Este artículo es parte de una serie de J. Nathan Matias para un recorrido en bicicleta de más de 800 kilómetros en junio de 2023 que recauda fondos para Rising Voices, el programa de lenguas indígenas o en peligro de extinción de Global Voices, y la Red de Justicia Ambiental de California Central. Dona a la iniciativa aquí.
¿Qué significa enamorarse de un lugar y al mismo tiempo verlo claramente como lo que es? Sentado frente a Melissa Montalvo, periodista del Fresno Bee, creo haber encontrado la respuesta.
Cuando conocí a Melissa, yo estaba en el tercer día de un recorrido en bicicleta con Ivan Sigal por el Valle Central de California siguiendo los pasos de la Marcha de los Trabajadores Agrícolas de 1966.
Para llegar a Fresno, descendimos dos mil metros desde las montañas de Sierra Nevada a través del valle de Yokuts, donde el condado de Fresno está tratando de impugnar la decisión estatal de enero de 2023 de cambiar el nombre racista del valle de Yokuts (antes se conocía como Squaw Valley; «squaw» es un término despectivo usado para referirse a las mujeres nativas norteamericanas). Lo sabía porque Melissa escribió un artículo al respecto, uno de los muchos que leí mientras planeábamos nuestro recorrido en bicicleta. En marzo, cuando estaba decidiendo si posponía el viaje por las inundaciones en la región, el artículo de Melissa sobre los planes de evacuación fue una importante fuente de información. Y cuando intentaba comprender el legado de César Chávez y el movimiento de trabajadores agrícolas en Fresno, recurrí al artículo de Melissa sobre la oposición del condado a una iniciativa municipal de un millón de dólares para invertir en negocios locales y cambiar el nombre de una calle en honor al famoso organizador sindical.
Me encontré con Melissa en Campus Pointe, complejo comercial y mercadillo frente a Cal State Fresno. En la acera, familias negras y morenas hacían cola para comer helado y ver la última película de Spiderman, protagonizada por el superhéroe afrolatino Miles Morales.
Como periodista bilingüe, Melissa coedita «La Abeja«, semanario de temas latinos del Fresno Bee «escrito para latinos por latinos». Cuando le pregunté por La Abeja, podría jurar que la cafetería se iluminó con el resplandor de su entusiasta sonrisa. Las actualizaciones diarias por correo electrónico del Fresno Bee (bee es abeja en inglés) suelen estar repletas de noticias de última hora que a menudo implican violencia, peligro y corrupción, pero La Abeja, de ritmo más lento, me había ofrecido una ventana a la cultura del Valle Central y sus debates a más largo plazo.
Melissa me explicó que La Abeja es el intento más reciente del Fresno Bee de llegar a una comunidad latina más amplia en la zona de Fresno. Según el censo de Estados Unidos, el 54% de la población del condado de Fresno es hispana o latina, aunque la mayoría de los reportajes de la región los han hecho periodistas blancos que escriben para un público anglófono. Como boletín bilingüe, La Abeja une a la comunidad a través de lenguas y herencias paralelas.
Melissa fue de Los Ángeles a Fresno hace dos años como periodista de Report For America, programa que copatrocina a periodistas emergentes para que informen sobre comunidades y temas poco cubiertos. Le gustó tanto su trabajo que decidió quedarse; la semana en que nos conocimos era la primera en su nueva ubicación.
Mientras tomábamos un refresco, Melissa nos habló de las historias que más le gustaban. Sobre Joseph Ríos, el nuevo poeta laureado de la ciudad de Fresno que ganó el American Book Award en 2018. Sobre grandes investigaciones de corrupción y cantantes pop mexicanos que venían a la ciudad. Sobre la obra de David «Mas» Masumoto, que lidera una granja familiar que está reimaginando la agricultura sostenible en el valle y la está incorporando en un hermoso libro de memorias sobre la historia de exclusión y discriminación del valle hacia los japoneses estadounidenses.
Aunque el periodismo local está en declive en el Valle Central, como en todas partes, Melissa nos habló de la red de periodistas de todo el valle en la que confía cuando trabaja en reportajes. Describe la profundidad del equipo del Merced Sun-Star, el equipo financiero del Modesto Bee y el excelente juego en TikTok de San Luis Obispo Tribune. También nos habla del programa de Fresno State para periodistas de color, que paga a estudiantes hasta cinco años para que aprendan periodismo escribiendo historias para el medio juvenil de Fresno The Know. Melissa también informa para Central Valley News Collaborative, iniciativa sin fines de lucro creada durante la pandemia de COVID-19 que coordina cuatro medios impresos, digitales y radiofónicos para informar sobre las comunidades de color.
Al oír hablar a Melissa, me acuerdo de los debates sobre la función del periodismo en las democracias. En el libro «Why Democracies Need an Unlovable Press«, Michael Schudson sostiene que el periodismo es algo más que información e investigación: da empatía social, habla a la gente «de los demás en su sociedad y en su mundo para que puedan llegar a apreciar los puntos de vista y las vidas de otras personas, especialmente de las menos favorecidas». Aunque Schudson no se equivoca, su idea de la empatía periodística parte del supuesto de que el periodismo está escrito por y para quien ostenta más poder.
Pero el periodismo también es un espejo. En manos de Melissa Montalvo y los demás periodistas de La Abeja, es un espejo para una comunidad que constituye la mayoría de la población de Fresno pero que ostenta una minoría de su poder, una comunidad que lucha para que se la vea y que trata de verse con claridad. Y la vista en el espejo es hermosa.
Para más información sobre el viaje, incluidos sus objetivos y el itinerario de Nathan e Ivan, visita nuestra página especial.