En Azerbaiyán, desalojaron un pueblo entero para el yerno del presidente

Imagen de Arzu Geybullayeva

Este artículo se publicó originalmente en Abzas Media. Global Voices publica una versión editada en virtud de un acuerdo de asociación de contenidos.

El pueblo de Garachayli, en Azerbaiyán, fue una vez el hogar de diez familias. Su sustento dependía de las tierras que cultivaban. Pero en 2017, el territorio de la aldea fue arrendado a la empresa Shabran Agrocomplex LLC por 49 años. Finalmente, todas las familias se vieron obligadas a trasladarse a pueblos cercanos, incluida la familia de Tahir Rasulov, que en busca de una remuneración justa por sus tierras luchó, contra el desalojo forzoso en los tribunales. Pero dos años después, Rasulov también se vio obligado a marcharse con las manos vacías.

Los habitantes del pueblo dijeron a Abzas Media que la tierra pertenecía al gran muftí de Azerbaiyán, Allahshükür Pashazade, líder espiritual de los musulmanes de Azerbaiyán. Pashazade arrendó las tierras a los lugareños, que las cultivaron y se ganaron la vida con eso. Entonces, Agrocomplex llegó a la aldea, informó a los aldeanos que tenían que trasladarse. Rasulov relató a Abzas Media los problemas que la empresa le causó a él y a otros lugareños: «me torturaron y atormentaron mucho. Me amenazaron con la Policía. Me sacaron de mi hogar ancestral».

Desde 2017, todos los ocupantes anteriores del pueblo se han quedado sin tierras. En un intento de investigar el acuerdo y la propiedad de Shabran Agrocomplex, Abzas Media habló con los lugareños y revisó una base de datos de documentos disponibles para obtener más información.

La investigación reveló que el fundador de Shabran Agrocomplex es Baku Agropark, antes conocido como AzEcoFarm. Baku Agropark pertenece al empresario Samad Gurbanov, esposo de Arzu Aliyeva, hija menor del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev.

Tras la inauguración del primer invernadero de Baku Agropark en 2017, que cultiva tomates, la empresa de Gurbanov recibió amplias oportunidades de las instituciones estatales. Las investigaciones muestran que la inversión personal de Gurbanov de un total de 11,7 millones de manats (6,9 millones de dólares) se juntó con un préstamo adicional de 10 millones de manats del Fondo de Desarrollo Empresarial financiado por el presupuesto estatal. El préstamo se concedió a Gurbanov por un período de diez años, con un tipo de interés fijo del 5% anual.

La empresa de Gurbanov también quedó exenta de pagar la instalación del cableado eléctrico durante la construcción del invernadero, que corrió a cargo de una empresa llamada Retro Holding, propiedad de Arif Pashayev, suegro de Ilham Aliyev. Otros favores a la inversión incluyeron préstamos favorables para la infraestructura de irrigación del agrocomplejo, todo a cargo del Estado, y muchas de las empresas implicadas no revelaron los costos totales.

Mientras tanto, los agricultores de los alrededores del complejo no encuentran agua para regar sus campos. En una entrevista con Abzas Media, un habitante del pueblo cercano dijo: «mira, necesitamos agua ahora mismo. El cultivo está en su apogeo. Cuanto menos cosecha se recoja, mayores serán las posibilidades de que el Gobierno se haga cargo de la tierra y la ceda a quien siembre mejor el grano y consiga mayor producción».

La escasez de agua en los pueblos cercanos no es el único problema. Los habitantes de otro pueblo afirman que sus casas no reciben suministro de gas, aunque el agrocomplejo sí lo recibe a través de una línea de gas independiente. Un lugareño dijo a Abzas Media que las familias queman cualquier madera que puedan encontrar para calentar sus hogares y mantener su forma de vida.

En estas regiones remotas de Azerbaiyán, prácticamente no hay oportunidades de empleo para los aldeanos. Los que hablaron con Abzas Media dijeron que el agrocomplejo es su último recurso para encontrar empleo y, sin embargo, se les niega el trabajo o se les ofrecen salarios bajos que oscilan entre 300 y 350 manats al mes (unos 200 dólares). Como dijo un aldeano: «Es la esclavitud moderna».

Los documentos judiciales muestran que Baku Agropark también paga un alquiler increíblemente barato por las tierras que tiene arrendadas en el pueblo de Garachayli: un alquiler anual de 2520 manats por 1738 hectáreas de tierra. Tahir Rasulov, habitante de la aldea, dijo a Abzas Media que hasta 2019, pagó un alquiler de 30 manats por hectárea de esa tierra. Sin embargo, Baku Agropark paga solo 1.50 manats por hectárea por su inversión multimillonaria.

La propiedad de Samad Gurbanov va más allá del Baku Agropark. Está Baku Agropark Trading House, dedicada al comercio al por mayor de frutas y verduras; Maxitrading LLC, dedicada a la importación y distribución de productos alimenticios; así como varias otras empresas pertenecientes al Grupo Mirlex (Mirlex Development y Mirlex Construction LLC), dedicadas a la venta de extinguidores, instalación de alarmas automáticas contra incendios, aparcamientos y sistemas de videovigilancia.

Las oficinas de muchas de las empresas de Samad Gurbanov están en Port Baku Towers, centro de negocios de élite propiedad de Pasha Holding.

La empresa tiene un almacén de alimentos en la región de Absheron.

Los intentos de los periodistas de Abzas Media de hablar con los responsables del complejo agrícola en Shabran resultaron inútiles. Un guardia de seguridad detuvo a nuestro equipo de grabación y le dijo que ninguno de los directivos se encontraba en el complejo.

Los periodistas no fueron los únicos que no pudieron ingresar a las instalaciones de la planta. Cuando los habitantes del pueblo se vieron obligados a huir, dejaron el cementerio del pueblo. Desde que se construyó el complejo y se les arrebataron sus tierras, tienen que pedir permiso a la dirección del agrocomplejo incluso para visitar las tumbas de sus familiares fallecidos.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.