La tensión continúa en el territorio francés de ultramar de Nueva Caledonia. En mayo, estallaron protestas y disturbios por la aprobación de un proyecto de ley en la Asamblea Nacional francesa, que habría diluido el poder de voto de la población indígena kanak.
Ya han muerto nueve personas, 212 policías y gendarmes han resultado heridos, hay más de mil detenidos o acusados, y 2700 turistas y visitantes han debido ser repatriados. Los disturbios desencadenaron saqueos e incendios de comercios, que a mediados de junio causaron daños económicos estimados en 200 millones de dólares. Se calcula que se han perdido 7000 puestos de trabajo.
El presidente francés, Emmanuel Macron, llegó el 23 de mayo para intentar aliviar la tensión en el territorio del Pacífico, pero su visita no logró este objetivo, pues se limitó a suspender la aplicación de la ley, pero desatendió el pedido de diálogo sobre cómo proceder con el proceso de descolonización. También desplegó otros 3000 soldados para restablecer la paz y el orden, lo que hizo enfurecer aún más a la población local.
Grupos del Pacífico condenaron la decisión de Francia de enviar más tropas a Nueva Caledonia:
These measures can only perpetuate the cycle of repression that continues to impede the territory’s decolonisation process and are to be condemned in the strongest terms!
The pace and pathway for an amicable resolution of Kanaky-New Caledonia’s decolonisation challenges cannot, and must not continue to be dictated in Paris.
Estas medidas solo perpetuarán la represión que sigue impidiendo el proceso de descolonización del territorio, ¡se les debe condenar con el mayor repudio posible!
El ritmo y el camino que se tome para resolver pacíficamente los desafíos de la descolonización de Kanaky-Nueva Caledonia no pueden ni deben seguir dictándose desde París.
También criticaron a los funcionarios y partidarios franceses por culpar de los disturbios únicamente a las fuerzas independentistas.
Whilst local customary, political, and church leaders have deplored all violence and taken responsibility in addressing growing youth frustrations at the lack of progress on the political front, loyalist voices and French government representatives have continued to fuel narratives that serve to blame independence supporters for hostilities.
Aunque líderes locales, políticos y eclesiásticos han condenado todos los actos de violencia y han asumido la responsabilidad de abordar la creciente frustración de los jóvenes ante la falta de avances en el frente político, las voces oficialistas y los representantes del Gobierno francés han seguido alimentando narrativas que culpan a los independentistas de las hostilidades.
Joey Tau, de la Red del Pacífico sobre Globalización, recordó que la mano dura de Francia también provocó enfrentamientos violentos en la década de 1980 que tuvieron como resultad0 la redacción de un acuerdo de paz.
The ongoing military buildup needs to be also carefully looked at as it continues to instigate tension on the ground, limiting people, limiting the indigenous peoples movements. And it just brings you back to, you know, the similar riots that had in before New Caledonia came to an accord, as per the Noumea Accord. It's history replaying itself.
También hay que analizar con detenimiento la actual concentración militar, ya que continúa instigando tensiones sobre el terreno, limita a las personas y restringe los movimientos de los pueblos indígenas. Todo esto nos remite a los disturbios que tuvieron lugar antes de que Nueva Caledonia llegara al Acuerdo de Noumea. La historia se repite.
La situación en Nueva Caledonia se abordó en el Comité Especial de Descolonización C-24 de Naciones Unidas el 10 de junio. El reverendo James Shri Bhagwan, secretario general de la Conferencia de Iglesias del Pacífico, intervino en la asamblea y acusó a Francia de desatender las demandas de la población indígena.
France has turned a deaf ear to untiring and peaceful calls of the indigenous people of Kanaky-New Caledonia and other pro-independence supporters for a new political process, founded on justice, peaceful dialogue and consensus and has demonstrated a continued inability and unwillingness to remain a neutral and trustworthy party under the Noumea Accord.
Francia ha hecho oídos sordos a los llamados incansables y pacíficos de los pueblos indígenas de Kanaky-Nueva Caledonia y otros partidarios de la independencia, que piden un nuevo proceso político basado en la justicia, el diálogo pacífico y el consenso. En cambio, ha demostrado incapacidad y falta de voluntad constantes para seguir siendo una parte neutral y digna de confianza en virtud del Acuerdo de Numea.
Philippe Dunoyer, uno de los dos ciudadanos de Nueva Caledonia que ocupan escaños en la Asamblea Nacional francesa, teme que la disolución del Parlamento, las elecciones anticipadas anunciadas recientemente por Macron y la celebración en París de los Juegos Olímpicos ahoguen aún más la cobertura informativa sobre la situación en el territorio del Pacífico.
This period will probably not allow the adoption of measures which are very urgent, very important, particularly in terms of economic recovery, support for economic actors, support for our social protection system and for financing of New Caledonia.
Este periodo probablemente no permitirá que se aprueben medidas que son muy muy importantes, sobre todo en términos de reactivación económica, apoyo a los agentes económicos, al sistema de protección social y la financiación de Nueva Caledonia.
La líder sindical Mélanie Atapo sintetizó el sentir de los manifestantes independentistas, que dijeron a las autoridades francesas que «no se puede negociar con una pistola en la cabeza» y que «todo es negociable, salvo la independencia». Añadió:
In any negotiations, it is out of the question to once again endorse a remake of the retrograde agreements that have only perpetuated the colonial system. Today, we can measure the disastrous results of these, through the revolt of Kanak youth.
Cualquier negociación que vuelva a avalar una nueva versión de los acuerdos retrógrados que solo han perpetuado el sistema colonial es totalmente inaceptable. Si hay algo que la rebelión de la juventud canaca ha demostrado, es cuán desastrosas han sido las consecuencias de ese sistema.
Mientras tanto, el Foro de las Islas del Pacífico reiteró su propuesta de abrir un «espacio neutral para que las partes se reúnan en el espíritu de la Vía del Pacífico, para así encontrar una forma común de avanzar».