En abril, Reporteros Sin Fronteras (RSF), organización internacional que defiende la libertad de prensa, publicó 10 datos del represivo ambiente de los medios en Hong Kong. Es en respuesta a la declaración de una portavoz del Gobierno de China con respecto a que la libertad de prensa de la ciudad está “totalmente protegida”. El comunicado de China se emitió después de que se negó la entrada de un representante de RSF a Hong Kong.
Con ocasión del Día Mundial de la Libertad de Prensa el 3 de mayo, damos a conocer esos 10 datos, además de su contexto local.
Periodistas encarcelados en Hong Kong
Diez periodistas y defensores de la libertad de prensa están encerrados actualmente en Hong Kong. Siete estaban afiliados al desaparecido medio a favor de la democracia Apple Daily, incluido su fundador Jimmy Lai Chi-ying, que en la actualidad es juzgado por “colusión con potencias extranjeras para poner en peligro la seguridad nacional” de conformidad con la ley de seguridad nacional impuesta por Pekín y promulgada el 30 de junio de 2020. En caso de ser declarado culpable, el magnate de 76 años deberá cumplir una pena de cadena perpetua en prisión.
Otras periodistas encerradas son Claudia Mo Man-Ching y Gwyneth Ho Kwai-Lam, acusadas de subversión del Estado por su participación en las elecciones primarias a favor de la democracia de 2020.
Cierre de medios prodemocracia
Una semana después de que Hong Kong aprobó su ley de seguridad nacional, conocida como artículo 23, Radio Free Asia, cadena financiada por el Gobierno estadounidense, anunció que el 29 de marzo de 2024 cerraría sus oficinas en la ciudad.
En 2021, Apple Daily y Stand News, los dos medios a favor de la democracia más influyentes de Hong Kong, se vieron obligados a cerrar después de que arrestaron a los miembros principales del personal por colusión con extranjeros de conformidad con la ley de seguridad nacional, y por sedición de conformidad con la ordenanza colonial de delitos de la ciudad. Con la campaña contra los medios independientes, se desarticularon más de una docena de medios en línea.
Leyes represivas
Según RSF, se ha procesado al menos a 28 periodistas tras la promulgación de la de seguridad nacional. Además de las acusaciones impuestas en conformidad con la de seguridad nacional, algunos periodistas fueron acusados por otros delitos, como sedición, disturbios, entrada ilegal al Consejo Legislativo, declaración falsa para acceso a información, entre otros.
El artículo 23 promulgado recientemente considera nuevos delitos, incluidos “robo de secretos de Estado” y “espionaje”, que socavan el trabajo periodístico puesto que la ley define ampliamente “secretos de Estado” alineada con el marco legal de China continental, que abarca ámbitos que incluyen decisiones políticas importantes, desarrollo económico y social, ciencia y tecnología, defensa nacional y diplomacia, etc.
De manera similar, la definición de “actividades de espionaje” comprende participación y apoyo, desde integrar hasta dar apoyo económico o información, reclutar miembros para una organización y obtener ventajas sustanciales que ofrece una organización. Tal definición puede desalentar a los periodistas independientes que trabajan para medios extranjeros.
El alcance de la sedición también se amplía para abarcar la incitación al odio o la enemistad entre habitantes de la Región Administrativa Especial de Hong Kong o entre habitantes de diferentes partes de China. Esto sumado a que la pena máxima aumenta de dos años, que establece el derecho penal, a diez años de conformidad con el nuevo artículo 23.
Palabras amenazantes a los medios
Las autoridades de Hong Kong han enviado al menos siete cartas de desaprobación a los medios extranjeros, como BBC, The Times, The Guardian, The Washington Post, The New York Times y Bloomberg, por publicar informes y comentarios “engañosos”, “alarmistas” y “falsos” sobre el artículo 23. Según Bloomberg, para proteger su reputación desde 2020, el Gobierno de la ciudad ha enviado más de 500 cartas a 174 medios extranjeros de 30 países, en las que critican fuertemente la cobertura negativa sobre Hong Kong.
