Usain Bolt y muchos otros jamaicanos han sido víctimas de un gran fraude financiero, y ahora quieren respuestas

Imagen del velocista jamaicano Usain Bolt por Samsung Belgium en Flickr remezclada con elementos de CanvaPro (CC BY 2.0).

La noticia fue estremecedora, y las ondas expansivas siguen sacudiendo a la opinión pública y a los medios jamaicanos. El 13 de enero se supo que la superestrella jamaicana Usain Bolt podría haber perdido una inversión de más de 12 millones de dólares como consecuencia de un importante fraude en una casa de valores de Kingston. Los medios informaron que los ahorros de Bolt estaban destinados a su jubilación y a sus padres, y su abogado confirmó que la cuenta del campeón olímpico refleja ahora un saldo de solo 12 000 dólares. Bolt amenaza con demandar.

Dada la fama internacional de Bolt, el interés mundial por la historia es comprensible, y la atención también puede resultar útil a otros 40 inversionistas que también corren el riesgo de perder los ahorros de toda su vida. Entre ellos hay adultos mayores, jamaicanos en el extranjero e incluso una amiga de la infancia de la presunta autora del fraude, Jean-Ann Panton, ex asesora patrimonial de Stocks and Securities Limited (SSL).

El 10 de enero, SSL denunció el fraude, estimado en 3000 millones de dólares jamaicanos (unos 19 millones de dólares estadounidenses), a la Comisión de Servicios Financieros (FSC), el regulador gubernamental. El informe se presentó después de una declaración de Panton del 7 de enero y certificada por un juez de paz, en la que detallaba los nombres de los inversionistas defraudados y las cantidades de en dólares estadounidenses y jamaicanos que les habían sido sustraídas. El nombre de Bolt no aparecía en la declaración, que fue filtrada y ampliamente difundida en algunas plataformas de medios sociales.

SSL fue sometida a una supervisión reforzada el 12 de enero, y el 17 de enero se nombró un gestor temporal. Desde entonces, la empresa ha retirado las imágenes de sus directivos de su sitio web y ninguno ha hablado en público..

Panton aún no ha sido detenido y, al parecer, está cooperando con los investigadores de la División de Investigaciones Financieras y la Brigada de Fraudes de la Policía, que registraron dos propiedades relacionadas con Panton el 20 de enero. Se mantuvo alejados a los medios, aunque los vecinos se quejaron de que estaban ahí. Mientras tanto, las imágenes de video del registro –en las que aparecía el sospechoso– se difundieron y comentaron en las redes sociales.

El hecho de que Usain Bolt sea una de sus víctimas ha convertido este escándalo de fraude en algo personal para muchos jamaicanos. Bolt es querido y respetado en su país y por los jamaicanos en el extranjero. Como señaló Anne C. Bailey, académica y filántropa jamaicana que vive en Estados Unidos, Bolt ama a su país y optó por mantener estrechos lazos con Jamaica a través de sus inversiones, cuando podría haberse ido a otra parte:

We know fraud takes place all over the world, but we have to have a sense of accountability for our part of the world – Jamaica – a small island whose influence is historically greater than its size. Part of this influence is Usain Bolt who, from humble beginnings and sheer hard work and sacrifice, rose to the top […] we would do better to return to the CORE VALUES of our grandparents and great-grandparents. They had much much less, yet they NEVER stooped so low.

Chasing money and things at all costs, we have let them down. And we have let ourselves down. What are our limits? When do we say enough is enough?

I am hoping this horrible situation with Bolt and the others who lost their money will help us find the road back to […] core values of honesty, integrity, and patriotism that Bolt so vividly represents and that we desperately need right now.

Sabemos que el fraude se produce en todo el mundo, pero tenemos que tener un sentido de la responsabilidad para nuestra parte del mundo – Jamaica, pequeña isla cuya influencia es históricamente mayor que su tamaño. Parte de esta influencia es Usain Bolt, quien desde sus orígenes humildes y con puro trabajo duro y sacrificio, llegó a la cima […] haríamos mejor en volver a los VALORES FUNDAMENTALES de nuestros abuelos y bisabuelos. Ellos tenían mucho menos, pero NUNCA cayeron tan bajo.

Al perseguir dinero y cosas a toda costa, les hemos defraudado. Y nos hemos defraudado a nosotros mismos. ¿Cuáles son nuestros límites? ¿Cuándo decimos basta?

Espero que esta horrible situación con Bolt y los demás que perdieron su dinero nos ayude a encontrar el camino de vuelta a […] los valores fundamentales de honestidad, integridad y patriotismo que Bolt representa tan vívidamente y que necesitamos desesperadamente en estos momentos».

Por su parte, Jean Lowrie-Chin, fundadora y presidenta ejecutiva de la organización local sin fines de lucro Comunidad Caribeña de Jubilados (CCRP), señaló la creciente preocupación por el fraude a personas mayores y afirmó que la organización está trabajando con la Asociación de Banqueros de Jamaica (JBA) para identificar formas de proteger a los jamaicanos mayores.

