[1]Bloqueo de camino en el norte de Kosovo, diciembre de 2022. Foto [2] de Meta.mk, usada con autorización.
Esta historia se basa en el artículo publicado por EFJ [3], integrante de IFEX [4].
El 2 de enero, la Federación Internacional y Europea de Periodistas (IFJ-EFJ) alertó [3] sobre las crecientes amenazas contra periodistas y trabajadores de medios que informaban sobre la tensa situación entre Serbia y Kosovo desde el norte de Kosovo, y se unió a su filial, la Asociación de Periodistas de Kosovo (AJK) [5], en solicitar a las autoridades competentes —Misión de la Unión Europea por el Estado de Derecho en Kosovo (EULEX), Fuerza de Kosovo (KFOR) y Policía, entre otras— que adoptaran las medidas necesarias para garantizar la seguridad de periodistas que reportan desde el terreno.
Recientemente, han escalado las tensiones entre Serbia y Kosovo, especialmente en la dividida ciudad de Mitrovica [6], pues Belgrado (Serbia) acusa a Pristina (Kosovo) de infringir los derechos de la comunidad serbia.
El 27 de diciembre, se levantaron nuevas barricadas unas horas después de que el presidente serbio, Aleksandar Vučić, pusiera al Ejército en el nivel de alerta máxima [7], y algunos tiroteos y bloqueos de carreteras llevaron a los países a pensar que podría estallar pronto un conflicto violento: en la Convención Nacional del Parlamento de Serbia, la primera ministra Ana Brnabić dijo [8] que las tensiones estaban «al borde del conflicto armado».
Si bien se habían hecho importantes avances en materia de seguridad para los periodistas en Kosovo gracias a la labor de los asociados de la Plataforma de Seguridad para Periodistas del Consejo de Europa [9], la esfera mediática está amenazada por los recientes ataques físicos y sus implicaciones sobre la libertad de prensa en el país y sobre la información de los acontecimientos en su región norte.
El 27 de diciembre, Leonita Bajrami, periodista de Top Channel, fue atacada [10] con explosivos pirotécnicos mientras informaba sobre las nuevas barricadas para el programa «Albania Live» en el sexto día de ataques contra periodistas y trabajadores de medios ocurrido en el norte de Kosovo. Se informó de otros cinco ataques ese mismo mes.
El 9 de diciembre, atacaron [11] a un equipo de Kallxo.com cerca de la escuela técnica de Mitrovica, y el día siguiente, atacaron [12] con explosivos a un equipo de la red de televisión RTV Dukagjini; el 19 de diciembre, dos personas del equipo de Klan Kosova reportaba desde cerca de las barricadas de Zubin Potok cuando varios enmascarados les lanzaron piedras [13]. El 20 de diciembre, un equipo de TeVe1 sufrió un ataque con explosivos [14] en Mitrovica, y el 26, otro equipo de Klan Kosova también fue atacado con piedras hasta que les rompieron la ventanilla [15] del auto. En ambos ataques estuvo el presentador Elsad Sinani.
«Es un alivio saber que ha bajado la tensión luego de que los serbios empezaran a desmontar las barricadas de los caminos en el norte de Kosovo el 29 de diciembre, pero deben continuar los esfuerzos diplomáticos para que las y los periodistas puedan trabajar con seguridad en la región», expresó el secretario general de EFJ, Ricardo Gutiérrez. «Ahora necesitamos avanzar en el diálogo necesario para garantizar la seguridad de periodistas y, también, avanzar finalmente con los numerosos casos de impunidad [16] por los asesinatos y desapariciones de periodistas en la región».
El secretario general de IFJ, Anthony Bellanger, dijo a EFJ:
Attacks against journalists and media workers, which are ultimately infringing press freedom, are unacceptable. The IFJ welcomes the progress that has been made to decrease tensions and reminds that too many cases [17] of missing and killed journalists are still unpunished in the region. This is why the adoption of a UN Convention [18] for the safety and independence of journalists is badly needed.
Los ataques contra periodistas y trabajadores de medios, que en definitiva violan la libertad de prensa, son inaceptables. La IFJ celebra los avances para disminuir las tensiones, pero recuerda que siguen impunes demasiados casos [17] de asesinatos y desapariciones de periodistas en la región. Por eso se hace muy necesaria la adopción de una Convención de Naciones Unidas [18] para la seguridad y la independencia de periodistas.