Los medios locales se han visto presionados para censurar las opiniones críticas. El ejemplo más conocido es la eliminación de la columna de Zunzi en Mingpao en abril después de que funcionarios del Gobierno de Hong Kong lo acusaran repetidamente de “incitar al descontento público con el Gobierno”.
Cadena pública RTHK perdió su independencia
Después de que el Gobierno de Hong Kong reestructuró la dirección de la emisora pública Radio Television Hong Kong (RTHK) en mayo de 2021 y designó a Patrick Li, funcionario público sin experiencia periodística, como director de la emisora, esta ha cancelado programas, ha borrado contenido almacenado en línea, ha filtrado contenido de su cuenta de Twitter, ha emitido directrices sobre el uso de términos aprobados por Pekín y se ha asociado con China Media Group para transmitir más programas producidos por medios estatales de China para “fomentar mayor sensación de patriotismo” entre los espectadores.
Supresión de grupos de periodistas independientes
El Club de Corresponsales Extranjeros y la Asociación de Periodistas de Hong Kong han estado bajo una enorme presión política, ya que los medios financiados por el Estado chino han criticado reiteradamente a los grupos de periodistas independientes por coludirse con extranjeros y por incitar a la independencia de Hong Kong.
En abril de 2022, el Club de Corresponsales Extranjeros se vio forzado a cancelar sus premios al Periodismo sobre Derechos Humanos para evitar riesgos legales. Respecto a la Asociación de Periodistas de Hong Kong, la administración tributaria de Hong Kong exigió al sindicato profesional pagar impuesto sobre las ganancias equivalente a 400 000 dólares hongkoneses (aproximadamente 51 000 dólares estadounidenses) que se remonta a 2017 y 2018.
Más recientemente, al acto de la Asociación de Periodistas de Hong Kong para recaudar fondos tuvo que hacerse en línea puesto que el recinto dejó sin efecto el acuerdo de presentarlo por una “fuerza irresistible”: nuevo término para referirse a la presión política.
Acoso a periodistas
Muchos periodistas que trabajan en Hong Kong han notado que personas no identificadas los siguen o los vigilan. Desde la promulgación de la ley de seguridad nacional en 2020, cientos de periodistas profesionales y periodistas ciudadanos se han visto obligados a irse de la ciudad, y solo un tercio de los periodistas profesionales pueden continuar su carrera en el extranjero. RSF calculó que un mínimo de 900 periodistas perdieron sus trabajos debido al cierre de medios independientes.
Delito de expresión e inquisición literaria
Los delitos contra la seguridad nacional en conformidad con la ley de seguridad nacional y con el artículo 23, como subversión estatal, colusión y sedición son delitos relacionados a la expresión. Por consiguiente, a menudo se presentan artículos y comentarios periodísticos como evidencia ante tribunales. Por ejemplo, en el juicio a Stand News, las autoridades policiales expusieron 587 artículos al presentar el caso. Luego, el fiscal expuso 17 textos como evidencia sobre la acusación por sedición ante el tribunal contra los dos exjefes de redacción de Stand News.
Hasta julio de 2023, había 155 acusaciones relacionadas a la seguridad nacional. La mayoría se basaba en evidencia relacionada a la expresión como comentarios, lemas, discursos públicos, publicaciones en redes sociales, etc.
Se impide la entrada de periodistas a la ciudad
Después de la aprobación de la ley de seguridad nacional en 2020, en Hong Kong se rechazaron la visa de trabajo de varios periodistas extranjeros que trabajaban para New York Times, The Economist y Hong Kong Free Press. En 2023, se le negó la entrada a Hong Kong a un mínimo tres periodistas independientes, como Michiko Kiseki, Yoshiaki Ogawa y el reportero estadounidense Matthew Connors.
Clasificación de libertad de prensa
Hong Kong está en el puesto 140 de un total de 180 en la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa de 2023 de RSF, bastante más abajo que el puesto 18 de 2002.