Siguen circulando preguntas e inquietudes sobre la SSL y el alcance de las pérdidas sufridas por Bolt y otros, con altos niveles de especulación en aplicaciones de mensajería y redes sociales. También se ha prestado atención al papel de la agencia reguladora del Gobierno, la FSC. Su director ejecutivo, Everton McFarlane, ofreció una rueda de prensa el 18 de enero tan mal gestionada que la mayoría de los espectadores consideraron que empeoró la situación. Al jefe de la FSC lo bombardearon con preguntas sobre cuándo la FSC había advertido «señales de alarma» sobre las actividades de SSL, y cómo la agencia había abordado problemas que, según los informes, habían surgido ya en 2017. Se mostró evasivo y dijo que estaba «limitado» para dar respuestas a algunas preguntas. El sonido de la retransmisión en directo, disponible solo en Facebook e Instagram, era casi inaudible, y en lugar de ofrecer garantías, la rueda de prensa solo sirvió para aumentar la ansiedad del público.

Al día siguiente, el ministro de Finanzas, Nigel Clarke, informó a los periodistas que el jefe de la FSC había renunciado con efecto al 31 de enero y que se iría de permiso el 20 de enero, y añadió:

Seremos completamente transparentes sobre lo que ha ocurrido’, dijo Nigel Clarke a la periodista Dionne Jackson Miller sobre la investigación de fraude de SSL.

El ministro dijo que haría una declaración política el 23 de enero, aunque no en el Parlamento. Antes calificó el fraude de «perverso», y dijo que podría ser que el Estado recuperara activos adquiridos con los fondos robados.

El opositor Partido Nacional Popular recomendó una auditoría de la FSC y pidió al Gobierno jamaicano que considerara la posibilidad de trabajar con expertos extranjeros, especialmente en rubros de contabilidad forense y ciberseguridad, mientras prosiguen sus investigaciones.

Aunque no hizo comentarios específicos sobre el caso, la Asociación de Agencias de Valores de Jamaica (JSDA) dijo que está «comprometida con una investigación exhaustiva y la plena rendición de cuentas de todos los autores del fraude». Pero a medida que se iban conociendo más detalles del fraude de SSL, los abatidos jamaicanos empezaron a preguntarse en quién se podía confiar.

La ecologista Diana McCaulay bromeó en Twitter:

Muchos anuncios en mis cronologías de medios sociales de las instituciones financieras dicen lo seguro que es el dinero si está con ellos;

Otro tuiteó que:

A menos que toda esta situación sea auditada e investigada por
Pamella Munroe Ellis, auditora general, y Greg Christie, director ejecutivo de la Comisión de Integridad de Jamaica, voy a tomar los resultados con pinzas. Amigo y compañía no pueden investigar a amigo y compañía.
Sólo confío en los dos mencionados para perseguir y presentar la verdad.

Pamela Munroe Ellis es la muy respetada auditora general de Jamaica, y Greg Christie dirige la Comisión de Integridad del país, que aprovechó la ocasión para advertir del impacto de la corrupción en los inversores extranjeros:

La corrupción ahuyenta las inversiones, necesarios para estimular el crecimiento económico.
————-
El impacto de la corrupción en la inversión privada extranjera es perjudicial. La corrupción equivale a un impuesto indirecto que se cobra a los inversionistas. Reduce la competitividad de un país. Los inversionistas huyen de los países con insuficientes salvaguardias contra la corrupción.

Christie agregó:

Bloomberg | ‘El jamaicano Usain Bolt ha perdido millones de dólares de sus ahorros por una estafa.
Usain Bolt ha perdido millones de dólares de sus ahorros en una estafa.

La cuenta formaba parte de los ahorros de Bolt para su jubilación y toda su vida.
Los reguladores toman el control de SSL tras las denuncias de presunto fraude.
————-
Las circunstancias de la tragedia que se ha abatido sobre el honorable Usain Bolt también han dañado gravemente la ya deteriorada reputación de Jamaica como capital mundial del asesinato, tierra de estafadores de la lotería y país que lucha contra el azote de la corrupción percibida y el crimen organizado.

Una semana después de conocerse la noticia, el primer ministro, Andrew Holness, rompió su silencio sobre el asunto, dijo que estaba «totalmente disgustado y molesto», y expresó su solidaridad con las víctimas. Instó a la población a no dejarse llevar por el pánico, aseguró que «no se escatimarán esfuerzos para descubrir todo el alcance de la actividad fraudulenta y llevar a los autores ante la justicia». Hasta la fecha no se ha dado a conocer el nombre de ningún otro sospechoso.

Mientras tanto, el hombre cuyo nombre destapó el escándalo tuiteó algunos comentarios breves y concisos. En uno usó la letra de una canción:

«En un Mundo de mentiras….¿Dónde está la verdad?
El mal de la Historia….¿Cuál es la raíz?…EL DINERO

Su tuit más reciente sobre la falta de respuesta a la carta de su abogado solo tenía dos palabras:

Silencio ensordecedor.

Él y otros jamaicanos están a la expectativa.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.