«¡Mejor no despiertes!»: Tuiteros recuerdan el día en que Rusia invadió Ucrania en 2022

Ilustración creada con OpenAI por Global Voices

Hace un año, el 24 de febrero, Rusia invadió Ucrania y comenzó a bombardear el país. La tuitera @KantWilde, que se describe como periodista que vive en Toronto y trabaja actualmente para BBC Mundo, preguntó a los usuarios en línea cómo recuerdan ese aciago día. Hasta ahora ha recopilado 173 respuestas de personas de distintos países y nacionalidades. Global Voices ha traducido algunos de estos tuits.

La propia @KantWilde dijo:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.

Estos son algunos de los recuerdos del día en que Rusia inició la invasión a gran escala de Ucrania el 24 de febrero de 2022.

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Mi marido me despertó por la mañana, me trajo una taza de café a la cama, hablamos un poco de todo y cuando terminé de beber me dijo «la guerra ha comenzado». Me distrajo del teléfono para que tuviera tiempo de beber un último café en esa vida que se había terminado. Es genial.

Otra tuitera escribió:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Me levanté, leí las noticias, compré tres billetes para salir del país en solo 20 minutos. Para mí, mi hijo y el perro. Desde entonces no hemos vuelto a casa.

Esto es lo que dice otro tuitero sobre ese día:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Estaba durmiendo. Un amigo que vive en una zona horaria a cuatri horas de la mía me envió un mensaje: «Mejor no despiertes». No puedes describir las primeras sensaciones que tienes por las noticias de forma más elocuente. Solo el deseo de no despertar. Luego lloré un buen rato en el baño. Parece que ha pasado una eternidad.

El sentimiento de irrealidad se aprecia en este tuit:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Por alguna razón, la perra se despertó temprano, a las 6. Me fui a dar un tranquilo paseo con ella, y como siempre, comencé a pasar noticias en el teléfono móvil. Volví corriendo atropelladamente y desperté a mi marido con las palabras: «estamos bombardeando Kiev, ¿qué hacemos?».

Algunos recuerdan que su primera reacción fue protestar:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Fue dos días después de que mis empleados volvieran de su baja por enfermedad, y yo me iba a esquiar el 25 todo el fin de semana después de 14 días de trabajo. Resultado, toda la mañana del 24 estuve llamando y escribiendo a amigos en Ucrania y me quedé jo…mente horrorizado. Después de trabajar me pegaron en la plaza mientras protestaba con mis colegas

Para muchos, la fecha del 24 de febrero es un recordatorio de la rápida muerte de amigos:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Prácticamente no me acuerdo. Me dormí temprano, leyendo algo en el trabajo, y me despertó a las 7 de la mañana un amigo que se iba a trabajar. Pidió tiempo libre y no fue a ningún lado, y su grito “Ginny, levántate, mier…, ha empezado la Tercera Guerra Mundial”. Dos semanas después, supimos que había muerto un cineasta de Kharkov amigo nuestro.

Otros tienen la impresión de que la vida deja de tener sentido:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Conduje al trabajo, todo iba bien. Hace tiempo que el delirio del put… abuelo [como llaman a Putin los rusos contrarios a sus políticas] no engancha a la gente. Llego al trabajo, comienza la guerra. Dos días de mirar las noticias sin parar. Desde entonces, durante todo este año, tengo la impresión de no estar haciendo nada importante y necesario contra la guerra. Todo es pequeño e inútil.

Otra experiencia habitual es la vergüenza:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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El 23 de febrero llamé a mi padre para felicitarlo (militar profesional jubilado desde hace 30 años), y me contestó que no aceptaba felicitaciones y que se avergonzaba del Ejército. Antes de acostarnos, intentamos comprar billetes para volar a la Federación Rusa en mayo, pero el pago no funcionó y nos fuimos a la cama. Nos levantamos a las 8 de la mañana y leímos las noticias mientras oíamos llorar a nuestro vecino ucraniano al otro lado de la pared.

Algunos, aunque en Rusia, viven en la misma frontera con Ucrania, y recuerdan ese día con el sonido directo de los bombardeos:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Nos despertamos sobre las 4 o 5 de la mañana porque las ventanas y la puerta del balcón temblaban, vivimos en Bélgorod.
No estaba claro lo que sucedía, pero entramos en los chats de las redes sociales y lo entendimos todo.

La guerra también ha separado a muchas familias, como recuerda este tuitero:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Guerra.

A las 10 llamé a la embajada polaca sobre los documentos para el visado de mi hija.

Nadie contestó.

A las 12 estaba trabajando.

Vi algunos caníbales por ahí (colegas que apoyaban la guerra) 

Estamos en Polonia.
Nuestra hija está en Belarús.
Nuestro hijo en Armenia.

No hay vuelta atrás.

Para muchos, la guerra también fue el detonante para el exilio:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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La chica con la que se comunicaban escribió : «¿Y qué nos pasará ahora a nosotros? ¿Qué hacemos?». No lo entendí y abrí el segundo mensaje de texto, y un amigo había escrito: «La guerra comenzó mientras dormías». Pude irme en abril tras la persecución, desde entonces no he estado en casa y parece que no volveré pronto.

Para muchos, los países vecinos se convirtieron en los refugios más seguros y accesibles:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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El día anterior, mi marido y yo hablamos justo antes de acostarnos de que al final no iba a haber guerra. No puede ser. La mañana del 24 de febrero me desperté más tarde que mi marido y lo primero que le oí decir fue «ha empezado la guerra». Lloré todos los días durante dos semanas hasta que huimos a Kazajistán, con mi madre.

Impotencia con un punto de premonición es una experiencia que comparten muchos:

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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No recuerdo cómo me desperté, pero recuerdo muy bien que solo pude dormir a partir del tercer día. No podía comer, ni pensar en nada, ni existir. No soltaba el teléfono, lloraba y no lo creía, aunque llevaba desde finales de 2020 «esperando» esta guerra. Dentro de mí se abrió un agujero negro.

Otros también se preguntan cómo seguir la vida diaria en semejantes condiciones: 

Intenté recordar lo que sucedió el 24 de febrero del año pasado. En general, para mí comenzó a las 23:10 hora de Toronto, cuando una de las cuentas de OSINT en Twitter escribió que había actividad en las frecuencias de intercomunicación de los aviones de combate rusos.
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Últimamente, escucho las noticias todo el tiempo. Solo teníamos un día, fui a comprar provisiones y oí que [él] había atacado. Lloré dos horas en el aparcamiento. Luego me fui a casa, y me volví loca ver que la vida seguía, los niños van a la escuela, empieza la primavera. Y en algún lugar, mi patria mata gente.

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