no les ha ocurrido nada, siguen preocupados, sobre todo después de que Egipto bloqueó el conocido sitio web Daraj [30], plataforma panárabe independiente de noticias por cubrir el plantón, entre otras cosas.

Por último, Azab señala que, en última instancia, la protesta cosechó pequeñas pero importantes victorias para los periodistas:

We reinstated a specific feminine voice. Women in Egypt have earned the right to hold positions of leadership in society. Laila Soueif [31] is leading the world in her quest for her son's freedom. Sanaa Seif [32] leads the world because of her brother Alaa Abdel Fattah.

Women are naturally at the forefront of any recent battle. This was the long-term societal impact of the revolution [33].

Hemos restablecido una voz femenina específica. Las mujeres de Egipto se han ganado el derecho a ocupar puestos de liderazgo en la sociedad. Laila Soueif [34] lidera el mundo en su búsqueda de la libertad de su hijo. Sanaa Seif [35] lidera el mundo gracias a su hermano, Alaa Abdel Fattah.

Como es natural, las mujeres están al frente de cualquier batalla reciente. Este fue el impacto social duradero de la revolución [12].